La muerte tiene ojos
Sinopsis de la película
Las hermanas Bayne, Ursula y Dagmar llegan a un hotel de una pequeña localidad costera. Ursula tiene una personalidad extraña e introvertida, tal vez debida a la muerte de su padre, mostrando antipatía hacia toda persona, incluida su hermana en determinados momento, así mismo, Ursula parece tener premoniciones ó algún tipo de facultad paranormal. Dagmar hace amistad con el director del hotel que intenta seducirla, también entran en escena la esposa de este, de tendencias lésbicas, una cantante de cabaret amante del director y un muchacho drogadicto. Mientras en el hotel y alrededores una serie de asesinatos empiezan a producirse.
Detalles de la película
- Titulo Original: La sorella di Ursula
- Año: 1978
- Duración: 91
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Opinión de la crítica
3.3
71 valoraciones en total
Regular giallo con demasiados altibajos y un montaje que no consigue atrapar al espectador. Se nos presentan una serie de personajes, y hay unos crímenes por medio, y varias historias personales entre los protagonistas, pero la manera en que se intercalan unas y otras desentona demasiado y uno pierde interés, de forma que los 95 minutos de duración de la película se me hicieron hasta largos.
Lo mejor de la película, sin duda, el pueblo donde se desenvuelve la acción, y el hotel, ambos chulísimos, con muchos recovecos, pasajes, y sobre todo, unos paisajes increíbles.
El film cuenta con grandes dosis de erotismo, y unas cuantas muertes, aunque uno se queda con ganas de que sean más explícitas, como en todo buen giallo, supongo que por la naturaleza de las muertes, no era plan de mostrarlo jjajaja
La resolución no está mal, aunque yo diría que no cuadran ¨momentos y lugares¨ del asesino, y lo dicho, el montaje no ayuda…
El debut de su director y se nota bastante. Es más cercana al erotismo (incluso el softporn, decían), pues proliferan las escenas tórridas que las de intriga/terror en sí, de las que queda más salpicada la historia.
Eso sí, cumple algunos elementos del llamado subgénero giallo (por cierto, ya rodada en plena decadencia de este género amarillo), como una trama con asesino en serie enmascarado, del que no sabemos su identidad hasta el final -tan sólo vemos sus ojos a través del pasamontañas-, que como siempre es una resolución bastante irrisoria y tramposa, dándonos falsas pistas, todo para supuestamente ofrecernos un sorprendente final. Por cierto, bastante sonrojante cuando se muestra una de las armas con las que se atacaba, con forma fálica.
Sí que le puede reconocer que tiene una cierta estética y buen gusto en la ambientación, rodada en las costas italianas de Amalfi, en Salerno concretamente. Aunque las escenas son muy kitsch, un tipo de cine que podría gustar mucho a nuestro Jess Franco.