Las 13 rosas
Sinopsis de la película
Recién terminada la Guerra Civil Española (1936-1939), un Tribunal Militar condena a muerte a unas jóvenes por un delito que no habían cometido. Detenidas un mes después de acabar la guerra, sufrieron duros interrogatorios y fueron encarceladas en la prisión madrileña de Ventas. Ella pensaban que sólo pasarían unos años en la cárcel, pero fueron acusadas de un delito de rebelión contra el Régimen por reorganizar la JSU y por organizar un atentado contra Franco. Fueron fusiladas en la madrugada del 5 de agosto de 1939.
Detalles de la película
- Titulo Original: Las 13 rosas
- Año: 2007
- Duración: 132
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Opinión de la crítica
Película
6.6
63 valoraciones en total
Vivimos en un país históricamente retrasado, en el que cada vez que se quiere mirar atrás y rememorar algún hecho de nuestro pasado automáticamente se rechaza y salen a aflorar los prejuicios más asquerosos que jamás se han visto.
Y es que, igual que el año pasado Salvador y El laberinto del fauno recibieron sus palos aunque de una minoría, este año se está empezando a prejuzgar sin base Las 13 rosas (¿otra peli sobre el franquismo? ni que hubiese tantas, además es nuestro pasado), que vendría a situarse a medio camino entre las dos citadas. Martínez-Lázaro ha construido una película sobre una base muy sólida, alejándose de posibles parcialismos (aunque cada uno lo vea como quiera) y que solamente en ocasiones muy concretas se echa a perder debido a los tópicos. Las protagonistas (sobre todo Marta Etura y Verónica Sánchez que para mi es la auténtica sorpresa del film) están espléndidas, y la música de Roque Baños (a pesar de querer aturdir en ocasiones al espectador y prácticamente obligarle a emocionarse) es de las mejores partituras que se han visto este año.
Con mucho la mejor película nacional de 2007 hasta la fecha, son 132 minutos que se pasan en un suspiro. Hacía tiempo que no veía una sala como la que ayer presentaba el Cine Princesa, con un lleno hasta la bandera y el público conteniendo la respiración hasta que los créditos dejaron de aparecer. Muy recomendable para todos aquellos que acudan libres de prejuicios.
Aunque, ahora que caigo, lo mismo es que la gente prefiere que se hagan comedias sobre suicidas, árbitros o niños con cáncer (pese a que, por otra parte, también se las suelan dar palos, aunque con algo más de justificación). Así nos va.
Creo que la historia está contada y lo que faltan son puntos de vista. Por eso no esperaba nada más que eso. Sí es cierto que los comienzos auguran poca tensión y mucho tópico ideológico, y que las protagonistas no llegan a desnudar su personalidad ante el espectador por la amplitud del reparto. Hay cierta coherencia en todos los personajes pero muchas ovejas negras.
Me ha maravillado la interpretación de Marta Etura y de Nadia de Santiago. La ambientación de proximidad a la muerte en la que las luces del alba maquillan la tez blanquecina del miedo. La sobrecogedora carta de Blanca (Pilar López) a su hijo suplicando el eterno recuerdo o el amor materno como única razón lógica por la que entregar la vida (impagable Luisa Martín ofreciendose a cambio de su hija).
Cosas a mejorar las hay, por supuesto. No se quien escogió a Leticia Sabater para hacer de carcelera ni quien puso a Fran Perea un fusil en el hombro sin pensarselo dos veces. La historia merecía un poco más de ¿respeto?…
No hagan caso a Carlos Boyero y vayan a verla.
Leyendo ciertas críticas, tanto de críticos especializados, como de aficionados, que al fin y al cabo es lo que somos todos los de ésta página, da la sensación que ninguno de ellos ha sabido captar la película, su esencia, su finalidad.
Para unos es propagandística del cine de ZP, para otros es demasiado floja porque en la cárcel las niñas se rien y juegan, y eso es demasiado estúpido cuando estás encerrado en un prisión.
Sin duda ambos pueden tener razón, pero en mi opinión ninguno ha captado el mensaje de la película. Ni es un drama barato y lacrimógeno tipo telefilm ni es una película de guerra tipo Platoon. Se trata de la historia de unas chicas, niñas muchas de ellas que fueron sentenciadas en tiempos de la posguerra por tener alguna afinidad al régimen republicano o simplemente a alguna persona que lo hubiese defendido.
No se trata de hacer una película de guerra espectacular ni de juzgar a nadie que defendiera el régimen franquista. Es que el tema de esta película es la vida de 13 chicas, 13 niñas, que todavía muchas de ellas siguen jugando (incluso en la cárcel), y cada una de ellas tiene su ilusión, su amor, su vida….
Respecto a la dureza del régimen, o yo he visto otra película o en ésta queda soberanamente claro lo que le pasaba a personas de otra ideología distinta a la falangista. La dureza del ejército, la falta de justicia, la prepotencia militar….
Para mi gusto la película está bien recreada y bien desarrollada, las actuaciones son muy creíbles, la historia es muy digna (yo creo que el guión no cojea tanto como dicen), y sobre todo, esa última escena final, fantástica, que no podía cerrar de mejor forma la película.
Ni me esperaba más, ni me esperaba menos de lo que Emilio Martínez-Lázaro me ha ofrecido con 13 rosas, pero me ha sorprendido con algunas cosas:
– La interpretación de Verónica Sánchez que se coloca al mismo nivel que la gran Marta Etura. Y sí, para mí es un sorpresón la interpretación de esta chica Serrano que no aguantaba en la teleserie de Telecinco.
– La gran ambientación de un Madrid de posguerra. Buena fotografía.
– El cuidado en no caer en maniqueísmos extremos. Porque por mucho que se diga en algunas críticas, Martínez-Lázaro ha optado por suavizar las cosas y por dotar a la historia (ya de por sí trágica) de un carácter más ameno y humano. No todos los franquistas eran tan malos ni todos los republicanos tan buenos.
– Que Enrico Lo Verso haya sido doblado. ¿Por qué no cogieron un actor español entonces?
– Nadia de Santiago sigue progresando.
– Leticia Sabater ¿era ella? ¿estaba viva?
– ¿Dentro del guante de boxeo había un ladrillo como en los tebeos de Mortadelo y Filemón? ¿Pero que tipo de mandanga era este fustigador? Su caracterización dejó escapar algunas risas en la sala.
– Ahora además de pantanos podemos decir que Franco inventó los juicios rápidos que todo el mundo se creen que son del siglo XXI
Lo que ya sabía:
– Que Pilar López de Ayala es una estupenda y maravillosa actriz. Que aunque su escena final con la carta no la entiendo, durante todo el metraje hace el mejor trabajo de todo el elenco de actores.
– Que Marta Etura está casi igual de bien.
– Que Fran Perea es malo con avaricia. Que sigue siendo malo y será malo. Que encima su personaje está mal hecho. El niño tiene mala suerte.
– Que Goya Toledo tuvo inspiración en Amores Perros. Porque el resto de su filmografía esta planita planita.
– Que saldría una teta… o dos. ¡Qué es cine español, vamos!
– Que el final iba a ser lacrimógeno, aunque bien rodado.
– Que a mucha gente le moleste que se hable de historia.
Chapucera, sin talento, sensiblera, infantil, carente de emoción, desaprovechada, frívola, estúpida, errada, olvidable, innecesaria, parcial y sobretodo oportunista. 13 adjetivos calificativos.
Estrenada poco antes de la aprobación de la Ley de la memoria histórica con un presupuesto de 9 mill.€ recaudó 4 en taquilla y es la 3º película española más vista del 2007 (800.000 espectadores). Se llevó 4 Goyas, entre ellos ¡el de mejor actor de reparto! Espeluznante.
El pastiche:
Al finalizar la película, un rótulo nos dice: Los documentos y cartas citados en la película están históricamente contrastados . Según declaraciones del director: no importa tanto la psicología de los personajes como los hechos . Pero ojo, que después comenta: no pretendo recuperar la memoria histórica porque eso es para los historiadores . De las 13 chicas fusiladas, sólo cinco aparecen en la película y son una mezcla de todas ellas . ¿En qué quedamos, figura?
El colmo del despropósito es la licencia narrativa que se toma: Gabaldón, su hija y su chófer son asesinados por republicanos. ¡Con dos cojones! Hasta el más gilipollas puede deducir que eso justificaría el asesinato de las 13 jóvenes (muchas de ellas ya encarceladas previamente) como represalia. Pero es que la realidad fue bien distinta (rasque el spoiler)
El director, en un bochornoso ejercicio de publicidad falsa dice: Ésta es la primera película que aborda algo tan serio como este acto brutal ejercido por los tribunales militares del franquismo . Recordarle que antes de que se estrenase su película, los documentalistas Jose María Almela y Verónica Vigil ya habían realizado un fabuloso documental sobre las JSU y el caso de las 13 Rosas titulado Que mi nombre no se borre de la historia . Título que recomiendo encarecidamente para acercarse a la realidad de una forma veraz y amena.
Valores cinematográficos:
Si nos ceñimos a la película como vehículo para transmitir sensaciones, la valoración es aún peor. Algo falla cuando una partitura suple la labor de un director para que las escenas clave nos emocionen. Lloran: sube la música, ríen: baja la música.
El trasfondo histórico está trazado con rotus Carioca, desaprovechando la importancia que la figura de la mujer tuvo en la militancia de las JSU, obviando el trabajo que cada una desempeñaba y en lugar de eso, centrándose en la relación irrelevante de las chicas con sus novios. Una mierda, vamos.
Por no hablar del elenco actoral, del que sólo se salvan Pilar López de Ayala, Marta Etura y Verónica Sánchez. Nadia de Santiago está vergonzosamente infantil, Goya Toledo sufre de parálisis facial y Fran Perea…bueno, mejor ni lo comento. Leticia Sabater no aparece en los créditos por vergüenza supongo. ¿Y qué coño pinta el fabuloso Enrico Lo Verso en esta patochada?
Menudo homenaje a la memoria de las jóvenes de las JSU. Las supervivientes deben de estar retorciéndose en sus asientos.