Colombo: Repetición (TV)
Sinopsis de la película
Un ingenioso inventor utiliza sus maquinarias hogareñas para asesinar a su suegra, inventándose una elaborada coartada. Episodio Nº29 de Colombo.
Aunque Colombo tiende a ser definida o considerada como una serie de TV, nunca fue una serie propiamente dicha. Exceptuando la presencia recurrente del personaje principal, no presenta ninguna de las características de una serie tradicional (episodios semanales, de duración regular, con cast, dirección y equipo de producción fijo). Pensados como telefilms (de hora y media como promedio de duración), cada episodio cuenta con una historia independiente y con un director y un equipo de producción distinto. Los films tuvieron una transmisión irregular, pero con un mínimo de tres o cuatro producciones por año hasta 1978. Más de diez años después, Falk retomó su personaje por dos años (1989-1990). A partir de 1990, Columbo dejó de emitirse con regularidad, y los siguientes films fueron estrenados como especiales. Por estas razones, los 68 episodios de Colombo se dispersan irregularmente a lo largo de 35 años (1968-2003).
Detalles de la película
- Titulo Original: Columbo: Playback (TV)
- Año: 1975
- Duración: 73
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Opinión de la crítica
6.7
30 valoraciones en total
Playback (Repetición) dirigida por Bernard L. Kowalski en 1975, es el quinto telefilm de la cuarta temporada y treinta de la serie (anteriormente dirigió ‘Suficiente soga’ (1971) y ‘Ejercicio para la fatalidad’ (1974). En el telefilm que nos ocupa se narra los ambiciosos devaneos empresariales de Harold Van Wick (Oskar Werner) quien, con actitud algo inoperante, intenta sacar adelante la compañía Research & Developament, Midas Electronics, inc., dedicada a los sistemas de seguridad y vigilancia en circuitos cerrados y, aparatos electrónicos, con el beneplácito y el agradecimiento de su enamorada esposa Elizabeth Van Wick (Gena Rowlands) fuente de inspiración para sus propios inventos tecnológicos.
El rechazo frontal de su suegra Margaret Meadis (Martha Scott) y mecenas, cansada de observar el ruinoso negocio en el que se está convirtiendo la compañía, pretende traspasar los poderes a su hijo Arthur Meadis (Robert Brown), generando así la desconfianza, el recelo y la nula comunicación social entre suegra y yerno más que visible en el ánimo de los dos. La apropiada y opresiva ambientación, nos anuncia lo inevitable.
Llevado por la tensión existente, el ofendido suegro dejando a su paso un reguero de falsas pistas, las que posteriormente dan la bienvenida al teniente Colombo (Peter Falk), mostrando desde el primer contacto con la familia la extrañeza de la situación, no entendiendo como un sistema de vigilancia y seguridad estratégicamente situado a tiempo real no aclarase inicialmente el asesinato cometido sobre la matriarca.
La actitud de Harold cambia, su pretendido dominio, el modo de llevar la empresa y el negocio familiar, lo relanza, sin aparente oposición familiar, hacia el objetivo de controlar el negocio al alcance de sus ambiciones. No conociendo límites emocionales intenta convencer a su esposa sobre la necesidad de tener el control absoluto del negocio después del asesinato (aun no demostrado) de la señora Margaret Meadis, su madre.
La tozudez de Colombo no se deja engañar, lo que le lleva hasta las Galerías Grant donde se entrevista con su responsable Francine (Patricia Barry) y la sensual Marcy Hubbard (Trisha Noble) para tratar de esclarecer los hechos de acuerdo con la visita de Harold Van Wick, una contradicción en el tiempo para la que no encuentra respuesta hasta que el casual visionado de un reportaje deportivo le da la respuesta a sus incontestables preguntas sobre el caso ‘Repetición’.
Complemento genealógico. Colombo cita a su mujer en dos ocasiones y, otro personaje también la cita en una ocasión.
Película dirigida por Bernard L. Kowalski (dirigidos previamente Suficiente soga y Ejercicio para la fatalidad ).
El presidente de la compañía Meadis Electronics es Harold Van Wick (Oskar Werner) y vive con su esposa Elizabeth (Gena Rowlands) en una casa de última tecnología. Cuando los planes de Van Wick fueron amenazados por su suegra (Martha Scott), el aficionado de vídeos caseros rodó su propia película del crimen… En este país, siempre se puede inventar algo. El ingenioso Van Wick hizo todo lo posible por la fortuna de su suegra, pero no funcionó.
La atenta mirada del teniente Colombo expuso los planes de Van Wick.
Episodio de Columbo muy interesante de 1975, cuyo título más acertadamente
podría haber sido Reproducción .
En este año nadie por estos lares poseía un video doméstico, ni siquiera un Beta.
Estos aparatos quedaban por entonces restringidos a determinados ámbitos
profesionales, como por ejemplo, los estudios de televisión.
Mostrar estos dispositivos tan sofisticados como medio para cometer un crimen
perfecto podía entonces considerarse muy ingenioso y totalmente vanguardista.
Del mismo modo aparecen durante el episodio determinados artilugios para dejar
boquiabierto a más de uno , Un reloj digital de pulsera, una silla de ruedas motorizada,
cámaras de circuito cerrado.