Pintores y reyes del Prado
Sinopsis de la película
Documental sobre el Museo Nacional del Prado, en el 200 aniversario de su fundación, conducido por el actor Jeremy Irons. Una producción que explica, mediante multitud de obras maestras de la pintura, la historia del museo y la historia de un país. Porque una pintura es lienzo, color, materia y forma, pero también es la historia de hombres y mujeres, pintores y reyes, palacios y reinas, riqueza y miseria, cuerpo y alma.
Detalles de la película
- Titulo Original: The Prado Museum. A Collection of Wonders
- Año: 2019
- Duración: 90
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Opinión de la crítica
Película
7.1
99 valoraciones en total
Lo que podría ser una gran documental sobre las obras de arte del Prado, se queda en un popurrí de anécdotas desordenadas sin mucho sentido.
Yo después de 90 min me he quedado con la sensación que poco he aprendido de las pinturas o de la historia de los monarcas.
Me temo que cualquier documental de pintura de la BBC es superior a este.
Aseguraba Francisco Umbral que una buena colección de clásicos de la literatura, en formatos populares y a precios asequibles, hacía más por la educación de los ciudadanos que cualquier otro plan educativo emanado de los humanos propósitos (o despropósitos). Comparto plenamente esta idea, añadiendo quizás, que esta Educación literaria, no quedaría perfectamente redondeada y perfeccionada, si no la completáramos mediante la contemplación de alguna de las grandes obras de arte que atesora nuestro Museo Nacional del Prado, cuyo bicentenario celebra este magnífico documental.
Con un atuendo en algún punto intermedio entre jinete del Grand National y selenita de turismo por Madrid (y que con tanta elegancia luce), el actor británico Jeremy Irons guía brillantemente al espectador a través de diversas salas y espacios de la pinacoteca, contando con el apoyo, cuando las cuestiones más técnicas así lo requieren, de alguno de los grandes especialistas con los que cuenta el Museo.
No se me ocurre mejor incentivo para visitar el Prado, ni mejor reconocimiento a los profesionales que diariamente allí desempeñan su labor, que este documental tan magníficamente conducido por Jeremy Irons, cuya maravillosa voz bien merecería, de ser esto posible, ser expuesta junto alguna de las grandes obras del Museo inmortal.
*Jeremy Irons nos guía por el museo del Prado y sus entresijos
La película documental, dirigida por Valeria Parisi, está presentada y narrada por el actor Jeremy Irons, pero también se incluyen entrevistas a personajes vinculados con la institución como el director del Prado, Miguel Falomir, o el arquitecto Norman Foster, así como otros técnicos, especialistas, o trabajadores del museo. Mientras tanto, vamos contemplando algunas obras expuestas, otras en proceso de restauración e imágenes de archivo relacionadas con la apasionante historia de la pinacoteca, como las fotografías de la salida de los cuadros de España durante la Guerra Civil.
*La historia de un imperio
Irons nos guía por un viaje que empieza con la contemplación de La Gloria, aquel cuadro que conmovió al emperador Carlos V y a cuyo artista, Tiziano, han imitado tantos pintores desde entonces. Porque este no es un recorrido cronológico lineal, que comience con la inauguración del museo el 19 de noviembre de 1819 por el Rey Fernando VII. Así como tampoco se constriñe la película a los muros y estancias de la pinacoteca, ya que la historia del Prado es la historia de España y, sobre todo, de la monarquía española, que construyó un imperio que se extendía a varios continentes.
También es el legado de todos aquellos reyes que fueron atesorando obras de arte (de pintores españoles, flamencos, italianos…) en sus palacios, monasterios…, y que más tarde pasarían a la pinacoteca nacional.
*Mujeres artistas
Pintores y reyes del Prado tampoco rehúye la problemática actual de la infrarrepresentación de las mujeres en este tipo de espacios. Y subraya el hecho de que durante muchos años, las mujeres estaban vetadas como espectadoras en algunos espacios del museo, así como, por supuesto, ignoradas como artistas.
*Para amantes de la historia del arte
Pintores y reyes del Prado gustará a todos aquellos que disfruten del arte y de la historia, hayan visitado alguna vez el Prado o no. Está dirigida a todos aquellos que gocen de la contemplación de grandes obras de la pintura universal, o de algunos datos históricos curiosos, como el hecho de que en sus inicios la pinacoteca recibía tan solo mil visitantes anuales… En definitiva, para los que quieran realizar un recorrido cinematográfico por la historia del arte desde la comodidad de su butaca y guiados por un actor oscarizado como Jeremy Irons.
Escrito por Patricia Esteban Baena
Antes de verlo estás igual que después. Cada frase ha sido medida y tiene intenciones políticas. Mal estructurado, repetitivo (y mira que hay cuadros en el museo). No aporta nada, alguna anécdota aburrida y tres brochazos.
Pocas cosas hay más difíciles que dar hoy en día con una película medianamente decente, hasta el punto de que, a juzgar por la cartelera habitual de algunos locales, muchos cines más parecen centros de propaganda y de lavado de cerebro que cualquier otra cosa. Como consecuencia de ello la población masculina, salvo escasas excepciones, ha dejado de acudir a los cines no comerciales, y prefiere pasarse la tarde visionando series de Fakeflix. En este contexto, los documentales sobre pintores y sobre arte en general se han convertido para mucha gente, entre los que me incluyo, en un auténtico alivio. Cuando se apagaban las luces de la sala uno podía estar seguro hasta hace muy poco de que, al menos por una vez, nadie iba a aprovechar la oscuridad para intentar meterte un gol.
No obstante, si alguien pensaba haber encontrado un refugio o un oasis casi inexpugnables, se equivocó de medio a medio. Ya sé que es difícil colar basura del NOM en un documental sobre un museo, pero esta obra demuestra sin lugar a dudas que no es imposible.
El Museo del Prado, a pesar de ser uno de los más importantes del mundo, es vox populi que cuenta con una gestión pésima, compuesta en buena parte por enchufados por motivos políticos. Incluso he leído en alguna parte que algunos cientos de obras de sus fondos simplemente han desaparecido sin dejar rastro y sin que, para variar, nadie se haga responsable de la pérdida.
Nada de eso me extraña demasiado tras ver esta película. Ni uno solo de los especialistas y directivos que intervienen en la misma se muestra capaz de formular una sola idea propia, limitándose a encadenar un tópico tras otro, como quien descubre la sopa de ajo. El caso más extremo es la hija de Antonio Saura quien, en lugar de hablar de los cuadros, se dedica a narrar redichas anécdotas de su infancia, como si por fuerza, siendo hija de quien es, nos tuvieran que interesar a todos. No obstante, el resto del personal también merece la pena.
Por supuesto, no podía fallar Norman Foster, el arquitecto estrella que se ha convertido en la salsa de todos los guisos masónicos. Ni tampoco podían faltar alusiones feministas ya que, al parecer, las mujeres se encuentran infrarrepresentadas…
(Echémonos a temblar, esto huele a cuotas).
Y, por supuesto, algunas gotas de postureo inclusivo y LGTBIK siempre hacen bonito… En consecuencia, como quien no quiere la cosa, la señora directora se las arregla para introducir aquí y allá como con calzador un ridículo taconeo flamenco con toques lésbicos, tan grotesco que le obliga a uno a torcer el gesto.
De propina y como telón de fondo, ¡cómo no!, la terrible dictadura de Francisco Franco que vino a poner fin a la era angelical y dorada de la Segunda República.
¡Vaya por Dióo!
En fin, que como canta el refrán, cuando las ganas de j…r aprietan, ni los c…s de los muertos se respetan .
Mis felicitaciones a Valeria Parisi y a los entrevistados por haber conseguido la difícil proeza de arruinar con sus manipulaciones incluso un inocente documental sobre un gran museo.
La fotografía excelente, por cierto. Jeremy Irons, en cambio, ni fu ni fa, pero no toda la culpa es suya.