Cherry Falls
Sinopsis de la película
Cherry Falls es una pequeña y pacífica ciudad hasta la noche en que un asesino en serie empieza a alimentarse de su juventud. Después de encontrar el cuerpo de la tercera víctima adolescente, el modus operandi del asesino sale a la luz: todas las víctimas eran vírgenes. El Sheriff Brent Marken (Michael Biehn), preocupado por la seguridad de los adolescentes, incluyendo a su propia hija, Jody (Brittany Murphy), convoca a una reunión de emergencia a todos los ciudadanos. La reunión acaba en caos, y un cuarto adolescente es asesinado. El Sheriff alberga una terrible sospecha sobre la autoría de los asesinatos pero, cuando llegan a la ciudad los agentes del FBI, decide guardársela para sí. Cuando las estudiantes se dan cuenta de que para salvar sus vidas deberán perder su virginidad, deciden organizar una tremenda orgía.
Detalles de la película
- Titulo Original: Cherry Falls
- Año: 2000
- Duración: 92
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Opinión de la crítica
3.5
100 valoraciones en total
En el aparentemente tranquilo pueblo de Cherry Falls alguien está aniquilando jóvenes vírgenes. Con tan delirante argumento se podría haber creado una curiosa película mezcla de terror y de comedia negra, pero no es así. Los responsables de la película (a pesar de varias escenas y diálogos con reminiscencias cómicas) se lo toman demasiado en serio, lo que perjudica su acabado final.
Las interpretaciones son correctas, lo mismo que la dirección, a la que se le puede achacar un uso excesivo de la cámara rápida y alguna aparatosa persecución no excesivamente lograda, así como un guión a priori interesante pero que termina resultando demasiado encorsetado.
Nacida al amparo del éxito de cintas como Scream (de la que es claramente deudora, véanse por ejemplo el asesinato inicial o la persecución en el instituto a la que es sometida Brittany Murphy), Cherry Falls tiene entre sus defectos diálogos infantiles, incongruencias típicas del género y algunas muertes poco elaboradas, así como un supuesto misterio (¿quién será el asesino?) que se antoja evidente. Pero no sería justo destacar sólo lo negativo, entre sus virtudes se encuentra además de su divertido planteamiento un desenlace que es puro delirio, y que, a pesar de que se le podría haber sacado mucho más partido resulta francamente divertido y políticamente incorrecto, y eso nunca está de más.
Soberana tontería. El argumento esta más que pillado.
Asesina vírgenes, vale, muy bien. ¿Como lo sabe? ¿Acaso se dedica a espiar a TODOS los chicos del instituto a la vez?
¿Y acaso la primera pareja no esta a punto de follar cuando se los carga? ¿Acaso no se contradice el móvil desde la primera escena?
Esto ya es una cagada desde el principio, y luego podría arreglarlo pero no lo hace.
– En la tercera victima (¡TERCERA!) ya averiguan que el asesino mata vírgenes. Dos chicas nada más (ya que al tío es imposible adivinarlo) Y dos chicas que se conocen, que van a la misma clase y que son amigas, lo único que pueden tener en común es que son vírgenes… venga ya…
Dejando a parte su tonto argumento, el ritmo es bastante lento, no llega al aburrimiento pero es lenta, con pocas muertes, pocas escenas de persecución, muy puritana y escasa de todo en general.
Cuando descubrimos al asesin@ vemos que el motivo es una soberana gilipollez, su identidad no viene a cuento para nada, y la venganza es tan retorcida como ridícula.
Lo único remarcable es en la escena de la fiesta, el tipo que pronuncia la frase que hay en el título de mi crítica. Una única frase que me hizo reír y que no me arrepintiera de haber visto esta película.
Flojita
Para un fan del slasher, casi cualquier película del género que se le ponga por delante le va a parecer como mínimo decente. Es mi caso, así que puede que mi criterio sea poco objetivo.
En todas, o casi todas las películas slasher, solemos tener escenas de sexo porque sí . En el caso de Cherry Falls la cosa va más allá. No es sexo por sexo, adolescentes con las hormonas revolucionadas que necesitan hacer tiempo hasta que el asesino venga a cargárselos. En el caso de esta película, el sexo es algo necesario, y probablemente lo único que puede salvarles. Eso ya es un importante punto a favor.
También es imprescindible para que la película avance fluidamente, una buena dosis de sentido del humor, y en este film no falta. De ello se encargan algunas frases míticas y personajes como DJ Qualls, que aseguran alguna que otra carcajada. Y si a eso le añades un asesino en serie casi cómico, la cosa ya despunta. La cosa podría pintar muy cutre, pero la historia del asesino, el hilo argumental y todo tiene sentido. No mata porque sí, y su explicación no está pillada por los pelos. Tiene sus motivos y nos mantiene con la intriga de por qué lo hace hasta el final.
Para amantes del slasher, un peliculón. Para el resto, apuesto a que la encontráis entretenida.
Como ya dije en su momento, Cherry Falls junto con la innombrable forman la verdadera cúspide del cine de terror adolescente.
Pobre Brittany (lo digo de corazón), si hubiese conocido su trágico final seguramente hubiese decliando la megasugerente oferta que fue en su momento realizar este largometraje (que por otra parte hay que reseñar que podría haber sido filmado por el mismísimo Stanley Kubrick, o en su defecto como mínimo por Billy Wilder).
Adentrémonos pues en el film en cuestión. Para empezar habría que decir que en una película de terror debería haber eso, terror, miedo, horror, como lo quieran llamar, pero una dosis cuantitativa es lo que viene siendo el reclamo principal. Ahí ya empieza a flojear, pero bueno, el ambiente se sostiene porque Brittany en plan rollo rockera siniestra sigue dando su morbo. Seguidamente habría que decir que el guión es otra parte esencial de lo que viene siendo el metraje, y aquí es donde el verbo flojear se queda un pelín corto. Personas de sexo femenino que no han entregado todavía su chirla a ningún depravado homo sapiens sapiens son brutalmente asesinadas porque yo lo valgo, y punto. Menudo lumbreras el productor, el director y el tinglao entero que decidió llevar a cabo este premio nobel cinematográfico.
Finalmente agradecer a toda esta gente una escena en concreto por la que no olvidaré en la vida este film de culto (lógicamente para no destripar nada del suculento argumento concluiré la magnífica escena en el spoiler).
Si de algo sirve esta abyecta filmación es para corroborar, que por muy buena que pueda parecer una idea sobre el papel, si la dirección es mala no hay nada que hacer, aunque tengas El padrino en tus manos.
En este caso la cosa va más allá y es que lo presentado es absolutamente infumable, desde la primera escena te das cuenta de que la calidad de lo que vas a presenciar va a ser ínfima (atención al primer asesinato, que manera de alternar el congelar las imágenes y el uso cámara rápida, la sensación que se le queda a uno al visualizar eso en el minuto 4 es indescriptible, además me atrevería a asegurar que es uno de las secuencias más lamentables que he visto en un slasher y tengo un máster en bodrios de este calibre).
No queda ahí la cosa porque los espectadores somos testigos de diálogos que a uno no le cabe en la cabeza cómo han recibido el visto bueno: se sabe que nadie está rodando la película del año pero imagino que en toda producción debe de haber una mínima intención de evitar caer en el patetismo.
Se nota que la peli trata de ser entrañable, de ser mala pero divertir, (atención al uso que se le da al mobiliario universitario en la escena que Brittany Murphy sortea a su perseguidor a la mitad del filme) pero eso no evita que el resultado sea una auténtica vergüenza. Todos los elementos parecen estar muy exagerados, la narración avanza a base de torpeza e idiotez y es incomprensible que dé la constante impresión que no se haya hecho nada para evitarlo.