Asfixia
Sinopsis de la película
Un científico de la era Victoriana descubre que la mortalidad esta directamente unida con unos espíritus fantasmales que se manifiestan cuando alguien está cerca de la muerte. Él crea un dispositivo especial fotográfico para revelar y encarcelar los espíritus invisibles. Cada ser vivo tiene su propio Asphyx. Conducido por la pena del ahogamiento accidental de su hijo, el hombre decide frustrar la muerte permanentemente. Con su máquina, el científico puede capturar a una persona su Asphyx y hacerlos inmortales.
Detalles de la película
- Titulo Original: The Asphyx
- Año: 1973
- Duración: 99
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Opinión de la crítica
Película
5.5
78 valoraciones en total
Curiosa y bastante amena película inglesa, que parte de unaexcelente idea, la de ¿qué pasaría si intentamos apresar en una caja la agonía de un ser humano a punto de fallecer? ¿Lograría ser inmortal?Newport, un director para mi desconocido, indudablemente no saca todo el partido que tenia entre las manos. Pero logra una película muy interesante en todo momento, con algunas escenas impactantes, siendo siempre muy entretenida.
Con pocos, pero excelentes intérpretes, logra una narración que combina la espectacularidad con el intimismo.
Como buen producto inglés, la ambientaciòn es perfecta, con un climax en las escenas lúgubres, francamente estimables.
Una película casi desconocida, que creo no se estrenó nunca en las salas comerciales españolas, pero que merece mucho la pena.
http://filmsencajatonta.blogspot.com.es/2006/12/asfixia-asphyx-the-horror-of-death.html
Filmada con el novedoso e impactante sistema cinematográfico Todd-AO 35, desarrollado por Michael Todd y la American Optical en 1952, y que proporcionaba a la película de una excelente imagen y una impactante definición y claridad en 70mm, The Asphyx es principalmente un espectáculo dividido entre el misterio, el terror y la ciencia.
El film nos cuenta la inquietante historia de un aristócrata inglés en la época victoriana que tras realizar una fotografía a un condenado a muerte descubre la aparición de un misterioso y terrorífico ente que aparece cada vez que alguien va a morir.
A partir de ahí toda su obsesión y asfixia se centrará en intentar captar y cazar incansablemente al macabro espectro para así poder conquistar lo que de siempre el hombre ha buscado: la inmortalidad.
Eso si, para ello deberá pagar un duro peaje, llevando su obsesión hasta las últimas consecuencias.
Buen título que a pesar de contar con un bajo presupuesto y una humilde producción típica de la Amicus , trata el tema con gran inteligencia exponiendo el fascinante mundo de las psico-imágenes y los entes sobrenaturales.
Como en muchas producciones de la época la película cuenta con una excelente ambientación tanto a nivel de localización, vestuario, interpretación, etc.., destacando a un joven Robert Powell, que años más tarde sería Jesús de Nazareth (1977) en la sensacional miniserie televisiva de Franco Zeffirelli.
Una gran propuesta de la legendaria productora británica Amicus que junto a Dr. Terror (Freddi Francis, 1965) Refugio Macabro (Roy Ward Baker, 1972) Ahora empiezan los gritos (Roy Ward Baker,1973) o La bestia debe morir (Paul Annet, 1974), entre otras…, forman parte de lo mejor del terror británico de los años sesenta/setenta.
Absolutamente recomendable a todo aquel seguidor del fantástico.
Buena.
Lo primero que se viene a la mente es la imagen de las fotografías, como una señal del alma que sale del cuerpo en el momento posterior a la muerte.
Pero aparece una idea nueva, la del Asphfix, interesante, aunque un tanto fantasiosa. Igual es buena la actuación de un jovencísimo Robert Powell.
Extraña obra de terror sobre la obsesión de un aristócrata inglés por capturar la agonía del alma atormentada cuando está a punto de morir. El propio argumento ya de por sí se las trae y aunque los actores traten de tomarse en serio la historia resulta poco convincente por ser demasiado grotesca.
Elegante vestuario, buena fotografía y banda sonora agradable, con la presencia de Robert Powell poco antes de interpretar a Jesucristo en la serie homónima que rodaría unos años después, pero Asfixia me ha parecido decepcionante. Aunque supongo que muchas veces hace falta que se hagan películas así para que luego otros directores de más talento tomen algunas ideas de ellas y filmen películas memorables. Seguro que los responsables de Cazafantasmas copiaron la idea del aparato cazador de almas para su famosa película.
Interesante filme británico de fabulosa ambientación y buena factura a pesar de su bajo presupuesto, con el encanto y el buen hacer de una de las más respetables productoras de cine fantástico de los sesenta y setenta, Amicus.
El filme trata sobre el hallazgo de un científico acaudalado de la época victoriana, Sir Hugo Cunningham (Robert Stephens). Mediante el estudio de placas fotográficas de personas al borde de la muerte, localiza un extraño ente, el asphyx, que parece ser el responsable final de la muerte. Entusiasmado por el hallazgo, y ayudado por su pupilo, Giles (Robert Powell, el inolvidable Jesús de Franco Zefirelli), decide aislar a este ser, consiguiendo con ello averiguar el secreto de la inmortalidad. Pero sus pesquisas le cobrarán un precio demasiado elevado…
Newbrook construye un relato más cercano al fantástico de los mad doctor, que tan bien interpretaban actores como el inmortal Boris Karloff en las primeras décadas del siglo XX, que al cine de terror. Aporta una conseguida y encantadora ambientación victoriana con la que el espectador se siente de verdad trasladado a aquella época de grandes avances científicos y técnicos. La historia que nos cuenta Newbrook es sencilla a la par que interesante, aunque nada creíble, pero se esfuerza en ofrecer explicaciones racionales para construir un marco científico a pesar de su inverosimilitud. Recoge la ya muy trillada idea del científico que juega a ser Dios, en este caso venciendo a la muerte, pero a pesar de su desarrollo predecible consigue entretener de forma admirable gracias a su magnífico sentido del espectáculo.
Su bajo presupuesto se percibe en los pobres efectos especiales, pero su cuidada ambientación, sus buenas actuaciones y la buena factura general de la cinta evidencian en dónde se gastaron la mayor parte del dinero. La criatura no es precisamente un alarde de inventiva (más bien parece un títere bastante mal hecho), pero se compensa con creces en el resto de aspectos técnicos y artísticos.
Entretenida y de calidad.