Capa y Puñal (Serie de TV)

5 comentarios en «Capa y Puñal (Serie de TV)»

1. Un niño afroamericano, tras juntarse con las malas compañías de su hermano, acaba en la bahía junto a su cadáver, al mismo tiempo que se produce un accidente de la plataforma petrolífera cercana.
   
   Una niña, blanquita y privilegiada, vuelve de clase de ballet en el coche de su padre, y el accidente de la plataforma les deja al fondo de la bahía.
   
   Dos manos, dos almas, dos realidades se tocan, y aún les costará comprender cómo de especial fue salvarse esa primera vez.
   
   Capa y Puñal habla de dos adolescentes, pero decide que se definen por algo más que quién les gusta, qué hicieron la noche pasada o cuáles son sus líos en la secundaria (como en la vida real, vaya).
   
   Abre el foco, mira la imagen completa, y descubre que la idea de madurar era más difícil de lo que parecía: familia, entorno y oportunidades perdidas entran en juego, sumados a unos poderes que apuntan a un emparejamiento místico, teniendo lugar en momentos de necesidad.
   
   Y además evita dejar lejos la idea del cómic original, pues si aquel construía una ficción superheroica sobre la problemática adolescente de la drogadicción, esta serie se pregunta si las diferencias de clase y el soterrado racismo policial pueden haber dado lugar a una época donde cada uno, más que nunca, mira por su lado y evita ayudar demasiado ante cualquier adversidad.
   
   Tyrone Johnson y Tandy Bowen son poca cosa en el mural de Nueva Orleans.
   
   El primero un estudiante corriente con familia calladamente disfuncional, y la segunda una estafadora que aprovecha el aire de niña bien para robar lo que no le da una relación con su madre que ambas se han olvidado de cuidar.
   
   Pero entonces suceden sus encuentros, fortuitos y extraños, desvelando cuchillos de luz y habilidad de teleportación, atándoles en un vínculo que, por primera vez, les hace salir del infierno de expectativas frustradas en el que se colgaba él, o el pantano de imposibilidades familiares en el que se ahogaba ella.
   
   Rompiendo así un ciclo que se iba a perpetuar, si nunca se hubieran tocado aquella noche de pérdida años atrás: de repente, sacar a la luz los trapos sucios de Roxxon Gulf, que tantas vidas ha arrastrado bajo la alfombra, no parece obstáculo para su luz y su oscuridad.
   
   Una cosa que es de admirar en esta historia es su admiración, sentida y reiterada, por los sacrificios desinteresados que hace la gente normal. Una policía que no tiene problema en enfrentarse a toda su comisaría, un padre que levantó una familia a costa de su identidad, un padrastro que se sabe intruso pero quiere ayudar… almas buenas que relucen en la negrura, cuyas esperanzas no desaparecieron a pesar de la depresión social circundante.
   
   A lo largo de diez episodios bien medidos, Tandy y Tyrone descubren que siempre pudieron dar algo más. En la relación con sus padres, en las personas que perdieron y en su entorno general.
   
   Siempre pudieron hacerlo más fácil para alguien, pero les pudo la apatía y el desánimo, hasta que en su luz y oscuridad encontraron la manera de estar junto a alguien, de sostenerse, hombro con hombro, frente a las penas que siempre toca afrontar.
   
   El mejor episodio, el séptimo, es el perfecto retrato de ese infierno personal al que más de una vez sucumbimos porque es inútil, da igual, porque rumiar un espejismo del pasado siempre es menos doloroso que arreglarlo de verdad. (*)
   
   Cuando la verdad es que cualquier lucha, no importa lo dura que sea, siempre se supera si se cuenta con una mano amiga.
   
   Y dicha mano amiga puede llegar del lugar más insospechado, resolver los problemas más hondos, y retomar todos los mantos (que no capas) que se quedaron sin terminar.
   
   Solo hace falta estar ahí por los demás o, como magníficamente explica la metanarrativa del noveno episodio, no rendirse aunque a veces se pueda fracasar.
   
   La grabación de Tyrone y su hermano, escuchada por Tandy, es justo eso: algo incomprensible, algo olvidado, que nadie tendría por qué escuchar.
   
   Pero solo el hecho de compartirla logra dotarla de sentido, para que aquellos buenos sentimientos que tenía aparejados puedan continuar.

2. Partamos de una base: Capa y Puñal no era uno de los cómics más leídos de nuestros amigos de Marvel. Yo, los leía porque mi padre siempre me traía un buen puñado de cómics todos los viernes después de trabajar. Y no creo que reparase mucho en qué títulos compraba. Simplemente le pedía al tendero que le diese un número de cada uno. Así que seguramente, la mayoría de seguidores actuales de la franquicia, ni los conozcan. (me refiero a los más jóvenes).
   
   Dicho esto y habiendo visto los dos primeros capítulos de la nueva serie del Monstruo en que se ha convertido esta empresa (aunque ya lo fuese antes, ahora estaremos de acuerdo en que Stan Lee y Cia están disfrutando de su mejor momento). Diré que me parece una apuesta, como mínimo, arriesgada. Y más aún teniendo en cuenta que han decidido contar la historia desde sus personajes Y para ello han decidido no meterse muy de lleno (por ahora) en el meollo para desarrollar sus personalidades y sus historias individuales antes de convertirse en el dúo de súper (anti) héroes más introvertidos y oscuros de la franquicia.
   
   Aunque su ritmo parece lento, creo poder vaticinar que si me quedo un par de capítulos más, podré decir que esta serie puede superar, con mucho, a cualquier otra del estilo.
   
   Sus protagonistas son muy creíbles, y sus historias, aunque rocambolescas, parecen dejar claro donde desembocarán, lo que hace que apueste por la serie.

3. Marvel ha encontrado un verdadero filón en las series de temática adolescente, solo hace falta fijarse en ‘Runaways’, serie de la que ya se ha confirmado que habrá una segunda temporada. Ahora que se estrena Cloak and Dagger, no va a ser una excepción. Os ofrecemos nuestras primeras impresiones tras visionar los tres primeros capítulos.
   
   Aún es pronto para vaticinar si esta serie cosechará el éxito de anteriores producciones de Marvel, pero vistos los tres primeros episodios, podemos decir que va por el buen camino y nos va a sorprender con uno de los dramas adolescentes de ciencia ficción más prolíficos de este verano.
   
   Sus protagonistas son muy creíbles, carismáticos y humanos, con unas historias y un background interesante que te mantiene en vilo a cada minuto. Eso es precisamente lo que le hace especial, saber con exactitud a qué público objetivo va dirigido, y también el hecho de que a pesar de tener tintes de drama romántico adolescente, carece de los topicazos baratos que muchas veces se dan en el género. Al contrario, las interacciones entre los dos protagonistas se producen de manera fluida y natural.
   
   En su tercer capítulo, la narrativa toma un enfoque mucho más sobrenatural o espiritual, para recordarnos que sigue haciendo honor al género superheroico. Sin caer en los spoilers, diremos que la maestría de esta serie reside en la conexión entre ambos protagonistas, que si bien en un principio provoca un cambio en su forma de pensar, acabará finalmente por unir sus fuerzas para afrontar los conflictos.
   
   También destacamos la maestría con la que los guionistas representan el subconsciente de los personajes a través de sueños y visiones y como estas les interconectan. Esperemos que la trama no se desinfle con el paso de los capítulos…
   
   Y vosotros, ¿Qué opináis?, ¿Os está gustando Cloak and Dagger?
   
   Escrito por Víctor Andrade
   
   https://cinemagavia.es/cloak-and-dagger-critica-opinion/

4. Season 2: La banda sonora es bastante bueno, mucho significado en las canciones, pero quizás se basan mucho en el montaje musical para la narración continuista de la serie.
   
   Bien la relación entre los dos, e la primera no se notaba tanto, y en esta se agradece.
   
   Está bastante mal rodada en general, ni los cliffhanger causan impresión, supongo que también problema de montaje.
   
   El montaje mismo, es bastante malo, intenta ser novedoso, pero se les hace bastante bola.
   
   Los personajes tienen como muy poco carisma, para lo intensitos y dramáticos que son, falta mucha acción, y los efectos son bastante cutrones.
   
   Bien tratados los temas, interesantes, sobre todo el feminista.
   
   Season 1: Tengo una nota en mi libreta donde voy anotando mis impresiones y demás, a principio de la serie, supongo que será, de los poderes de Cloak & Dagger, y es que, no se si en su momento acabaría de entenderlos, pero me parecieron absurdos. Una vez que los entiendes, siguen sin tener mucho sentido, pero por lo menos son algo útiles, pero mientras no los controlan ni saben de que van, un desastre total.
   
   Los protas, y en general cualquier personaje de la serie, tienen muy poco carisma, hasta el capítulo 4, no pilla ningún tipo de rumbo, una introducción demasiado lenta, y por llamarle de alguna forma a lo de pillar rumbo, porque parece que va dando palos de ciego toda la temporada.
   
   Demasiado confusa, en mi opinión, abre frentes que no cierra demasiado bien, eso sí, juega muy bien con la música, muy significativa dentro de la serie, de lo poco salvable vaya.
   
   El montaje no me va demasiado, peca mucho de ritmo, y por no hablar del final, una maldita basura, sinceramente, es malísimo en todos los aspectos, me fastidió la serie, que, no era, ni de lejos mi favorita, pero con ese final me bajó muchísimo, una pena.

5. Cuando me enteré que se estrenaba una serie sobre Capa y Puñal me alegré enormemente. Eran unos personajes que me parecieron muy interesantes en los comics y con los que se podría hacer un buen producto audiovisual. Aunque fantaseaba con una película, finalmente acabó en serie y tras ver la primera temporada, me ha parecido un cúmulo de errores.
   
   Error porque durante los 10 episodios de unos 45 minutos, la impresión que me ha dejado es que no me han contado casi nada. Le pesa en demasía ser una seria enfocada a un público más juvenil, en la que cualquier cosita parece magnificarse. La relación entre luz y oscuridad, el personaje blanco y el personaje negro, los contrastes de sus vidas…. Nada que no hayamos visto antes mil veces.
   
   Error también es cargarse el origen de los personajes tal y como fue concebido en los comics. Pasar de obtener sus poderes a partir de una droga experimental, al origen que les han dado aquí debería estar penado con cárcel.
   
   Error también la narrativa con continuos flashbacks, que acaban agotando y ralentizando la trama, en ocasiones con tonterías ñoñas. La serie es como una canción de radio formula juvenil, tan superficial, tan light, tan impersonal… Incluso busca estar a la moda. ¿Que está de moda tener un episodio de bucle temporal?, oye pues Capa y Puñal lo tiene.
   
   Al final la impresión que me queda es el de oportunidad perdida, de que se podría haber hecho algo de más enjundia, y de que no sé si tengo ganas de ver la segunda temporada.
   
   Ah sí, y de que si este va a ser el nivel de las series Marvel para Disney+, que no cuenten con mi dinero.