Luis II de Baviera, el rey loco

En 1864, antes de cumplir los veinte años, Ludwig de Wittelsbach (Luis II, el rey loco ) ocupó el trono de Baviera. El joven rey era generoso y romántico y soñaba con traer la felicidad a su pueblo. Fue un gran mecenas que amaba el arte, la paz y la armonía universal. Sin embargo, por confiar en sus consejeros, llevó a Baviera a una desastrosa guerra que la dejaría en manos de Bismarck. Hasta sus más fieles colaboradores conspiraban contra él, lo traicionó incluso su principal protegido, Richard Wagner. Únicamente su prima Elizabeth ( Sissi ), la esposa del Emperador de Austria, que sentía por él un afecto casi maternal, le fue incondicionalmente fiel.