Juntos
Sinopsis de la película
A la huída del perro de la casa, llamado Junto, se le suma la falta de agua corriente y el desperfecto de la heladera: estas son las circunstancias para que la pareja de Gabino y Luisa empiecen a vivir incómodos e inestablemente en su departamento de la ciudad de México. También se suma Paco, amigo de Gabino, de paso por la vivienda. Todo parece ir mal y la situación llega a un punto extremo. En el momento en el que la convivencia dentro de la casa parece ya insostenible, se produce un gran salto al exterior, hacia una zona campestre en las afueras de la ciudad de México, en donde Gabino asegura que Junto debe haberse refugiado. Y, si bien en este espacio nuevo los personajes prácticamente no hablan, da la sensación de que se ha producido un cambio tan profundo –en ellos y en sus relaciones– que ya nada volverá a ser lo mismo, como si la posibilidad de seguir juntos fuese cada vez más incierta.(extraído de BAFICI.gov.ar)
Detalles de la película
- Titulo Original: Juntos
- Año: 2009
- Duración: 73
Opciones de descarga disponibles
Si deseas puedes descargar una copia de esta película en formato HD y 4K. Seguidamente te detallamos un listado de posibilidades de descarga directa disponibles:
Opinión de la crítica
5.7
43 valoraciones en total
Que sucede con una vida cuando carece de agenda. Por la mañana, al tomar el metro, los cuerpos adquieren su coherencia porque se dirigen a un destino. Pero ¿qué sucede si tomamos un metro hacia ninguna parte? ¿Si de repente se acaba este gran negocio y quedamos flotando en el ocio? Todos nuestros ritos se convertirían en inútiles pantomimas de la nada. Inútil salir de la cama, inútil dirigirse a la ducha, inútil tomar desayuno. ¿Acaso unas vacaciones nos procurarían descanso, si al final no existiera el trabajo como su doble opuesto para darles sentido? Si un día no necesitáramos el agua seguiríamos llenando el vaso de la costumbre. Cuando ningún gesto es necesario, ningún imperativo categórico, queda al descubierto este gran absurdo. Vacíos, inciertos y sin conocer – diría Pessoa – flotamos en el mar muerto de nuestro propio ser.