El legado tenebroso
Sinopsis de la película
Los parientes del viejo rico Cyrus West están esperando su muerte para heredar. Pero el viejo Cyrus estipula que su voluntad deberá ser leída 20 años después de su muerte. Durante el día designado, sus expectantes herederos llegan a su mansión. La voluntad es leída y resulta que la única heredera es Annabelle West, siempre y cuando ella demuestre que está cuerda. Si no fuese así, el dinero y algunos diamantes irían a parar a otra persona, cuyo nombre está en un sobre sellado. El señor Crosby, abogado del viejo Cyrus, desaparece antes de poder revelar a Annabelle el nombre que contiene el sobre sellado…
Detalles de la película
- Titulo Original: The Cat and the Canary
- Año: 1927
- Duración: 82
Opciones de descarga disponibles
Si deseas puedes obtener una copia de esta película en formato HD y 4K. Seguidamente te detallamos un listado de fuentes de descarga directa disponibles:
Opinión de la crítica
6.5
93 valoraciones en total
Toda familia numerosa, es una sociedad en micro, pues, en cada una de ellas hay un poco de ‘todo’: El brillante y el tonto, el equilibrado y el insensato, el valiente y el cobarde, el generoso y el ambicioso… y porque esto suele ser así, lo más atinado que pueden hacer quienes tienen una herencia para dejar y sienten que la hora de la partida se acerca, es repartir la herencia en vida, de tal manera que se aseguren de que, ésta, quede en manos de quienes, a su criterio, lo merecen.
>, brilla de principio a fin a fin, primero, con una trama que no da un solo paso en falso y, aunque da pistas muy sutiles para llevarnos hasta el malito de turno, está colmada de agudezas y de momentos hilarantes gratamente definidos. Después, la composición escénica sirviéndose de todo lo aprendido como diseñador de sets en su larga trayectoria, termina haciendo escuela, posteriormente imitada en innumerables títulos de la industria hollywoodense. No por nada, hasta hoy se han hecho tres versiones de este filme, tomando siempre muy en cuenta lo realizado por Leni. Una vez más, el director alemán se reafirma como un gran iluminador y el misterio resulta magníficamente ambientado, logrando complementarlo hasta con unos intertítulos sonoros.
>
Desde que empezó a sentirse enfermo, Cyrus West, comenzó a sentir que su parentela actuaba con él como gatos tratando de atrapar al canario acorralado en una jaula. Cyrus tenía una importante herencia que dejar, y entonces, redactó un testamento para ser leído veinte años después de su muerte. ¿Pretendía con esto esperar a que su gente creciera y madurara? ¿O confiaba, quizás, en que, en ese lapso, el destino ‘sacudiera’ a los que él consideraba ímprobos?
Como suele ocurrir, todos crecieron, pero no todos maduraron… pues, siguieron siendo gatos y gatas quienes ya lo eran veinte años atrás. Lo que vamos a presenciar durante la nueva reunión, en la que el abogado del señor West hará lectura del testamento, hará las delicias de todos porque está lleno de exquisito misterio y de deliciosos toques de comedia, con lo que, desde este momento, se abrirá camino lo que, cinematográficamente se conocería como la mystery-comedy, género que tendría un gran auge en las décadas siguientes.
Todo empieza con la obra de teatro, The Cat and the Canary que, con un notable éxito, el estadounidense John Willard (1885-1942), estrenara en New York, en 1922. Tras su llegada a Hollywood, en 1926, un guion basado en esta obra, escrito por Robert F. Hill y Alfred A. Cohn, fue el primer encargo que, la productora Universal, asignó al director alemán, Paul Leni, y éste lo acogió con el mayor entusiasmo, pues, el melodrama en tres actos como fue escrita la obra original, él tuvo la feliz idea de transformarlo en una comedia de misterio de la que salió avante con una recursividad admirable.
<
Y todavía nos queda un puñado de encantadoras actuaciones, con Laura La Plante –la reina de la Universal por aquellos años-, una heredera dispuesta a luchar por aquello que le pertenece, mientras algunos se empeñan en que luzca como loca para que pase la bola. Creighton Hale, estupendo como el temeroso galán que tendrá la ocasión de demostrar si es digno de que le cuelguen y si acaso merece a la chica, y entre otros, la comediante Flora Finch, magnífica como la tía Susan, haciendo campaña en pro de la locura de la privilegiada.
Esta es la clase de filme que me deja plenamente complacido.
Título para Latinoamérica: <
Primera película de Leni en USA y según dice Carlos Aguilar en su Guía del Vídeo/Cine (por cierto, ¿hasta cúando va a dejar este hombre que le usurpen letra por letra lo escrito en este libro? ¿o es que tiene el don de la ubicuidad de los nombres?) es posiblemente el primer film gótico de la Historia del Cine.
Es una suculente historia de terror de John Willard: una casa gótica encantada, un jugoso testamento donado por un viejo enloquecido por sus posibles herederos y leído veinte años después, un ama de llaves espectral y tétrica… La traslación coherente de las tesis expresionistas bajo el pabellón industrial americano.
Leni logra un film astuto, magistral a veces, que rebosa inteligencia y propone y aporta soluciones arriesgadas, que busca la claustrofobia y dónde hay una simpatía por el envaramiento/teatralidad de los intérpretes, que se mueven mimética y rigídamente (esto último a mí no me convence).
Una película de intriga y comedia con una fotografía bastante especial que destaca más por su atrevimiento que por su ejecución. Es una película bastante valiente que mantiene al espectador atento, sobre todo en la primera parte donde se van situando las piezas.
Hay bastante carisma en los actores, pero también es mérito de unos personajes que llenan la pantalla con su presencia y que consiguen además definirse fácilmente entre tantos candidatos . El Gato y el Canario es una de esas películas Cluedo donde uno tendrá que ir desenmascarando uno por uno a los personajes, pero sobre todo a sus intenciones.
Me recordó por momentos a Un Cadáver a los Postres, aunque aquélla era mejor. Entretenida, pero no deja de ser buena por su atrevimiento más que por lo que tiene que contar y cómo lo hace.
Figura destacada del expresionismo alemán y autor de obras como La escalera de servicio (Hintertreppe, 1921) o El hombre de las figuras de cera (Das Wachsfigurenkabinett, 1924), Leni fue uno de los muchos talentos europeos absorbidos por la pujante industria hollywoodiense. La obra fílmica de Paul Leni resulta significativa, además de por sus encomiables hallazgos visuales, por servir de puente entre los dos movimientos pioneros del cine fantástico mundial: el expresionismo alemán de la década de 1920, cuyo centro neurálgico fue la mítica productora U.F.A., y el cine de terror de la Universal, cuyas mejores obras fueron realizadas en la década de 1930, ya en el período sonoro. El legado tenebroso (The Cat and the Canary, 1927) fue su primer filme rodado en Norteamérica, le siguieron El loro chino (The Chinese Parrot, 1927) y El hombre que ríe (The Man Who Laughs, 1928), una adaptación de Víctor Hugo protagonizada por Conrad Veidt. Su última película en Estados Unidos fue The Last Warning (1929), muda en su mayor parte aunque combinada con algunas secuencias sonoras. Por desgracia, el 2 de septiembre de ese mismo año el realizador falleció de septicemia en Los Ángeles, contaba 44 años.
El legado tenebroso fusionó el estilo expresionista con los elementos góticos, de tal forma que puede verse tanto como la primera película gótica de terror (o de misterio), como una de las últimas en adecuar con cierta pureza los elementos del expresionismo. Otorgando gran mimo y detalle a los decorados, la película supone una plasmación prototípica del escenario por excelencia del terror gótico: la casa encantada, que en este caso adopta la forma de un castillo de aires medievales asentado sobre una colina, con las ventanas cubiertas por grandes cortinajes siempre azotados por el viento, oscuros y tétricos pasillos y dependencias secretas. El impresionante tratamiento formal del filme de Leni, tan influyente en las posteriores producciones de terror, convive con los toques de parodia, tan característicos de los años veinte, y que, bajo mi humilde punto de vista, constituyen la parte menos interesante del film.
Los principales rasgos del estilo de Paul Leni que se hallan en el filme son, entre otros, el espectacular y demoledor diseño escenográfico (que dejó huella en las producciones posteriores de la Universal, que lo tomaron como referencia obligada), el rico tratamiento de la luz y las sombras, y los enérgicos y revolucionarios movimientos de cámara (al nivel de los perpetrados por F. Lang o F.W. Murnau) y la elaborada puesta en escena, que facilitó que el filme superara los lastres del origen teatral de la obra. Todos estos elementos se encuentran definidos a la perfección en la primera media hora del metraje, la parte más brillante del filme: el espléndido prólogo, seguido de la presentación del interior de la mansión y la entrada en escena de los diversos personajes.
Película carismática y fundamental en el desarrollo del cine de terror estadounidense y muestra de la enorme influencia que ejerció el expresionismo alemán a nivel mundial. Un film estupendo de un cineasta olvidado cuya breve obra se sitúa al nivel de la de los más destacados autores del género.
Los resortes del misterio y de la intriga acechan desde la pantalla entre las paredes oscuras de la gran mansión.
Más de noventa y una años después de su estreno la cinta sigue siendo una verdadera joya del cine de suspense a pesar de su estado físico, bastante deteriorado por su mala conservación.
Resulta admirable la capacidad de P. Leni para crear una atmósfera de tensión utilizando los intertítulos. La precisa utilización de la cámara, el ritmo de la acción y la maestría en el manejo de la escenas son capaces de suplir muchas de las deficiencias del cine mudo.
Ambiciosa propuesta para una historia contada con minucioso buen gusto cinematográfico.