No habrá más penas ni olvido
Sinopsis de la película
Festejada adaptación de la novela homónima del escritor argentino Osvaldo Soriano, que propone una mirada crítica no exenta de humor de la realidad política argentina. La película transcurre en un pequeño pueblo, en el que se enfrentan dos facciones del peronismo: una encabezada por el intendente, y otra representada por el delegado municipal. La película recibió varios premios entre ellos el del Festival del Cine de Berlín.
Detalles de la película
- Titulo Original: No habrá más penas ni olvido
- Año: 1983
- Duración: 80
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Opinión de la crítica
Película
7
80 valoraciones en total
265/12(08/07/21) Decepcionante film argentino que por las críticas leídas me había creado expectativas atractivas, pero me ha resultado caótico, de un pobreza de medios patética, y con una historia rocambolesca, donde o entras sabiendo de que va la historia del país andino a mediados de los 70 o te quedarás más perdido que Forrest Gump en la entrega del Premio Nobel. Cinta dirigida por Héctor Olivera, con guión de Roberto Cossa (El arreglo) y Olivera, basada en luna popular novela homónima de Osvaldo Soriano, narrando las etapas iniciales de la Guerra Sucia en la pequeña ciudad ficticia de Colonia Vela a principio de los 70, donde se establece una batalla entre dos facciones peronistas (la izquierdista y la derecha). Título de la novela tomado de la letra de un tango cantado por Carlos Gardel en los años treinta y aún conocido de memoria por argentinos de todas las edades, literalmente se traduce en (un lugar o un momento en el que) no habrá sufrimiento ni olvido y está asociado con el regreso de Perón, que ocurre en algún momento antes de que se lleve a cabo la acción. Posee un elenco de actores estimables como son Federico Luppi, Víctor Laplace, Héctor Bidonde, Rodolfo Ranni, Miguel Ángel Solá, Julio De Grazia, Lautaro Murúa, Graciela Dufau, Fernando Iglesias o Ulises Dumont.
La película se inicia como una farsa amena y ágil, una especie de parodia que intenta mostrar el absurdo del conflicto civil, con buenos momentos de humor negro. Pero en esta parte me falta descripción dela situación, expuesta en un par de brochazos, para después entrar en lo que será el grueso del film, una batalla campal, donde se mezcla idealismo (el del personaje de Luppi), escuadrones de la muerte (La Triple AAA), militarismo voluble, caciques sádicos (Guglielmo), torturas, tiroteos, muertos, avionetas lanzando mierda (Cervino con su Toro), ejecuciones, explosiones, ello en un avance que va de más a muy menos, cayendo en la astracanada, alimentado por unos personajes pasados de vueltas. Para a partir de la mitad la cinta virar a algo cruel excesivo donde la gracia se pierde en pos del horror, pero sin que realmente el espectador sepa bien que es lolo que ideas contrapuestas se enfrentan, más allá de las etiqueta de bolcheviques y fascistas.
Es un batiburrillo de situaciones violentas en increscendo, donde en el pueblo parecen haber desaparecido los vecinos, donde la cariñosa esposa del rol que encarna Luppi, parece tendrá peso dramático y no aparece más que en la despedida al inicio. Y más situaciones fallidas que intentan impactar al espectador en su mezcla de sardonismo y atavismo que no hace más que alejarme de los personajes, pues nunca he conectado con ellos, pues son escasamente clichés con patas y ojos. Dando como resultado que me importa entre cero y nada lo que les pase a los protagonistas.
‘El Partido Peronista allá por 1974, durante el tercer mandato del presidente J.D.Perón, la JP (Juventud Peronista), la policía del pueblo, los empleados municipales, un borracho, un piloto idealista, la pesada del peronismo (AAA) y los curiosos del pueblo.’ Caldo de cultivo para la representación en lo micro de un pueblecito de lo macro de una nación en ebullición, que al explotar parirá la dictadura militar.
Lo único que entresaco de que los dos bandos ensalcen a perón, es que este era un cáncer y sus populistas ideas han hecho metástasis en Argentina. Alguien que igual lo adora la derecha como glorifica la derecha es el epítome del populismo.
Se puede entrever que hay una buena historia tras este desbarajuste, pero le hace falta una muy mejor dirección que haga nos enganchemos al lioso argumento. Fuerza y honor!!!
No habrá más penas ni olvido es una película dirigida por Héctor Olivera. Esta sirve como reflexión sobre la caótica situación que atravesaba la Argentina en los años que precedieron al proceso de reorganización nacional.
El guión es preciso y compacto, no derrocha escenas ni personajes y dice todo lo que necesita en cerca de ochenta minutos. La acción se desarrolla el pequeño pueblo de Colonia Vela, provincia de Buenos Aires. El año es 1974, en esta época el peronismo era el partido dominante y la disidencia política era perseguida. Un delegado municipal con tendencias de izquierdas es falsamente acusado de comunista y decide tomar la municipalidad por las armas, ayudado por un pequeño grupo de improvisados aliados, para exigir su absolución. A continuación se desatará una inútil y destructiva contienda entre la izquierda y derecha peronista que servirá para enfatizar el absurdo de las rencillas internas que sembraron el caos y abonaron el terreno para la dictadura de extrema derecha que tomaría el poder de Argentina en 1976.
La película no solo se contenta con transmitir su mensaje, Olivera la presenta con dinamismo y espectáculo que recuerdan a las producciones estadounidenses de la época, aunque sin caer en el ridículo. Abundan los tiroteos, explosiones y efectos especiales en esta producción que sirve a la vez como versión precursora y superior de las que Héctor Olivera dirigió con el productor norteamericano Roger Corman en años posteriores (véase La muerte blanca, de 1985).
A demás del espectáculo, la historia se desarrolla con una buena dosis de humor que sirve para resaltar el absurdo de la situación que se presenta. Este tono humorístico es respaldado por el reparto, rebosante de talento. Todos estos aspectos ayudan a crear un tono de familiaridad y complicidad con el espectador, esta atmósfera de comodidad es violentamente ultrajada en la segunda mitad de la película, conmoviendo y redoblando la dureza del mensaje.
En conclusión, No habrá más penas ni olvido es una maravillosa película que presenta un potente mensaje en un paquete sumamente entretenido. Más que recomendada para cualquiera que aprecie el buen cine, aunque debo prevenir que cierto conocimiento de historia argentina es necesario para apreciar la película en su totalidad.
Memorable obra del afamado director Hector Olivera. con las estupendas interpretaciones de nuestros monstruos del cine nacional como son (fueron, por desgracia algunos) Ulises Dumont, Julio de Grazia, Federico Luppi, Lautaro Murúa, Augusto Larreta, etc.
Película entrañable, si es que las hay. Por el tema, por los actores, por la época en que se filmo, en los albores de la democracia argentina.
La película que mezcla drama con comedia trata del enfrentamiento en un pueblito perdido de la Argentina entre distintos sectores del peronismo.
Lo que comienza con una simple reyerta pueblerina termina en una batalla campal donde se enfrentan la autoridad municipal, un hombre recto al que lo tildan de bolchevique, la corrupta policía local, la juventud peronista, la sanguinaria Triple A que actuaba desde la clandestinidad y otras organizaciones del peronismo.
La película es muy entretenida, habiendo partes muy cómicas y otras muy dramáticas como una sección de torturas la cual es durísima de ver.
Mención aparte es el elenco. No recuerdo otra película argentina con tanta cantidad de grandes actores, todos en estado de gracia.
Federico Luppi, Miguel Angel Sola, Lautaro Murua, Victor Laplace y muchos más hacen que la película sea una escuela de actuación.
Destaco un actor ya fallecido y que quizás no se lo valoro suficientemente en su época, su nombre Ulises Dupont .
Realiza un personaje muy querible en la película, un loco lindo que enfrenta a los oscuros personajes de la Triple A.
Por todo lo dicho recomiendo fervientemente la película, aparte dura solo 75 minutos lo que muestra que a veces menos es más.
Lo mejor: como una película puede ser muy cómica y a su vez muy emotiva, los monstruos de la actuación que hay en ella.
Lo peor: la poca relevancia que se le da a la mujer en la cinta, casi no aparecen.
La escena: el ataque que hace el gran Ulises Dumont desde su avioneta a los asesinos de la Triple AAA tirándoles estiércol.
El peronismo como catalizador de la tragedia nacional, algo que viene siendo desde que Perón asumió el poder en 1946, y que tuvo su época más oscura en los años 70, sobre todo en el período de 1973 a 1976, la película es una parodia grotesca y trágica de dicho tiempo.
En el otoño de 1974 una facción del peronismo enemiga de la facción que gobierna, todo llevado al microcosmo de un pueblo sin especificar pero que se supone de la provincia de Buenos Aires, donde la facción que no está en el poder inventa que el intendente es un comunista infiltrado, el intendente al oír esto y que lo quieren derrocar se amotina en la municipalidad y trata de resistir desde ahí, lo que conlleva a un enfrentamiento entre los 2 sectores del mismo partido, que incluye ataques terroristas, asesinatos, torturas, etc,
Para un extranjero es totalmente innetendible el peronismo, aunque con todos los regímenes populistas que hubo en el mundo más o menos pueden darse una idea, pero de lo que sucedió en la década del 70 en Argentina, es un rompecabezas hasta para nosotros, que la juventud que en ese momento idealizaba al Che Guevara, creyera que Perón un militar que nunca había negado sus simpatías con el fascismo, fuera lo más cercano a la revolución que se podía dar en el país, ya es un delirio, sumado a eso, los sectores más tradicionales del peronismo, o sea los sindicatos, formaron su propia fuerza terrorista de nombre Triple A(Alianza Anticomunista Argentina) para aniquilar a Montoneros que era la de izquierda, generando una especie de guerra civil que duró hasta que llegó la dictadura en 1976 y masacró a gran parte de la izquierda, y los sectores de derecha del peronismo se alinearon con estos y muchos de los integrantes de la triple A, participaron luego en las detenciones ilegales y torturas que llevó a cabo el proceso de reorganización nacional, como se autodenominó la dictadura del 76.
Doy todos estos datos históricos para poner en contexto la acción de la película y las consecuencias que tuvo para el país ese todo y nada que siempre fue el peronismo, que por ser un rejunte de innumerables sectores llevó a que todos se mataran en nombre de Perón, como sucede en la trama.
En cuanto a la película en sí, lo que cuenta es mucho mejor que como lo hace, ya que Olivera brinda una dirección mediocre, no sé por qué pero parece hecha con poco presupuesto, cosa que dudo ya que en esos años el estudio Aries, del que Olivera era uno de los dueños andaba en su mejor época, pero todo se ve barato, sobre todo los efectos, y le ha pasado muy mal el tiempo, le falta una mejor producción, tiene una estética deplorable.
Las interpretaciones son exageradas, pero eso está bien , ya que se enmarca dentro del género al que la película se adscribe, el grotesco.