Salvar o morir

3 comentarios en «Salvar o morir»

1. Película francesa basada en hechos reales sobre cómo un bombero se quema la mayor parte de la piel en su trabajo y tiene que afrontar una nueva vida desde ese momento, ofreciendo una película emotiva, conmovedora, con una genial actuación de Pierre Niney y siendo totalmente realista, algo que la lastra un poco en cuanto a la historia, ofreciendo apenas giros de guion y siendo algo plana en su recuperación, llegando en pequeños momentos a resultarte algo pesada y algo larga.
   
   El problemilla que tiene esta película es que no va a nada más que su sinopsis dice y cuando todo lo que se dice en la sinopsis se ve, después la película empieza a ser un poco pesada y como que baja en cuanto a emoción y entretenimiento, siendo tan realista que a veces se te hace algo pesada con su en mi opinión excesiva duración de casi dos horas, pero está claro que tiene muchas más cosas positivas que negativas, ofreciendo una gran película basada en hechos reales, con una excelente actuación de Pierre Niney y dando su gran toque de emotividad, realismo y conmoviendo, debido a un gran labor en la narrativa del director, además de unos perfectos maquillajes para ser lo más realista posible. Realizando en definitiva un buen drama francés, muy entretenida, realista, conmovedora, emotiva y con un genial Pierre Niney, aunque la lastra un poco su excesiva duración y las pocas ganas de contar una historia más allá de su sinopsis y de superación que ya hemos visto más veces, aún así una película más que recomendable para lo que significa ser humano.

2. *Las víctimas principales y las colaterales
   
   Si te gustan las historias humanas y de superación, esta es tu película. Si te gusta llorar en el cine, te gustará. Salvar o morir nos relata como la carrera y la vida de un prometedor bombero recién ascendido a liderar un pelotón, se truncan al priorizar por encima de su propia seguridad la de salvar a algunos de sus hombres que han quedado atrapados en el fuego. Su acción heroica le comportará graves quemaduras y estar varios meses en coma. Cuando despierta, ya nada será lo mismo. Deberá aprender a reconstruir su vida, al tiempo que se reconstruye su rostro.
   
   El argumento bien podría ser el de un serial televisivo de media tarde. Por suerte, Frédéric Tellier, evita casi siempre caer en el folletín y se centra en los aspectos más psicológicos de las secuelas producidas por el accidente. Para él, como la víctima física del accidente, pero también para su mujer y sus hijas, como víctimas colaterales que deberán lidiar igualmente con tan complicada situación.
   
   Para darle la credibilidad necesaria, se sirve de dos intérpretes estupendos como son Pierre Niney (Frantz, Jacques) y Anaïs Demoustier (Los consejos de Alice, Gloria Mundi), por la que reconozco siento debilidad. Hay una buena química entre ambos y sus secuencias juntos rezuman verdad.
   
   *Presentación, nudo y desenlace
   
   Salvar o morir tiene una primera media hora a modo de introducción. En ella se aprovecha para presentarnos a sus personajes y, de paso, completar un pequeño homenaje al cuerpo de bomberos y la gran labor ciudadana que desempeñan. Por momentos, casi parece un comercial publicitario para mostrar sus virtudes. Después, llega el giro dramático que mueve la historia hacia el drama hospitalario.
   
   En ese tramo central, hay de todo. Encontraremos momentos verdaderamente emotivos que nos harán soltar la lagrimita. Hay otros que desconciertan un poco por las acciones de los personajes (algunas discusiones absurdas, la innecesaria secuencia en la que obliga a su mujer a desnudarse, etc).
   
   Se pone en relieve la capacidad de superación humana, tanto física como mental, para vencer las mayores adversidades que nos plantea la vida. En ese fragmento destaca la presencia de la actriz Chloé Stéfani, sus escenas elevan el interés dramático. Toda la parte final busca ofrecer un mensaje optimista y no caer en el melodrama más amargo. Encuentra una manera de hacerlo bastante aceptable, sin buscar que nos acabemos la caja de kleenex, lo que se agradece.
   
   *Conclusión
   
   Salvar o morir es un melodrama bastante correcto sobre la superación del ser humano. Asistiremos al proceso de reconstrucción de la vida de un hombre, al tiempo que se reconstruye su rostro y su cuerpo. Será un aprendizaje vital que pondrá en valor las cosas que importan. El film está dirigido por con sensibilidad por Frédéric Tellier, sin caer del todo en el melodrama telenovelesco, aunque su pulso narrativo es irregular y sufre algunas arritmias durante el desarrollo.
   
   La película se beneficia de unas buenas interpretaciones, destacando el trabajo de la pareja protagonista formada por Pierre Niney y Anaïs Demoustier. Sus miradas otorgan la credibilidad necesaria a las imágenes. Si te gustan los dramas humanos y sacar el pañuelo en el cine, tienes una buena opción con esta película francesa.
   
   Escrito por Daniel Farriol

3. Realmente, hay una crítica que dice una frase que podría resumir esta película Te cuenta lo que viene en la sinopsis sin más . Realmente es así porque no te quiere llevar a ningún camino específico, más allá de la valentía de un héroe después de sufrir un cambio gigante en su vida. Utiliza los elementos típicos del cine del estilo, aunque con un acercamiento de los tratos por lo que tuvo que pasar en el hospital y profundizando en la vida familiar y de pareja, como es normal después de lo pasado. Muchos momentos por si solos no reclaman nada pero tiene una buena banda sonora que provoca ciertos niveles de tristeza en los espectadores, pero eso es un truco bastante superficial. Pienso que la película dura algo más de lo que debería de durar, pero son películas lentas que necesitan de una clara y específica introducción en la mente de la persona que tiene que someterse a tantos cambios en su vida de forma tan rápida. El actor Pierre Niney creo que hace un papel bastante bueno metiéndose bien en el papel. El resto del elenco principal también realiza una actuación notable con la sintonía de la película. Por último, comentar que me parece irónico que entre algunas escenas y otras se opte como transición un fundido de la pantalla.