Asesinos del futuro

3 comentarios en «Asesinos del futuro»

1. Entre la inmensa oferta de películas ochenteras como películas de terror o comedias con adolescentes cachondos en el punto de mira, que va desde Viernes 13 (1980) de Sean S. Cunningham o Porky´s (1982) de Bob Clark, aparecieron otras películas, explotations sería su término más aproximado, que resultaban ser un sofrito pasado de éstas y que ni siquiera se estrenaban en los cines, destinadas exclusivamente para su uso doméstico, esperando desde la estantería del videoclub del barrio a ser alquiladas con el fin de pasar la velada y dispuesto a aguantar lo que ofrecían, porque en ésa época poca cosa se podía pedir (a menos que no fuera directamente al cine a ver una buena película).

   El ejemplo más claro es Future Kill, estrenada aquí con el subtítulo de Asesinos del Futuro. Un ácido cóctel cyberpunk en que también se pueden encontrar referencias a 1997: Rescate en Nueva York de John Carpenter. La película, (insisto, destinada exclusivamente para nostálgicos que se quieran echar unas risas) fue dirigida por el desconocido Ronald W. Moore y que contó con un reparto al igual de olvidable, a pesar de que, entre ellos, contaba con las presencias veteranas de dos actores que interpretaron La Matanza de Texas (1974) de Tobe Hooper: Marilyn Burns y Edwin Neal.

   La acción se desarrolla en un futuro próximo (evidentemente las comillas las he añadido adrede, porque el ambiente fashion de los ochenta se huele a quilómetros de distancia) en que un accidente nuclear ha separado una zona urbana de los pijos (estudiantes niños ricos refugiados en cofradías y sociedades y a merced de unas fiestas llenas de alcohol, sexo y diversión) y los marginados mutantes que intentan hacer valer su dignidad. Pero, entre éstos últimos, se encuentra Splatter (Edwin Neal), un violento psicópata con armadura i cuchillos en sus garras (una suerte de Freddy Krueger cyberpunk) que iniciará la caza contra un grupo de jovencitos universitarios que se ponen a prueba para entrar en una Sociedad, metiéndose en las peligrosas calles nocturnas.

2. Extraño filme, con conceptos de sci-fi pero principalmente una película de acción conformada como una versión no autorizada de The warriors – Los amos de la noche (W. Hill, 1979), con algunas pinceladas de Calles de Fuego (W.Hill, 1984).

   Así, en un futuro alternativo pero proximal y ochentero, unos niñatos se adentran en un barrio dominado por punks maquillados y con conciencia antinuclear – muy bizarro – donde mora un psicópata afectado por la radiación, de estética mad-maxiana, y que lleva un brazo robótico con apéndices en forma de cuchillas con las que asesina sin piedad. Los niñatos serán perseguidos, en una noche larguísima, por su banda y otros asimilados, luchando por su vida.

   Si bien el arranque es bastante ridículo- eso de las Fraternidades universitarias – la persecución en sí, y las escenas de acción, dentro de su modestia, están bien rodadas y mejor fotografiadas, buscando el director un estilo personal y algo artístico.

   Sorprende también que una película de serie Z tenga un cartel anunciador diseñado y dibujado por el gran H.R. Giger, el artista que diseñó a Alien e ilustrador de El Necronomicón . También resulta curioso que entre el reparto, figuran dos actores de La Matanza de Texas .

   El conjunto resulta una película aunque mediocre, con cierta personalidad, que puede verse como un filme de acción barato y muy ochentero.

3. Vale es una pésima película…. algo entre una cuadrilla de chavales a lo (The Warriors) y un cyborg a lo más puto Terminator.

   Pero os diré algo:
   
   ¿Sabeìs porqué me flipa esta mierda de película?. Me flipa porque yo he sido un macarra…. y ahora lo dejo caer:… ¿Quien cojones no se ha ido de fiesta en las fiestas de cualquier otro pueblo de al lado del tuyo y no se ha visto metido en algún que otro meollo que no le recuerde a la ficción de esta película?… Bueno, yo lo dejo ahí.

   Cuando hemos sido chavales y algo gamberros siempre nos habremos encontrado con ser protagonistas de la trama de esta película…. vernos perdidos en lugar desconocido con muchísimo ambiente festivo con nuestra la cuadrilla de amigos y alguna que otra chorba en terreno hostil que nos vuelve locos además de algún que otro tonto que siempre nos busca la boca…. para después de liarnos a ostias con él tener que salir corriendo por todo el pueblo… Sí, vida, vida como la vida misma. Y como no, esta película me recuerda a eso, a nuestra adolescencia más cabrona y por eso mismo me encanta. Para mi un 10, dejándonos de las puras semejanzas con otros films… Cine b, o c ochentero en estado puro de gracia. En mi opinión todo un acierto.