Britannia (Serie de TV)

5 comentarios en «Britannia (Serie de TV)»

1. Uno puede comentar lo que quiera de que se toman licencias artísticas. Me parece genial. Pero la verdad, me cansa lo que está pasando actualmente en el mundo de la televisión y el cine.
   
   Alguien comentaba lo de Rey en Star Wars. Pues si, parece que el feminismo más rancio está colmando la televisión y el cine. No por que una mujer no pueda ser una gran guerrera, si no por que hay una necesidad de colarnos a mujeres que combaten mejor que los hombres constantemente.
   
   Lo del legionario negro y el optio negro, es gracioso. Para ser LEGIONARIO se tenía que ciudadano romano. Eso significa que aquellos nacidos en África, Anatolia, Panonia… no eran ciudadanos romanos y por lo tanto, no podían ingresar en la legión, si no en cohortes auxiliares. Pero eh! Que si no nos tachan de racistas. Total, el rigor histórico no importa (ahí tendremos en Marvel a una Valkyria negra, o a Heimdall, hijo de un gigante, interpretado por Idris Elba).
   
   Los romanos ya tenían contacto con los britanos. Es más, tenían aliados y reinos clientelares que les pagaban tributos. Aulo Plaucio en la serie ni siquiera sabe el nombre de los reinos y reyes.
   
   Verica no aparece, a pesar de ser el motivo por el que los romanos se desplazan a Britannia. Y si, los romanos eran malísimos y los britanos unos santos. Los sacrificios humanos y la barbarie en la que vivían, no existe. Además, los romanos iban a colonizar y a integrar Britannia dentro del Imperio. Siendo invasores y crueles (que lo eran) intentaban llevarse lo mejor posible con las tribus conquistadas.
   
   Por cierto, comentar lo del Audio Plaucio diciéndole a un LEGADO (que dirigía una de las legiones) que cogiera unos hombres y fuera a explorar, como si fuera un vulgar centurión. O lo de enviar a un optio a negociar en nombre de Roma, en vez de mandar al menos a un Tribuno. Y a un optio negro! Que por cierto, en un ejercito de 20.000 hombres, ese optio siempre parece estar disponible.
   
   Lo siento, es una serie bastante patética. No es cuestión de rigor histórico. Es que parece que ni siquiera el equipo del legionario romano es correcto. Dónde está la lorica segmentata de acero?
   
   Algunos dirán que no busca ser una serie histórica, lo cuál me parece genial. Pero ofende ver que teniendo tantas facilidades para hacer una serie con un mínimo de rigor, hayan tergiversado tanto la historia. Luego la gente creerá que los romanos eran malísimos, que los druidas eran unos santos y que las mujeres britanas iban a la peluquería a diario.
   
   Sigo en el spoiler con detallitos.

2. Acabo de ver el primer capítulo de la nueva serie de Amazon y Sky y si bien no puedo opinar en cuanto a todo el contenido de la serie, sí que puedo apostillar que la serie merece un vistazo no sólo por el entretenimiento a lo Vikingo sino porque ciertas características históricas que suelen obviarse se reflejan en la ella.
   
   He leído una crítica negativa en la ficha que reniega de poner un legionario negro entre los romanos, cosa que irónicamente es más cercano a la realidad de lo que creemos: Roma se formó además de por los romanos, por miles de emigrantes procedentes de los terrenos conquistados, así y teniendo en cuenta que los soldados romanos eran mercenarios, soldados con paga y que hacían de ello su profesión: ¿No es muy lógico pensar que los ciudadanos conquistados intentaran buscarse la vida como soldados, un trabajo asequible sin distinciones?. Toda la África conocida en la época llegó a estar dominada por los romanos. Es más, siendo rigurosos con la historia no hubiera estado mal poner algún negro entre los celtas.
   
   Además de este detalle, muy interesante como la serie refleja el feminismo celta, mujeres y hombres se consideraban iguales, por ello que la esposa de Phelan tenga otro marido no es de extrañar: los celtas tenían un concepto del matrimonio mucho más variado que el cristiano: matrimonios de un año renovables, una mujer con muchos maridos, un marido con muchas mujeres, etc…
   
   Pero conceptos históricos a un lado, la serie tiene unas localizaciones fabulosas, un vestuario muy acertado y unas interpretaciones bastante decentes.
   
   Una historia que aunque en inicio no sigue las reglas básicas de guión, como el presentarnos a los personajes y sus motivaciones, a lo largo del metraje comienza a encontrar su sitio.
   
   Si tuviera algo que criticar son los títulos de crédito, tan psicodélicos que no me cuadran demasiado, además de un exceso, para mi gusto, de imágenes distorsionadas en las escenas, y la entrada con la canción de Donovan, que a pesar de escribir canciones con letras de mitología bretonas, no cuadra mucho en temática.
   
   Para alguien que sabe un poco más del mundo celta que lo usual, ha sido grato ver como los creadores han hecho los deberes, sólo por eso merece la pena.

3. Maratón de Britannia terminado. Como se (y yo soy el primero) que nos gustan mucho las comparaciones, la serie que más se puede parecer a esta es Vikings aunque no llega a su nivel por varias diferencias y cosas que explicaré más adelante. De primeras diré que Britannia, merece mucho la pena (no como el fiasco ese de Knightfall con lo que prometía la cosa) sobre todo si te gustan las culturas celta y romanas. Britannia se desarrolla en el sur de la actual Inglaterra, con un nuevo intento de conquista del Imperio Romano para someter definitivamente a las tribus de Britannia. El apartado técnico esta muy cuidado, los paisajes son preciosos y las actuaciones son muy buenas (algunas más que otras). Cuesta cogerle afecto a los personajes, pero creo que es más un acierto que un error.
   
   No quiero extenderme demasiado, pero si os pedire que le deis una oportunidad. Empieza bien, pierde fuelle a la mitad pero al final coge carrerilla y consigue llegar a la meta. Entre tanto, vamos descubriendo quien es realmente el o mejor dicho la protagonista de la serie, que no es quien pudieramos pensar de primeras, pues nunca se dice el nombre.
   
   Como antes dije, el principal hándicap que tiene con la serie Vikings, es que aquí en Britannia, la protagonista principal, la que da sentido a toda la historia, es una niña en la primera temporada y esta se limita a contarnos su desarrollo y posicionarnos en lo que esta ocurriendo en su entorno sin más, ni siquiera nos revela su nombre (como si fuera un gran misterio y cualquiera que sepa un poco de historia lo adivinara a la primera) sin embargo Vikings, empieza con un Ragnar ya adulto y desde el primer capítulo se centra ya en su historia, cosa que Britannia no hace, porque se entretiene más en explicarnos los antecedentes a lo que tiene que llegar. Por lo cual, sería acertado decír, que esta primera temporada sirve de precuela . También las batallas en esta serie son muy escasas y eso en Vikings siempre le dio mucho tirón, por eso digo que aunque es la serie con la que mejor se puede comparar, es muy inferior a esta pero merece la pena.
   
   Sin embargo confio, en que la segunda temporada, la niña se convierta en adulta y empiece lo que tiene que empezar.
   
   En definitiva, creo que merece la pena nada más que por lo que nos vendrá con su siguiente temporada.
   
   Como curiosidades apuntar, que el Rey de los Cantii (una de las tribus britonas) es Ian McDiarmid, más conocido como el Emperador Palpatine y que el parecido del personaje de Kelly Reilly de nombre Kerra con la princesa celta Mérida de la película de Disney Brave es más que evidente y desde el primer capítulo así nos lo hacen saber.
   
   Con paciencia y teniendo en cuenta lo dicho, es muy disfrutable.

4. Una gran serie en lo técnico, y en buena parte de lo artístico: magnífica fotografía, ambientación, decorados, vestuario, buenas interpretaciones, puntos muy originales y rompedores del guión… pero finalmente un argumento sin emociones, sin tensiones (o con alguna que se deshincha rápido), una historia tontorrona que gasta una temporada entera en dos o tres temitas entre dos tribus, unos romanos que andan de cámping más que de conquista en Britania, una niña desorientada y el exceso de caretas de unos druidas siempre colocados .
   
   ¿Una temporada entera para esto que acabo de ver? ¿Dónde esos personajes interesantes, sólidos, dignos de seguir? ¿Dónde esa trama robusta y que enganche? ¿Dónde una sensación de asistir en primera fila a una gran historia política y militar entre Roma y los britanos? ¿Dónde una digna banda sonora para la entrada de los capítulos y no una anonadante canción pop hippy?
   
   A pesar de todo, el cuidado y la calidad con que se ilustra la historia en lo plástico, que ya es algo que no consigue más que un pequeño número de series, y el resto de la banda sonora, muy decente, o muy buena, e incluso un par de ratitos de historia muy original me ha merecido la pena, muy por los pelos.

5. Una vez más, el género de ambientación histórica está de enhorabuena.
   
   Se sitúa en la invasión de Britania por parte del imperio romano, pero 9 décadas después de que Julio César lo intentara.
   
   Como el nivel de calidad de las series de hoy en día está muy alto, esta serie no podía ser menos. Con el trasfondo de los espectaculares paisajes del sur de lo que hoy es el Reino Unido y un diseño de producción envidiable, nos habla de tribus celtas, extrañísimos ritos, mujeres fuertes (quizás por la ley no escrita de lo políticamente correcto) y una resistencia que no quiere dejarse esclavizar por Roma.
   
   Tiene cierta estética moderna pero que queda muy bien en pantalla (o al menos en la mayoría de las ocasiones).
   
   David Morrissey está como pez en el agua en su papel de oficial romano. Está claro que después de haber sido el gobernador de The walking dead, se ve que le pegan muy bien los papeles de villano.
   
   Donde la serie queda coja es en la cabecera, y no por las imágenes, sino por la música. He buscado en el oráculo del siglo XXI y he visto que este tema se llama Hurdy gurdy man. A mí personalmente nunca me ha gustado esta canción, pero eso es subjetivo. Pero aparte de eso, no creo que encaje lo más mínimo en los créditos de una serie como esta, más propia de una banda sonora épica a la altura de las circunstancias.
   
   También me resultan muy fantásticos los poderes jedi del druida, que se cargan la suspensión de incredulidad, hasta el punto de derivar en algún momento de humor que me resulta muy fuera de lugar.
   
   Quitando esos puntos flacos, es una serie de las del momento, con personajes interesantes en un contexto histórico muy atractivo. Mientras las productoras de televisión sigan compitiendo por mejorarse y ganar la audiencia, los seguidores de series seguiremos teniendo la suerte de disfrutar de cosas como esta.
   
   Pero de todas formas no va a ser ni de broma la heredera de Juego de tronos o Vikingos. Al principio parece tan impactante y buena como estas, pero los fallos que he ido comentando a lo largo de mi crítica, junto con un importante bajón de ritmo a mitad de temporada y un séptimo episodio que es para olvidar la dejan algo por debajo de las más grandes.
   
   Es buena, pero no excelente.