Soplo salvaje
Sinopsis de la película
Jeff Dawson regresa a la empresa de su antiguo jefe, Ward Paco Conway (Anthony Quinn), que ahora se ha convertido en un hombre rico gracias al petróleo, pero éste le rechaza porque le dominan los celos, ya que sabe que Jeff tuvo algo en el pasado con su mujer, la seductora Marina (Barbara Stanwyck). Dawson está enamorado de otra chica, Sal (Ruth Roman), pero Marina, al enterarse de su regreso, decide reconquistarlo. Entretanto, El gavilán, un bandolero chantajista, amenaza a Conway con destruir su compañía si no accede a pagar una cuota de protección. Todas las pasiones y peligros estallarán en un imprevisible desenlace.
Detalles de la película
- Titulo Original: Blowing Wild
- Año: 1953
- Duración: 90
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Opinión de la crítica
6.5
96 valoraciones en total
No es un western, la historia se desarrolla en el mismo año que fue hecha la película, en las tierras cálidas de Méjico, y el petróleo como protagonista.
Este director argentino tiene en su haber alguna que otra peli interesante, como Harry Black y el tigre , o Martes negro .
Aquí como he dicho el petróleo es el protagonista y los bandidos saboteadores, pero ese no será el único problema, pues está Barbara Stanwyck, y cuando ella se enamora… mejores que no te pille cerca.
El guión de Philip Yordan no me ha gustado tanto como en otras ocasiones, aun así no está mal, sobretodo me ha gustado más cuando el personaje de Stanwyck cobra más fuerza.
La música de Dimitri Tiomkin es junto al reparto lo que más me ha gustado.
En fin, una película algo más que interesante.
Irregular drama ambientado como un western moderno donde los pozos de petróleo quitaron el romanticismo al viejo Oeste y donde los caballos se cambian por deportivos de lujo. Dos antiguos socios enamorados de la misma mujer, que contrae matrimonio con uno de ellos estando enamorada del otro, lo que nos lleva a la aparición del fantasma de los celos y lo que los mismos provocan.
Aunque la dirección no logra enderezar en ningún momento la trama, el film es salvado por su excelente trío protagonista donde destaca con luz propio Barbara Stanwyck, la mujer fatal por excelencia, con un sobrio y eficaz Gary Cooper y una maravillosa actuación de Anthony Quinn, un gran actor sin duda que sabe interpretar con solvencia múltiples roles aportando siempre dosis de humor y talento a partes iguales.
Destacar también la participación de Ruth Roman y de un secundario de auténtico lujo como Ward Bond.
Interesante, 6.
Parece que empieza como un western, pero rápidamente Blowing Wild (Soplo Salvaje, 1953) se desmarca del género. La película se ubica en el mismo año en que se produce, y nos muestra una historia con algunos matices interesantes, como es el caso de utilizar un marco contemporáneo, en una película que a pesar de todo, sí tiene regustos del género western. La película la dirige Hugo Fregonese, un director argentino que llegó a dirigir alguna película de segunda (es el caso que nos atañe) en Hollywood pero que acabaría su carrera olvidado, incluso dirigiendo subproductos en tierras españolas.
La película cuenta con un reparto de lujo, totalmente excepcional. Gary Cooper, Barbara Stanwyck, Anthony Quinn…Actores en estado de gracia, que elevan la categoría del filme muy por encima de lo que es su guión y puesta en escena. Cooper es el protagonista principal. Como decía, el filme reaprovecha muchos elementos del Western, y eso resulta muy palpable precisamente en el personaje que interpreta Cooper. Y es que no dista mucho la concepción de este personaje de la que podemos encontrar en el Sheriff Clásico del Western. Hombre lleno de valor y unos principios morales muy fuertes, se encuentra en una desoladora posición económica, después de haber fracasado en su último intento de construir un pozo petrolífero en México. La película nos lo presenta deambulando en la primera parte del filme, hasta que se encuentra con un antiguo amigo, que interpreta Anthony Quinn.
Hugo Fregonese realiza una película que muestra una estética muy poco oficialista. La miseria parece muy explícita en numerosos momentos del filme. Desde el propio personaje protagonista, que estéticamente ya muestra un sentido poco convencional (sucio y mal cuidado) hasta el ambiente donde transcurre la película (bien es cierto que al no mostrar tierras americanas el filme puede explayarse más en la descripción de la pobreza) o incluso elementos como el grupo de Bandoleros, que tienen un poder por encima de la ley que tienen aterrorizados a toda la sociedad.
En la segunda parte de la película, Cooper accede a trabajar con su antiguo compañero, el personaje que interpreta Quinn. Sin embargo, los bandoleros seguirán haciendo su acto de aparición. Aunque ciertamente, lo más llamativo así como lo mejor desarrollado en el filme lo encontramos en el cuarteto amoroso (porque no sería justo decir triangulo amoroso) que se establece entre los diversos personajes que participan en el desarrollo del filme. Entre Gary Cooper y Barbara Stanwyck se desata una turbulenta relación que viene de mucho antes y que recupera viejos tiempos entre los dos. Anthony Quinn a su vez ve frustradamente como el amor entre él y su pareja (Stanwyck) se está desvaneciendo. A pesar de la voluntad con la que se presta el personaje de Quinn, no consigue enderezar la situación. Pero esto no queda aquí, porque también aparece en escena el personaje que interpreta Ruth Roman, y que parece compenetrarse con Gary Cooper, con quien se verá en numerosas ocasiones. Sin duda, una de las mejores bazas de Soplo Salvaje la encontramos precisamente en las diferentes relaciones que disecciona la película. Seguramente porque este juego de caracteres no es demasiado habituales en una película convencional de los años cincuenta.
Cada uno de los actores muestra sus dotes y sabe camuflar sus registros. Quinn sabe enseñar un perfil de hombre salvaje y brutal, aunque bondadoso en el fondo. Cooper es el actor perfecto que a pesar de mostrar una capa aparente de resignación, sigue creyendo en el honor y la palabra. No es menos digno el papel de las intérpretes femeninas. Marina Conway es una mujer que casi podríamos decir que borda el papel de Femme fatale, o un registro ciertamente parecido. Mientras que Ruth Roman seguramente realiza seguramente la mejor actuación de la película, mostrando una frialdad y atracción a pares iguales.
Sin embargo, no son todo virtudes en Soplo Salvaje. El guión por ejemplo, acaba naufragando en algunos lugares comunes, y especialmente en un final que resulta demasiado precipitado. La relación con los bandoleros y la extorsión que anuncian sobre nuestros protagonistas se acaban resolviendo de una manera muy simple y el clímax no es un broche demasiado complejo. Fregonese cierra el filme con muchas prisas.
La Banda sonora, que compone Dimitri Tiomkin tiene un tema principal realmente bueno, que aúna la música tradicional del western (de la que Tiomkin fue uno de sus pilares más sólidos) con un tema coral ciertamente adictivo. Una lástima que para el resto de la banda sonora Tiomkin no logrará el mismo nivel de inspiración.
https://neokunst.wordpress.com/2015/04/11/soplo-salvaje-1953/
Vista ya en el momento de su estreno en España, allá por los comienzos de los cincuenta, mi vuelta a ella ha sido provocada por el recuerdo de la canción con que se inicia la película y que fue popularizada en la voz de Frankie Laine.
La película contó con tres espléndidos actores como fueron Gary Cooper, Barbara Stanwyck y Anthony Queen. De Ruth Roman apenas se puede hablar por la brevedad de su papel. Los personajes encarnados por los primeros encajan con la personalidad de los actores.
Sorprende en ocasiones el esquematismo con que se presenta el guion que no trata en ningún momento en profundizar en ninguno de los problemas presentados. Hay, en general, una clara tendencia a la desdramatización de las situaciones que resuelven con extraña rapidez. Todo ello da a la película un cierto de aire de frialdad y lejanía. Pero con ello es indudable que logra un cierto atractivo.
En ese esquematismo, Gary Cooper adopta esa actitud de nobleza y rectitud que en tantas ocasiones ha representado. Junto a él, el bueno, aparecen los restantes personajes igualmente estereotipados: la mala, el desnortado, la buena y hasta una especie de Dr. Watson. El petróleo, los policías y los bandidos son simples elementos del decorado.
Por encima de todo, la música de Dimitri Tiomkin. La que recordaba.
La película es entretenida y corta. Gary Cooper interpreta el mismo papel de siempre. Barbara Stanwyck también está en lo suyo. Personajes arque-típicos sin más. Si no se le pide mucho pues la tarde te la echas.
Si se está concienciado con la perspectiva de género pues se disfruta bastante menos pero siempre hay la opción de hacerse la loca y disfrutar del hombretón de Gary.