Clockstoppers, detener el tiempo
Sinopsis de la película
Zak Gibbs es un estudiante de instituto que ha ahorrado durante mucho tiempo para comprarse el coche de sus sueños. Su padre, sin embargo, debe dar el visto bueno al vehículo antes de hacer la compra. El problema es que siempre está demasiado ocupado en sus investigaciones científicas como para poder acompañarle al concesionario. Uno de sus antiguos alumnos le envía un extraño reloj. El profesor lo deja en el sótano y se va con prisa a unas conferencias a otra ciudad.
Detalles de la película
- Titulo Original: Clockstoppers aka
- Año: 2002
- Duración: 94
Opciones de descarga disponibles
Si quieres puedes descargarte una copia de esta película en formato HD y 4K. A continuación te mostramos un listado de posibilidades de descarga activas:
Opinión de la crítica
Película
3.8
98 valoraciones en total
Realmente no paran el tiempo sino que hay un dispositivo que todas las personas que lo estén tocando se aceleran y aceptamos que dando a un botón la gente pueda moverse más rápido que la velocidad de la luz (es mucho aceptar) pero los coches… Los coches deberían seguir yendo lentos, no fastidies… ¿por qué unas cosas sí y otras no?
Daba para más pero es muy muy floja, lo único por ver a French Stewart que pone las mismas caras que en Cosas de marcianos (3rd rock from the sun) y pasar el rato pero cuesta no dormirse.
Entretenimiento liviano y pasajero, por y para adolescentes, que tiene como núcleo argumental el espacio tiempo y una ligera historia de amor previsible entre los protagonistas.
Sin ser nada del otro mundo, ni ofrecer grandes efectos especiales ni grandes interpretaciones, consigue su propósito, la de ofrecer un entretenimiento desenfadado, que cuenta con algún que otro momento cómico, logrando no aburrir, convirtiéndose en un pasatiempo para alguien que no tenga nada mejor que hacer.
Todos, absolutamente todos, hemos querido en algún momento de nuestra vida detener a ese enemigo implacable, que se llama tiempo. Esta película, más o menos bien, lo recrea. El guion por cachos es predecible, eso no lo negaré, pero es una película de aventuras de adolescentes, digamos que no hay grandes guiones para este tipo de películas, aunque detrás haya grandes ideas. Utilizan algún artificio (del que habría que investigar su legitimidad física) por lo que podríamos catalogar la película como de pseudo-ciencia ficción . La idea de poder disponer del tiempo a tu antojo da para mucho, por eso se intercalan en la trama principal una serie de escenas donde, literalmente, los protagonistas juegan con el tiempo, vuelvo a repetir, es una película para adolescentes, no esperemos más de lo que estas teen-movies pueden ofrecernos. Aún así los efectos especiales están bien logrados, y realmente parece que el tiempo se detiene cuando se pulsa el botón adecuado del reloj. No le pidamos peras al olmo. Disfrutemos de hora y media de sano entretenimiento. No busquemos más allá de lo que la película nos ofrece. Eso sí, cuando la termines de ver estarás (al menos yo lo estuve) varios días pensando que haría yo con un reloj así. Creedme, ¡si eres travieso, ese reloj da mucho juego!
Clockstoppers me ha recordado a aquellas películas de mi infancia donde niños y adolescentes hacían cosas asombrosas y vivían experiencias alucinantes, muchas veces porque su padre era un científico molón. Eran subproductos directamente para televisión, pero que hacían las delicias de las mentes infantiles imaginativas.
Desgraciadamente este tiempo pasó, y ahora niños y adolescentes se han convertido en grandes consumidores, irracionales y caprichosos. Por eso ahora las películas que van dirigidos a ellos tratan sobre moda, grupos musicales de moda, merchandising y similares. A lo Hanna Montana. Por eso me extrañó que esta película sea relativamente reciente, del año 2002, aunque podría pasar perfectamente por una de principios de los 90.
Y no sólo despierta la imaginación de los niños y jóvenes. Es imposible ver esta peli sin plantearse qué haría uno mismo si pudiese detener el tiempo. Yo, como ya soy un viejo verde y degenerado, me dedicaría a aumentar la natalidad por todo el planeta.
Vi ésta película en un viaje que tuve que hacer en autobús, y la verdad es que me entretuvo, y eso que generalmente suelo preferir mirar el paisaje. Es decir, que la película no está mal, se hace amena, pero desde luego no es un peliculón. Es aceptable para ver un sábado o domingo después de comer. Por lo menos no te aburres…