Espías

5 comentarios en «Espías»

1. Dos cosas, en mi opinión, muy importantes que decir de esta película para empezar:
   
   -Historia sólida.
   
   -Humor a raudales.
   
   Hay que destacar el gran trabajo de todos los actores, que en una comedia suele ser muy importante, porque si no se lo creen ni ellos: ¿Cómo se lo van a hacer creer al espectador?, empezado por Melissa McCarthy que se come la película, devora toda las escenas con su verborrea y su arte, Alison Janney genial como jefaza desagradable, Rose Byrne estupenda como pija insoportable (o villana muy desagradable, depende de la escena, aunque es una mezcla de ambas personalidades), Miranda Hart hace un genial trabajo como la compinche de McCarthy (dos acabadas de tomo y lomo con mucho juego que dar), Jude Law, como de costumbre, simplemente genial y…
   
   Statham…
   
   Statham que se autoparodia y se lo pasa en grande, que cada vez que aparece amenaza con quitarle el protagonismo a McCarthy, y regala un papelón enorme.
   
   De lo poco que no me ha gustado: Cierto giro con el personaje de Jude Law, pero es fácilmente pasable teniendo en cuenta lo bien que se lo pasa uno viendo esta comedia de dos horas que se pasa en dos minutos de lo que te puedes llegar a reír. (Por cierto: ¿Se colaría Ibáñez en la oficina de guionistas? La CIA en esta película parece la TÍA).
   
   Detalle curiosísimo que me ha hecho muchísima gracia: La dobladora de Melissa McCarthy en este film es Margarita Ponce que pone voz a Eric Cartman en la serie South Park y hay momentos de la película en que pone la voz exactamente igual que Cartman y es graciosísimo a rabiar.
   
   Reitero como siempre: Por films como este es por los que merece la pena ir al cine, para pasar un buen rato de evasión, humor y acción, que en verano viene muy bien y nos sirve para desconectar un rato.

2. El parodiar el mundo de los espías no es nada nuevo en el mundo del cine internacional, y eso que vamos a exceptuar series de televisión. Las películas han ido cambiando según los años y las modas. Atrás en el tiempo quedan desde las comedias sofisticadas a zafiedades, de todo ha habido. Retrocediendo a la década de los sesenta, por ejemplo, que es cuando se produce la gran eclosión, recordamos a mujeres espías, así de pronto, desde la famosa secuencia de Audrey Hepburn en el clásico Charada, pasando por Doris Day en Capricho, la Loren en Arabesco, la Vitti en Modesty Blaise, Elke Sommer y Sylva Koscina en Más peligrosas que los hombres, Marisa Mell en Danger: Diabolik, la lista sería extensísima… Incluso nuestro cine también contó con casos, como En busca del huevo perdido, en un intento de parodiar la serie Los ángeles de Charlie, con la Hermanas Hurtado. Quizás con Espías se reabre una veta que hacía tiempo no se explotaba, la astracanada, cuya reina era Bette Midler (a la que precisamente se hace referencia en el propio film) y cuyo papel principal, el de Susan Cooper, le hubiera ido como anillo al dedo.
   
   La diferencia en el caso de Espías es que, aunque sazonada con sal gorda, está revestida de glamour, trabajada como artificio de entretenimiento pero con oficio por parte de Paul Feig y, como tal, funciona. Su guión, con personajes que enseguida el espectador se familiariza con ellos, verbalmente se inclina hacia el burraqueo, pero va en conjunción con sus escenas de acción o de violencia, que aunque más contenida, también la hay. Sus títulos de créditos, su banda sonora, su vestuario, los escenarios elegidos o sus persecuciones están a la misma altura de cualquier Bond actual, es más, como entretenimiento funciona incluso mejor, porque su trama interesa y sus giros sorpresivos al menos no sobrepasan el número de licencias que 007 se permite desde una supuesta seriedad como por ejemplo ocurría en Skyfall.
   
   Melissa McCarthy como Susan es la reina absoluta de la función, es a ella a quien va la película, por lo que no sería de extrañar que por su exitosa intervención fuese nominada a los globos de oro como actriz de comedia, y bien seguida por el resto de actrices como Miranda Hart en el rol de su estimada amiga Nancy, Allison Janney como la jefa, Katie Dippold como Katherine o la malvada Rose Byrne como Rayna, cuyo personaje tiene más mala leche que muchos malos de la serie Bond. Esa es otra de las sorpresas, que es de las pocas parodias actuales en la que las protagonistas son más ellas que ellos, sin que caigan en el mero papel de relleno porque Jude Law o sobre todo Jason Statham tienen oportunidad de mostrar que son capaces de reírse de sí mismos. El género me pirra, lo confieso, me he dejado llevar, aún con capacidad analítica, he pasado un buen rato y me he reído. No me he orinado en la butaca a carcajada limpia como le pasó a algunos espectadores, de ahí mi micción imposible. Tampoco convendría sacar demasiado las cosas de quicio, porque si no posibles espectadores podrían sentirse defraudados cuando la vean y no sería justo, además, empezaron a reírse ya viendo los trailers de las próximas bazofias que nos van a llegar, aunque no llegaron a la carcajada como viendo el film. Así que nadie les infle demasiado el invento, pero que la disfruten como en mi caso, si deciden verla.

3. ‘Spy’ es la tercera colaboración de Melissa McCarthy con el director Paul Feig, (antes lo hicieron en la maravillosa ‘Damas en Guerra’ y la divertida ‘Armadas y Peligrosas’ junto a Sandra Bullock), pero es la primera que pone a McCarthy como la protagonista principal.
   
   Mccarthy es Susan Cooper, una agente de la CIA, solterona de 40 años que se ha visto relegada a hacer su trabajo desde la comodidad de su escritorio y sirviendo de apoyo a un colega de campo al más puro estilo James Bond (Jude Law), quien en una misión para impedir que vendan un arma nuclear portátil desaparece, obligando a que Cooper tome su lugar al ser un rostro desconocido por la villana Rayna (Rose Byrne) y ante la renuncia de otro de los agentes (Jason Statham).
   
   Así Susan Cooper deberá entrar de lleno a la acción mediante el manejo de nuevas personalidades, buscando ir tras Rayna para vengar a su amigo, viajando lo mismo por Paris, Roma y Budapest y sorprendiendo ya que es realmente una buena espía, siendo ahora apoyada por su compañera y única amiga que interpreta muy atinadamente Miranda Hart.
   
   McCarthy y Feig logran una comedia física en la que lo gracioso va mucho más allá de su obesidad, y aunque la actriz sabe reírse de sí misma, existen bastantes otros elementos por donde pasa la comicidad en ‘Spy’ y a los que McCarthy sabe sacarle provecho, en una película donde la carga femenina se impone sumando a Allison Janey que hace de la particular jefa de Cooper.
   
   Para mantener el equilibrio, Jason Statham encarna a un acelerado espía que desconfía de la labor de Cooper convirtiéndose en su sombra, con gags que funcionan en la interacción de ambos aunque no es la parte más brillante del film, además del obstinado agente italiano que intenta seducir en todo momento a Cooper.
   
   Pero queda más que claro que acá la estrella es Melissa McCarthy, que lo mismo en escenas cargadas de acción, patadas o persecuciones o bien llenas de diálogos fluidos, graciosos y punzantes, se erige como la actriz más versátil en el cine hoy en día.
   
   Feig y McCarthy consiguen una (otra) buena película.
   
   http://tantocine.com/spy-una-espia-despistada-de-paul-feig/

4. A Paul Feig le conocimos mucho mejor por estos lares gracias al buen hacer de la comedia La boda de mi mejor amiga (2011) escrita y protagonizada por la actriz Kristen Wiig junto a un montón de brillantes actrices entre las que se encontraban dos actrices, presentes en la cinta que ahora nos ocupa, como son Rose Byrne y Melissa McCarthy. La respuesta del público y la taquilla fue excepcional. Así que, dos años después estrenó otra comedia titulada Cuerpos especiales (2013) con Sandra Bullock y, recuperando a una de las actrices de su anterior filme, la señorita McCarthy. El resultado fue positivo, aunque, si he de ser sincero, me quedaría con la de la boda. Y bien, llegamos a su nueva película titulada Espías (Spy). De nuevo una comedia (está como pez en el agua en este género) y esta vez una especie de parodia a las cintas protagonizadas por el personaje de James Bond. ¿Qué pasaría si Bond quedara fuera de combate y Moneypenny tuviera que entrar en acción? Irían por allí los tiros de lo que acontece en la trama.

5. Para pasar un buen rato sin complicaciones con una mezcla de géneros bien agitada en la coctelera de PAUL FEIG.
   
   Melissa McCarthy es una estupenda actriz que demuestra su talento y sobre la que recae la responsabilidad total de sacar adelante este proyecto. El resto apoyan con profesionalidad el entramado para que todo se desarrolle con eficacia.
   
   Un guión ingenuo aunque suficientemente divertido, nos conduce a pasar un rato agradable sin más.
   
   MI VOTO 5,5