Blue My Mind
Sinopsis de la película
Justo antes de las vacaciones de verano, Mia, de 15 años, se traslada con sus padres a los suburbios de Zurich. Durante mucho tiempo se ha sentido alejada de sus progenitores, y cuando les pregunta si ha sido adoptada, su madre se ofende pero no responde. Mientras Mia se sumerge en un comportamiento rebelde como adolescente, su cuerpo comienza a sufrir extraños cambios. Al principio apenas son perceptibles, pero luego suceden con fuerza y empieza a perder la razón. En su desesperación, intenta evadirse con sexo y drogas, con la esperanza de detener el torbellino que la abruma. Pero la naturaleza es más poderosa…
Detalles de la película
- Titulo Original: Blue My Mind
- Año: 2017
- Duración: 97
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Opinión de la crítica
5.9
88 valoraciones en total
Algunos espectadores achacarán a esta curiosa y estimable película suiza que empiece siendo una cosa (un retrato de la rebelde adolescencia de una chica en su cambio de vida, al trasladarse su familia a otra ciudad) y acabe siendo… otra. Pero no seré yo, ya que no me molesta en absoluto -tal como está desarrollada y planteada- esa deriva argumental fantástica, que además no es incompatible con lo que se cuenta al principio, ni lo excluye.
Es fresca, atractiva, certera en su mirada al mundo adolescente, y destaca su dirección actoral. Una de las obras más reseñables del Atlántida Film Fest de este año.
Película que participó en la sección de Nuevos directores del Festival de San Sebastián de hace dos años de corte fantástico que se encarga muy desafortunadamente de desvelar el tráiler, así que a los que no os gustan los spoilers no lo veais.
Se podría llegar a pensar que es una mezcla de Thirteen y Raw-crudo y para ser una ópera prima no le ha salida nada mal a la directora Lisa Brühlmann, que consigue con un estilo narrativo interesante una historia surrealista pero muy efectiva.
Luna Wedler como la extraordinaria Mia interpreta a una adolescente de 15 años que llega a una nueva escuela en Zurich, allí intenta impresionar a un grupo de chicas para integrarse, pero los efectos de la pubertad en su cuerpo comienzan a experimentarse con unos trastornos de conducta y físicos un tanto extraños…
Un film extraño y a veces fascinante que se sitúa en un ejemplo claro de cómo trascender al género de terror desde un punto de vista adolescente. La directora con un guión propio consigue incomodar en muchas escenas, manejando a las jóvenes actrices y llevarlas al límite con una mirada perturbadora y angustiante de la protagonista.
Destino Arrakis.com
La adolescencia es una etapa de la vida que tienes que pasar como sea. El tránsito por ella, en algunos casos, puede ser una experiencia traumática o que cambie nuestra vida para siempre. Los evidentes cambios corporales a esa edad se magnifican en Blue My Mind. Vuestras mentes perversas ya están imaginando metamorfosis salvajes y repugnantes. Bien bien no es así, aunque la naturaleza campa a sus anchas en una especie de cuento de hadas donde la realidad y la ficción se entremezclan para ofrecernos un producto sugerente a la vez que sorprendente dado el ritmo y situaciones que se crean.
Mia es una adolescente de 15 años que se enfrenta a una transformación que pone en duda toda su existencia. Poco a poco asiste desesperada a un cambio radical de su cuerpo siendo en vano todos sus intentos para detener el proceso. Pronto se ve obligada a aceptar que la naturaleza es mucho más poderosa que ella.
Lisa Brühlmann se mete de lleno en el rodaje de un producto en cierto modo extraño ya que, inicialmente, nos explica la llegada de una chica a un instituto y los esfuerzos que tiene que hacer para ser aceptada. No tarda en encontrar a su alma gemela, su amiga Gianna, que siguiendo la estrofa She said, hey babe, take a walk on the wild side, la arrastra a un mundo donde la única palabra valida es: experimentación, y eso engloba todo lo que os imaginéis. Rodar todo esto sin caer en la repetición de cintas que tratan este tema, es el gran reto de la directora suiza. Para ello introduce el tema fantástico que no deja de enturbiarlo todo un poco, pero que sirve de coartada para relatar lo que en principio interesa y que hemos detallado al empezar.
Ese ir más allá del simple relato juvenil convierte la cinta en un producto fresco y sugerente sin escatimar alguna que otra escena escabrosa que nos hará mirar hacia otro lado. Los efectos especiales son simples pero efectivos, consiguiendo que algo totalmente increíble acabe siendo digerible, hasta para las mentes más cuadradas.
Tenemos que destacar la fotografía de Gabriel Lobos que se toma en serio el título del film para ofrecernos unos tonos azulados y oscuros, totalmente acordes con el aire que va cogiendo la trama conforme van pasando los minutos.
Vamos con las interpretaciones. Encabeza el reparto un espléndida Luna Wedler que da vida a Mia. Su magnetismo es evidente, merendándose ella solita toda la pantalla. Como secundarios a destacar, tenemos a unas eficientes Zoë Pastelle Holthuizen y Regula Grauwiller.
Estamos ante una cinta que salvo algunas incongruencias, se mueve como pez en el agua entre la realidad y la ficción. De vosotros depende decantar la balanza hacia un lado o al otro.
http://www.terrorweekend.com/2018/09/blue-my-mind-review.html
La producción es algo escasa de medios, sobre todo en los efectos especiales, que resultan algo cutre. En general parece un catalógo de muebles.
En la Dirección no hay nada que destacar. Con oficio, plana y un poquito reiterativa y lenta y sin saber a ciencia cierta a dónde nos quiere llevar. La narración no ha sido fluída.
Lo mejor, por su originalidad, es la Historia que nos quieren contar. Si no hubiera sido por esta originalidad la película seria una más de adolescentes adineradas y aburridas, con conductas extremas (alcohol, sexo, drogas, hurtos, maltrato familiar, etc.).
Es esta Historia la que hace que sea interesante y que no nos aburramos. Y no le busque tres pies al gato, es como es y acaba como acaba. Da la impresión de que llega un momento en el que no saben cómo acabar algo tan complicado y de hecho el final desmerece un poco.
Las protagonistas son un poco mayorcitas para representar a adolescentes que acaban de tener la regla y resultan poco creíbles. Se supone que son niñas y lo que vemos son mujeres hechas y derechas. Por lo demás actúan muy correctamente en unos papeles muy extremos cosa que es fácil de hacer.
Resumiendo, sin grandes pretensiones, en conjunto es una película curiosa e interesante por su originalidad.
Blue my mind es la primera película de la directora suiza Lisa Brühlmann, pasó por la sección de Nuevos Directores del Festival de San Sebastián y ganó dos premios en el Zurich Film Festival. La obra es otro coming-of-age que se centra en ver el paso de su protagonista de la adolescencia a la edad adulta, poniendo especial énfasis en las transformaciones físicas y psicológicas que sufre la protagonista a lo largo del film. Mia se acaba de trasladar a los suburbios de Zurich con sus padres. Cambiar de residencia y de centro de estudios no es fácil para una chica de 15 años, especialmente si no te llevas bien con tus padres y comienzas a sospechar que eres adoptada. Sus ojos se pondrán rápidamente encima del grupo más radical de la clase, al que poco a poco se irá aproximando hasta conseguir salir con ellos y poder desbocar su comportamiento. Cuando parece que empieza a ser aceptada en el grupo, su cuerpo comenzará a sufrir extraños cambios. Inicialmente poco perceptibles, luego difícilmente ocultables, lo que hace que Mia extreme cada vez más su comportamiento con sexo y consumo de drogas. Adolescencia y locura en estado puro. La obra comienza con un tono parecido al de otras propuestas que tratan el tema de la adolescencia y sus situaciones típicas (enfrentamiento con los padres, búsqueda de identidad propia, negación de los cambios físicos…) para poco a poco introducirse en el mundo del cine fantástico. Blue my mind se podría definir como una particular mezcla de Crudo de Julia Ducornau y La mosca de David Cronenberg que pretende hacernos reflexionar sobre esa compleja etapa de la vida. Los cambios de la adolescencia llevados al extremo.
Más críticas de cine y series (y algún que otro monigote): https://unhombresinpiedad.com