Mi nombre es Modesty: una aventura de Modesty Blaise
Sinopsis de la película
Narra las aventuras de Modesty Blaise, una atractiva espía, experta en el engaño, que busca venganza. Quedándose huérfana de niña y siendo acogida por el dueño de un casino, Modesty aprendió pronto las técnicas de la lucha, el robo y el espionaje. Cuando se hizo mayor, se convirtió en la guardaespaldas del propietario del casino pero no pudo evitar que un enemigo de éste acabara con su vida. Ahora, deberá vengarse del asesino de su padrastro…
Detalles de la película
- Titulo Original: My Name Is Modesty: A Modesty Blaise Adventure
- Año: 2004
- Duración: 78
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Opinión de la crítica
Película
4.1
20 valoraciones en total
Floja y corto relato, que por el contrario se hace largo, que recoge las aventuras de Modesty, una espía huérfana que buscará vengarse de los que han traicionado a su jefe.
El argumento no da para mucho y presenta más agujeros que una red de pesca, intenta conectar varias vivencias de la protagonista con una situación de tensión, que al final no resulta ni mínimamente tensa por la pobre interpretación del conjunto del reparto y que no consigue despertar el interés en ningún momento.
No tiene ningún aspecto positivo a destacar, queda en el baúl del olvido según se va desarrollando, muy pobre.
Esta película se rodó con el objetivo de no perder los derechos sobre el personaje protagonista, creado por Peter O´Donnell en 1963 como tira cómica. Con eso lo digo todo.
Malos actores, paupérrima producción (usan pistolas de juguete del todo a 100), escasa acción (sólo una escena de 1:53 minutos al final) y una protagonista anoréxica que para nada da la talla a la hora de luchar cuerpo a cuerpo (vaya bracines que tiene la pobrecilla, que la echen algo de comer).
En fin, no perdais el tiempo.
PD: no os fijeis mucho en los créditos iniciales porque están hechos con escenas de la película…
Más que vergüenza esta gente me ha terminado por dar pena. En serio.
Primero, un poco de historia: el origen de esta película se remonta a los tiempos en que Tarantino pegó el pelotazo con Pulp Fiction : de aquella, que por méritos propios Quentin se había convertido en el ahijado cinematográfico de los hermanos Weinstein (dueños de Miramax por aquel entonces), les mando a los hermanísimos que comprasen los derechos de algunas cosas que él tenía pretendido dirigir, como los de Modesty Blaise (todos sabemos que Vincent Vega leía un cómic suyo en Pulp Fiction mientras defecaba), algunas obras de Elmore Leonard (una de ellas Rum Punch es en la que se basó para escribir su grandísima Jackie Brown ) y algunos derechos más que ahora no recuerdo… Pues bien, como Tarantino es el tipo que siempre tiene muchos proyectos en mente pero finalmente acaba rodando películas con cuentagotas, pasó olímpicamente de Modesty Blaise, hasta que los Weinsten se dieron cuenta allá por el 2002 que los derechos del personaje estaban a punto de vencer, y para no perderlos, mandaron a Rumanía a un director colega de Tarantino, Scott Spiegel (para mí siempre un solvente realizador de serie b) a rodar el libreto de Lee Batchler y Janet Scotch Batchler a Rumanía en dos semanas, con actores y presupuesto totalmente tercermundistas. Eso sí, el nombre de Tarantino aparecería en los créditos como productor ejecutivo.
Lógicamente, tras leer lo anterior, se preveía un absoluto descalabro de película. Así fue, y aquí duele especialmente porque Modesty Blaise es un personaje fantástico que daría para hacer una grandísima película de cine negro (no he visto aquella de los 60 con Terence Stamp pero no me la han puesto muy bien). Surgida de la mente de Peter O´Donnel como la respuesta femenina a un James Bond que en aquellos años 60 ya era un mito, Modesty Blaise era un personaje femenino cuyas principales armas eran un impresionante carácter, dirigía una banda criminal llamada La Red que sin embargo nunca realizaría tratos que tuviesen de por medio vidas humanas o droga. Tras dejar La Red , llevará a cabo una vida menos ajetreada junto a Wille Garvin, su mano derecha en la organización, aceptando todo tipo de misiones como agentes libres del Servicio de Inteligencia Británico.
Pues bien, retomándonos a la película, si uno de los puntos fuertes de Modesty Blaise era su carisma, su intelgencia a la hora de llevar a cabo sus principios y en general, el toque cool y noir que tenían las historias que protagonizaba en los cómics, aquí todo eso brilla por su ausencia. Los actores actúan con una absoluta desgana y carecen totalmente del estilo que una historia de Modesty Blaise necesita (la protagonista sin ir más lejos es lo más soso y plano que hayan podido escoger). My name is Modesty carece totalmente del espíritu de los cómics, es más, es que no tiene espíritu, salvo el de una película rumana de acción de poco presupuesto con nada que contar, menos que mostrar y por supuesto manchando el nombre de Modesty Blaise.