Cajas oscuras
Sinopsis de la película
Un hombre lucha por recuperar la memoria después de sobrevivir a un trágico accidente automovilístico. Desesperado por volver a ser él mismo mientras intenta criar a su hija, recibe un tratamiento experimental que lo ayuda a indagar en un pasado que de repente se siente demasiado oscuro para ser el suyo.
Detalles de la película
- Titulo Original: Black Box
- Año: 2020
- Duración: 100
Opciones de descarga disponibles
Si lo deseas puedes descargar una copia la película en formato HD y 4K. A continuación te detallamos un listado de fuentes de descarga disponibles:
Opinión de la crítica
Película
5.4
38 valoraciones en total
Película que mezcla ciencia ficción, terror y drama, englobada en el proyecto Welcome to Blumhouse, que es una colaboración entre Amazon y Blumhouse, productora de películas como Insidious (James Wan, 2010) o Déjame Salir (Jordan Peele, 2017). Primer largometraje del director de cortos como Born With It (2015), y protagonizado por Mamoudou Athie (Underwater, 2020) y Phylicia Rasad (Creed. La Leyenda de Rocky, 2015).
Un hombre lucha por recuperar la memoria después de sobrevivir a un trágico accidente automovilístico. Desesperado por volver a ser él mismo mientras intenta criar a su hija, recibe un tratamiento experimental que lo ayuda a indagar en un pasado que de repente se siente demasiado oscuro para ser el suyo.
La película nos presenta una historia llena de ciencia ficción donde el espectador debe dar un salto de fé para no salir de la experiencia. Si se aceptan sus taras, Cajas Oscuras es un thriller con una correcta dosis de drama y momentos muy acertados de terror psicológico, que consiguen mantener al personal pegado a la pantalla, a lo que ayudan unos giros de guión bastante locos y unas actuaciones, por lo general, bastante creíbles. Esta ópera prima no es una gran sorpresa ni inventa nada nuevo, incluso referencia ciertas películas como la gran Origen (Christopher Nolan, 2010), pero es un debut más que decente para su director.
Cajas Oscuras es una película que entretiene en todo momento por su mezcla de géneros bien empastada, aunque su propuesta termina por desgastarse en su parte final ya que el espectador sabe antes de tiempo por donde se desarrollará su tercer acto.
Nota personal 6/10
Black Box (2020) es un relato de suspenso y ciencia ficción con algún elemento de terror. Se trata del primer largometraje del director estadounidense Emmanuel Osei-Kuffuor Jr., con producción de Blumhouse para Amazon. La memoria, la identidad y cómo los recuerdos moldean la personalidad son algunos de los elementos en juego.
Por Nicolás Bianchi
El pasado, con sus hechos que vuelven en forma de recuerdos, es una parte indisociable de una persona. Se vive en el presente pero la existencia es imposible sin una trayectoria, sin un camino recorrido. Lo que se hizo, a su vez, es una corriente vital que horada el camino a recorrer. Por eso la amnesia puede dejar a alguien girando sin rumbo.
Nolan (Mamadou Athie) es un hombre que, luego de un evento traumático, perdió la memoria y también a su mujer. Por eso cría solo, y como puede, a su pequeña hija Ava (Amanda Christine) mientras ayudado por su amigo Gary (Tosin Morohunfola) intenta encontrar una forma de recomponer sus recuerdos. En esa búsqueda llegan al consultorio de la doctora Lillian (Phylicia Rashad), que les propone un tratamiento experimental.
Mediante una avanzada máquina que permite escanear el cerebro, Nolan se sumerge en un mundo virtual en el que verá, siempre guiado por la médica Lillian, cómo se recrean algunos de los recuerdos de su vida. En principio los problemas son dos. Las caras de las personas aparecen borroneadas, lo que se atribuye a sus problemas de memoria, y además en algún momento es atacado por una suerte de monstruo que tiene la forma de un hombre que camina para atrás, como un cangrejo con huesos que se van forzando o venciendo de manera espeluznante. El experimento, una y otra vez, termina como una pesadilla de la que Nolan necesita despertar.
A medida que la película avanza las preguntas sobre el pasado de Nolan, su accidente y su identidad se hacen cada vez más grandes. El suspenso está bien construido al revelar por goteo la información necesaria para comprender el cuadro general. Así las piezas se suman de a poco. Aunque las más importantes parecen caer, finalmente, de golpe, el relato de suspenso con algo de terror dobla aún más hacia el género de la ciencia ficción.
La producción, sin estrellas ni grandes efectos especiales, es de bajo presupuesto, por lo que lo más importante de la película son sus ideas. En ella se puede entrever cierta similitud con algunos episodios de Black Mirror, aunque con mayor extensión. En el final también se puede pensar en alguna reminiscencia lejana de Frankenstein.
Un aspecto accesorio, pero en consonancia con los movimientos sociales de estos tiempos, está dado por el hecho de que el protagonista y todos los personajes secundarios son afroamericanos. En la película no hay una sola mención a la discriminación ya que se desarrolla en un mundo en el que ese problema parecería estar ausente.
Resulta particularmente interesante en Black Box la noción, justamente, de la memoria como una caja negra cuyo efecto sobre el presente puede ser demorado o postergado pero es en definitiva inexorable. Los personajes son lo que fueron, y volverán a serlo una vez que puedan conectar nuevamente con ese pasado.
Un hombre que ha perdido la memoria decide someterse a un tratamiento experimental que le ayude a recuperar sus recuerdos.
Una de las dos primeras películas que ha producido Blumhouse para Amazon resulta sorprendentemente curiosa. Con un planteamiento que, sin ser novedoso, atrapa el interés, lanza inquietantes preguntas y obliga a los personajes a enfrentarse a dilemas chungos. El terror psicológico está presente en una trama repleta de giros bien calculados. La parte emotiva viene dada por la niña pequeña, perfectamente adorable, que interpreta con soltura su papel. Sueños y realidad, fantasía y recuerdos extraños, identidades borradas, ausencias dolorosas, consciencias sin dueño, remordimientos y oportunidades de redención se suceden en una entrega a la que conviene acercarse sabiendo lo menos posible.
Me ha parecido extraño que esta película de la productora de Blumhouse se haya estrenado en la plataforma de Amazon, estoy acostumbrado a ver sus películas estrenadas en cines. Siguiendo hablando de Blumhouse, esta película me ha parecido muy curiosa porque no parece para nada de dicha productora por lo que llevan haciendo los últimos años, películas de terror más clásico o convencional. Es verdad que esta película tiene su vertiente de terror pero no se centra en fantasmas, demonios y otros, si no en el propio sub-cociente de una persona. La película como bien indico en el título de la crítica, empieza magistral, enseñándonos una historia de lo más atípica y un personaje principal muy misterioso al que le sucede algo que realmente queremos conocer. La hija, tiene una actuación muy buena dándole una gran fuerza a su personaje. Las escenas que nos ubican dentro del cerebro del protagonista son muy buenas, con su toque de misterio y de terror por la figura horrorosa que hace aparición. Pero llegado un punto, podemos deducir realmente fácil por donde van los tiros, haciendo que la historia pierda su fuerte, el misterio. Además la aparición cada vez más rápida del monstruo hace que uno se canse de verlo y ya ni se asuste por sus desagradables sonidos. SI se hubieran perfeccionado algunos de sus matices, estaríamos hablando de una película buena.
*No reconocerse
Nolan (Mamoudou Athie), el protagonista de Cajas oscuras (Black Box), apenas si se reconoce cuando se mira en el espejo. No tiene memoria, rutinas, apenas recuerda nada de su vida. Inicialmente compartimos su desconcierto, pero no tarda en revelársenos el motivo. Hace seis meses sufrió un accidente de tráfico, en el que perdió la vida su mujer y a raíz del cual él quedó amnésico. No recuerda ni siquiera un trazo suelto de su vida anterior al accidente.
Ello presenta varias incomodidades tanto prácticas como afectivas. Desde no recordar cosas básicas para desenvolverse por casa, a no ser capaz de cuidar a su hija Ava (Amanda Christine). Harto de esta situación y tras un largo peregrinaje por toda índole de especialistas, decide probar con una terapia experimental auspiciada por la doctora Lillian Brooks (Phylicia Rashad). Su método combina hipnosis y un tratamiento inducido por una máquina para saltar directamente al subconsciente y adentrarse en sus recuerdos pasados, pero ahora olvidados.
Conviene señalar que Cajas oscuras (Black Box) más que una película de terror, como se está anunciando que es, es un thriller psicológico, mezclado con ciencia ficción y algo de melodrama familiar. Por supuesto, hay situaciones tensas y temáticas inquietantes, pero carece del colmillo y la intensidad necesarios para ser considerada terror. Al menos en su integridad. Valga esto como apunte, no como un demérito en sí mismo.
*Miedo de ti mismo
Nolan, mediante el tratamiento, espera recuperar plena conciencia de quién es en realidad. La doctora Brooks será capaz de introducirlo en su propio subconsciente y recrear los recuerdos vívidamente, como si fueran sueños lúcidos. De este modo podrá revivir momento esenciales en su vida. El planteamiento comienza a ponerse interesante, el tema de meterse en imágenes guardadas en el subconsciente remite un poco a Origen (¿será causalidad que el protagonista se llame Nolan?), pero con una infinitesimal parte de su presupuesto. También a la reivindicable La gran huida (1984).
En estos viajes dentro de la mente hay ciertas reglas: crear una habitación segura, no salir sin permiso por una puerta, etc. Lo que ocurre en todas las probaturas es que un presencia extraña ataca a Nolan y acaba despertando aterrorizado. Y lo que es peor, parece que según los recuerdos visitados no es lo que se dice una bellísima persona. Parece que Nolan tenía una faceta bastante oscura, que ahora él mismo teme conocer.
Lo mejor de Cajas oscuras (Black Box) es su planteamiento, la arquitectura general del guion. Esos viajes inmersivos dentro de la propia mente parecen una idea que convenientemente utilizada podría resultar interesante. No obstante, ya sea por el evidentemente precario presupuesto o por una falta de desarrollo de la historia, nos quedamos con la frustrante sensación que la película daba para mucho más.
*Lo que pudo haber sido
Cajas oscuras (Black Box) tiene unos primeros cuarenta y cinco minutos aceptables, donde a pesar de la estética de telefilm de sobremesa, hay conceptos interesantes e idea prometedoras. Incluso dentro de la baratura, se las apaña para crear alguna situación de tensión lograda. Nolan se encuentra en una encrucijada donde le cuesta aceptar lo que va conociendo de sí, llegando a dudar incluso de sí lo que ve en el experimento de la doctora Brooks son falsos recuerdos. Y desde aquí comienza la decadencia del personaje… y de la película.
Lo que parecía un rompecabezas prometedor, y con ciertas meditaciones bien traídas, acaba cayendo en una trama algo culebronesca, rozando un melodrama sin refinar que disipa la trama y resta fuerza al conjunto. Ni siquiera un giro de guion, realmente inesperado, basta para paliar la confusión de géneros de la parte final de Cajas oscuras (Black Box). Como añadidura, los acontecimientos se precipitan y hay algunas incoherencias.
Es evidente que un mayor presupuesto habría ayudado, y que el regusto a telefilm no ayuda a la sensación de sugerencia e inquietud que se pretendía transmitir. Las actuaciones en general son discretas, neutras, un tanto pasivas. Destaca levemente Mamoudou Athie en su papel de Nolan, pero de todos modos no es capaza de transmitir los torturados sentimientos que debiera. Visualmente lo que más nos puede llamar la atención son las escenas oníricas del viaje a los recuerdos de Nolan, pero eso ya lo hemos visto antes mejor.
*El toque Blumhouse
Como productora de terror, Blumhouse ha conseguido llevar a término una serie de películas interesantes. Ahí tenemos a Paranormal Activity, Sinister, Insidious, El regalo, La Visita… Sin mucho presupuesto, pero con buenos resultados en numerosas ocasiones. La idea de Welcome to Blumhouse es similar a lo que hizo con Hulu y su Into the dark. Una de las características de Blumhouse es sacar el máximo rendimiento a sus producciones en cuestiones de rentabilidad.
Da la impresión de que las películas que van a estrenar en Amazon son realmente baratas y con un aspecto más televisivo de lo que se podría esperar. De momento, Cajas oscuras (Black Box) da esa impresión y, eso sí, no se puede aventurar cómo será el resultado de las otras. Podría ser una oportunidad para descubrir nuevas ideas, y talentos (no parece ser que haya grandes nombres en Welcome to Blumhouse).
Este 6 de Octubre se han estrenado El engaño y Cajas oscuras (Black Box). Solamente puedo hablar de esta última, pero no diría que es una obra fallida del todo. Más allá del presupuesto espartano, parece como si el acabado no fuese meticuloso y no se fuera capaz de redondear una buena idea. De todos modos, como Blumhouse de vez en cuando ha dado agradables sorpresas, estaremos atentos a otras entregas.
…….
……
Escrito por Diego Da Costa