Mein Führer
Sinopsis de la película
Diciembre de 1944: la guerra total está totalmente perdida. Goebbels (Sylvester Groth), sin embargo, no está dispuesto a ser derrotado tan fácilmente. Durante el día del Año Nuevo, se supone que el Führer (Helge Schneider) debe reactivar el espíritu de lucha del público con un discurso agresivo. El único problema es que el Führer no puede hacerlo. Enfermo y depresivo, evita el contacto con el pueblo. La única persona que ahora le puede ayudar es su antiguo profesor de interpretación, Adolfo Grünbaum (Ulrich Mühe)… un judío. Goebbels le traslada en secreto a él y a su familia del campo de concentración de Sachsenhausen a la cancillería del Reich. El tiempo se agota. El Führer tiene sólo cinco días para volver a estar en plena forma…
Detalles de la película
- Titulo Original: Mein Führer - Die wirklich wahrste Wahrheit über Adolf Hitler
- Año: 2007
- Duración: 89
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Opinión de la crítica
4.9
48 valoraciones en total
Imposible de comprender cual fué la intención de su director.¡Castigar a Hitler pos morten haciendolo caminar como un perro y que otro se le apoye atrás?¿Presentarlo como un hijo de vecino, con traumas no tratados a tiempo?
No creo que se pueda en nombre del arte, perpetrar semejantes obras.
No le otorgo un uno porque esté mal filmada- Al contrario, tecnicamente tiene muchos aciertos. Actoralmente no hay nada que criticar. Pero no se puede tratar algo así mientras seguimos vivos hijos y nietos de los que vivieron y murieron en el Holocausto. No se puede tratar de hacer humor con sucesos que duelen y averguenzan a todo ser sensible , sea judio o no.
Recordemos que Chaplin reconoció que cuando filmó El gran dictador, ignoraba muchas atrocidades que cometió el nazismo.Y por supuesto si el señor Levi pensó parecerse al genial Carlitos, se equvocó muchísimo.
Esperemos que esta sea una de esas cosas que se filman y pasan al olvido y no un mal aporte para aquellos que pretenden negar el Holocausto.
…, pero apetece más contenido. Me esperaba una comedia graciosa y no lo tiene. La venden colocándola a la altura de El gran dictador y desde luego ni se le acerca. Empieza de forma interesante mezclando imágenes reales con las rodadas y le da un juego interesante. El desarrollo parece que ha sido redactado por los que piden que se pague en Zalamea por representar El alcalde de Zalamea, es decir, por los que no ganan demasiado con sus obras. Por si no se me entiende, el guión en conjunto no tiene puntos cojos, el guión es lo que está cojo. No hay risas, ni contenidos de nivel, sólo la interpretación del judío se salva.
Comprobar que los alemanes habían hecho una comedia sobre el nazismo y sobre el Führer, me pareció bastante interesante. Pero acabo de verla y me ha decepcionado completamente. Este intento de burlarse y ridiculizar la figura de Hitler e intentar presentarnos la parte más humana queda muy lejos de lo que consiguió Charles Chaplin con El Gran Dictador . Aqui el humor es muy aburrido, es una película muy plana y que su intento de justificar todas las maldades por traumas infantiles resulta odiosa y sin ningún criterio. La dualidad en el personaje del judío, un estilo de psicoanalista y profesor de O.T de los malos, para sacar al Führer de su depresión o intentar salvar a su familia del holocausto, creo que también es ridícula y patética. En general es una película muy flojita ya que no consigue lograr ni grandes carcajadas ni siquiera meras sonrisas, es más creo que a la gran mayoría le costará llegar a la parte final, ya que a mi me han dado ganas de dejar de verla, pero en un esfuerzo he llegado hasta el final y he descubierto que no me habría perdido nada.
Leo muy atentamente algunas de las críticas que se han escrito hasta ahora de este bodrio alemán titulado Mein Führer, y me llevo la sorpresa que algunos realmente la han votado muy negativamente porque intuyen en ella una defensa de Hitler y sus circunstancias personales a la hora de tomar decisiones políticas.
No es mi caso, si recibe esta nota por mi parte es debido a que como comedia no tiene ni puñetera gracia, los alemanes hacen mil cosas bien, pero hombre el humor no es su fuerte. Si el director suizo germanoparlante y judío Dani Levy, quiere meterse en camisas de once varas está en su pleno derecho (yo le aplaudo), pero que lo haga bien, y no nos brinde una de las peores películas alemanas de los últimos años.
Coincido con otro compañero que apunta a que como obra de teatro posiblemente ganaría enteros, ya lo creo, son precisamente los actores los que sostienen toda la película e impiden que la quites antes de tiempo.
Todos los temas, independientemente de la crudeza o importancia de los mismos, se pueden tratar desde una vertiente cómica, el problema es que el sentido del humor no es una virtud que haya regalado la naturaleza a todos por igual, y desde luego el señor Levy debería de mirárselo si se troncha con esto.
Uno de los grandes petardazos europeos que recuerdo… aburrida, inverosímil, desenfocada y más cercana al estreñimiento que a la sonrisa.
Si uno toma en principio la idea de ridiculizar a Hitler en el cine, si no nueva, parecía interesante después de tanto tiempo no viendo más que producciones al respecto supuestamente serias. Una vez vista, pues realmente da a pensar que o realmente la idea en si no daba mucho de donde rascar, o que el director es un soso sin pizca de gracia excepto en momentos puntuales que tampoco es que sean para echar cohetes, así que partiendo de la base de que una película que debería ser una comedia ya es que no tenga mucha gracia, poco más se puede decir para recomendarla o más bien no recomendarla demasiado, como es el caso.
El hecho de mostrar al führer como una figura patética, lastimosa, puesta en situaciones bochornosas… no es motivo por si solo para causar ninguna gracia, si no que más bien resulta bastante lamentable salvo en contadas ocasiones. Todos los rollos que cuenta sobre su infancia etc… quizás hubieran sido más resultones enfocando la producción como obra de teatro en lugar de como película, porque en vivo, con un actor capaz sobre la escena, quizás ganaría en intensidad… y es que de hecho es la impresión que da, que todo el metraje parece más una obra de teatro y está así escrita y enfocada que no a un largometraje.
En cuanto a caricatura moderna de Hitler, y de largo más carismática… ¡me sigo quedando con el de Padre de Familia!