La enfermedad del domingo
Sinopsis de la película
Anabel (Susi Sánchez) abandonó a su hija Chiara (Bárbara Lennie) cuando esta apenas tenía ocho años. Treinta y cinco años después, Chiara regresa con una extraña petición para su madre: que pasen diez días juntas. Anabel ve en ese viaje la oportunidad de recuperar a su hija, pero no sabe qué intenciones tiene Chiara.
Detalles de la película
- Titulo Original: La enfermedad del domingo
- Año: 2018
- Duración: 113
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Opinión de la crítica
Película
6.5
76 valoraciones en total
El silencio es un arma de doble filo que dependiendo de cómo la usemos, provoca un impacto u otro. Puede jugar a nuestro favor diciendo más que las palabras, o en nuestra contra, precisamente por no haber dicho nada.
Lo mismo ocurre en el cine, pero con una salvedad: en la vida real, podemos llegar a saber qué significa un silencio (para bien o para mal), pero en una película de escasa hora y media, si lo único que tenemos son silencios, no tenemos nada.
La Enfermedad del Domingo es una película en la que el silencio es el elemento predominante. Existen grandes películas con esta características como El Renacido (Alejandro González Iñárritu, 2015) o Los Santos Inocentes (Mario Camus, 1984), sin embargo en este caso el arma se vuelve contra la película haciendo que no sintamos nada, ni empatía, ni pena con una trama que verdaderamente es muy triste.
En unos temas se desarrolla muy lentamente y en otros puntos muy precipitadamente, el tiempo no es claro a pesar de ser una película en la que deberíamos estar situados en todo momento. Además no se llega a entender por qué los personajes actúan de una determinada manera y se dejan tramas empezadas sin concluir.
Algo que hace mucho más llevadera la película y la espera entre diálogos, es la fotografía en la que se recrea, dando un resultado espectacular en todos y cada uno de los planos. Con una dirección artística a la altura así como el diseño de vestuario. Es posiblemente, la mejor fotografía que haya visto en una película española en los últimos años. Y muy original las transiciones entre escenas utilizando el sonido de cambio de diapositiva, que cobra un especial significado conforme se acerca el final del filme.
Otro gran acierto (por no decir el mejor) y que hace que la película se sostenga, es Susi Sánchez, que hace tan sencillo su papel (sin serlo), que parece que no esté interpretando.
No es una obra maestra ni sienta las bases de un nuevo cine, pero para amantes de la fotografía, aconsejo verla.
Escrito por Juan A. Rodilla
https://cinemagavia.es/la-enfermedad-del-domingo-pelicula-critica/
Ramon Salazar realizador de Piedras y 20 Centímetros hizo un corto el año pasado titulado El Domingo en el que narraba la historia de un padre y una hija que se iban a pasar el dia a un lago, su madre decide no ir con ellos, a su regreso descubren que les ha abandonado.
35 años después la historia continua en este largometraje que nos muestra el encuentro de la hija ya con 43 años y su madre, una distinguida señora con una gran fortuna y con otra hija que desconoce que exista esa otra hermana.
Bárbara Lennie y Susi Sánchez hacen unos papeles increíbles, la madre con un gran sentimiento de culpa acude a una petición que le hace la hija de pasar unos días juntas en su antigua casa de los pirineos franceses, pero realmente tanto el espectador como la madre pasamos por una gran intriga al no saber qué es lo que pretende la hija con esta reunión.
La película tiene un ritmo lento, muchos silencios y miradas que dicen mucho, pero a la vez los diálogos y las situaciones son muy intrigantes, también cumple con buena nota el final muy interesante y sorprendente.
Destino Arrakis.com
Desde que esta película empieza con el hermoso plano de dos enormes árboles, metáfora de lo que son estos dos personajes, ya quedas atrapado en una historia que te rondará la cabeza durante días o semanas.
La historia va de una relación muy estrecha y muy ancha al mismo tiempo. Una relación de necesidad y al mismo tiempo de hartura, de indiferencia.
Por un lado una hija que en teoría busca a una madre que añora y por otro lado una madre que eligió su individualidad para buscar y encontrar su lugar en el mundo. Sin embargo. ¿Cuál es nuestro lugar en el mundo? ¿Es el que la sociedad nos obliga a mantener?, ¿Debería una mujer sentirse obligada a ser madre a pesar de no querer?, ¿Tiene una hija que querer a una madre aunque la haya abandonado?, ¿Debe ser ese el amor universal aplicando el tópico porque me parió ?
Esas y otras preguntas Ramón Salazar las plantea a la perfección en su película. Sus largos planos pero llenos de matices y contenido, nos evocan a las emociones más profundas de estas dos mujeres muy parecidas entre ellas. AL fin y al cabo ambas buscan sus intereses personales.
GRACIAS A DIOSS!! En estos tiempos ascépticos donde las verdades son pasadas por varias capas de pintura y color antes de ser lanzadas y donde todo es explicado, esta película es un verdadero ejercicio de sinceridad sin concesiones y resulta desgarradora como la vida misma.
Los que hemos tenido nuestros duros rollos con nuestra progenitora, entenderemos claramente lo dramático de la situación mucho más que los que quizás intenten imaginárselo…
Es una película dura, no es una película fácil pero…qué película!! Hacía tiempo que no asistía a una puesta en escena tan maravillosa. La fotografía es magistral, las actuaciones son brillantes, los silencios hablan a los gritos…la temática es incómoda y nada está dado por sentado. Solo que las protagonistas se dejan la piel en cada escena.
Ira, rabia, melancolía, tristeza, esperanza, remordimiento, reproches, todo ello en un ambiente bucólico donde dos monstruas que devoran la pantalla de modo muy visceral sacan a bocajarro todas sus miserias mas oscuras y profundas de su ser en un tremendo y doloroso juego mental y psicológico.
Una manteniendo la compostura y elegancia protocolaria que su vida la rodea y otra, no conoce ni una cosa y la otra, directamente te escupe las escasas y precisas palabras.
La tensión se puede cortar con el filo de una navaja, y por si fuera poco esta historia de amor y odio la envuelve un nivel técnico impoluto,imágenes muy bien buscadas, planos con vida propia, todo muy bien cuidado, al detalle, sin duda un final devastador que te deja fría como el hielo.