El elegido

5 comentarios en «El elegido»

1. Una conspiración es lo que parece que pretende que la vida de Federico Limón salga del cauce rutinario que rige su día a día desde hace décadas. Federico es el inmenso Jose Luis López Vázquez dando una lección de interpretación del nivel de la que dio en El Bosque Del Lobo o en cualquier comedia suya sacada al azar de su abultada filmografía, que parece que un actor sólo actúa bien si hace papelito dramático de pucheros en vez de cucamonas de risa. Federico vive tranquilo con Amparo Baró en un piso de Madrid. Tiene un feo turismo verde francés y de lunes a viernes acude a una sucursal bancaria a desempeñar sus labores de currela. Un día, saliendo con toda la fresca camino del banco, le cae un cadáver en el techo del coche y sin ni siquiera reponerse del sustaco una gente rara toda vez que extremadamente eficaz se llevan al guiñapo y ahí no ha pasado nada a efectos reales. Federico es un ciudadano común y normal y este suceso le trastoca un poco, por lo que da parte en comisaría. Eso debería haber sido el anecdotón de su vida, lo que contar todas las tardes ya de jubilado en la casa del mayor a los demás ancianos. Nada más lejos de la realidad. Realidad fluctuante con la periodicidad que el Marca saluda al sol con una nueva portada infame: esa caída libre es el detonante de un no parar de sucesos extraordinarios o de difícil explicación, el punto de inflexión que convierte una vida sin sobresaltos en un contínuo no salir de una movida rara y haberse metido ya en otra.
   
   Federico sigue dando parte al comisario de todos y cada uno de los sucesos que acontecen en esta su nueva vida, con la lógica sorpresa del otro pobre hombre. Es verle asomar por las dependencias policiales y ya anticipar algo que ni siquiera podrá predecir cuán improbable será esta vez y mucho menos qué poco al respecto puede hacer él como mero policía del distrito Retiro. Federico ya ni quiere salir de su casa, es lo único que se le ocurre para evitar que le pasen cosas… y que le deje de espiar esa furgoneta que sigue todos sus pasos, ya de paso. Amparo Baró decide acompañarle en sus salidas porque tampoco es plan que abandone su trabajo, que para algo los ingresos de la unidad familiar equivalen a los de su marido. Va, le acompaña y les sucede una movida mazo de tocha. Y Amparo que dice que qué coño es eso y Federico que niega con la cabeza, ya un poco trastornado el hombre. Y luego que resulta que tampoco es plan joderle la película a nadie, pero si habéis visto The Game de David Ficher, El Show De Truman de Peter Weir, La Cabaña En El Bosque de Drew Goddard o Black Mirror White Bear de Carl Tibbets una idea os vais haciendo casi seguro. Aunque tenga que ver más en realidad con el Wrong de Quentin Dupieux a poco que se piense bien.

2. La kafkiana peripecia en la que se ve envuelto el protagonista sirve a F. Huertas para contar con solvencia una pirueta tragicómica.
   
   Conduce con habilidad la trama hasta el escenario fílmico que más le conviene y le imprime un sesgo de intriga permanente a cuyo éxito contribuye de forma muy notable la excelente talla actoral de J.L. López Vázquez.
   
   La producción está tratada con profesionalidad y consigue su propósito de interesar al espectador, sacudirle su natural escepticismo y situarle en la tesitura de plantear alternativas e imaginar consecuencias.
   
   Interesante argumento para un guión brillante y excelente dirección que focaliza el suspense como una categoría atractiva y valiosa.
   
   Cuando las circunstancias de lo cotidiano se confabulan para tomar las riendas de la propia vida, a veces la mejor salida es dejarse atrapar por sus garras.

3. Quizá lo más interesante de El elegido sea su desenlace para la época en que se rodó, anticipando algo que ahora no nos sorprendería (si bien no voy a adelantar nada que pueda desvelar el final, salvo que hoy podrías intuirlo).
   
   No obstante, también hay que advertir que pese a su trama y que Federico trabaje en un banco, no estamos ante una película de cine negro al uso como indica la sinopsis de Filmaffinity. Sí hay intriga y misterio, pero no del tipo al que estamos acostumbrados, e incluso los avatares del pobre empleado acaban por prolongarse demasiado para mi gusto. Teniendo en cuenta su corta duración, no es algo que hable precisamente a su favor.
   
   Eso sí, López Vázquez demuestra que era un actor de los grandes, le pusieran frente a lo que le pusieran.

4. A mí esta película me parece una castaña sin paliativos. Le pongo un 3 porque sale José Luis López Vázquez y salva en parte los muebles, pero nada más. La idea de partida puede ser buena o medianamente original, con un fondo de crítica social, pero el resultado y el desarrollo es muy flojo: ni es caustica, ni inquietante, ni hilarante, ni nada. En mi caso simplemente te vas poniendo cada vez de más mala leche ante la acumulación de situaciones absurdas supuestamente.. ¿qué? Como digo, con esta idea de fondo se podía haber hecho una buena película (y hay ejemplos, que no cito por no destripar), pero no es el caso. A mí al final se me quedó la misma cara que se le queda a López Vázquez.

5. Para empezar me gustaría decir que mis críticas favoritas son aquellas que no se andan por las ramas, así que voy a dar ejemplo y voy a ir al grano: la película es mala, solo merece la pena la actuación del gran López Vázquez, siempre bien, pero todo lo demás…aaaay! La idea puede ser buena aunque de buenas ideas está la historia del cine llena, buena sí pero muy chuscamente desarrollada. Situaciones inverosimiles, absurdas y sin gracia ni misterio ni nada. Lo siento pero lo único que le exijo a un peli es que me entretenga y esta es so-po-rí-fe-ra. Gracias al productor o a quien sea el responsable de que solo dure 80 minutos.