Allende mi abuelo Allende
Sinopsis de la película
Marcia, nieta de Salvador Allende, el primer presidente socialista democrático que fue derrocado por el Ejército en septiembre de 1973, busca reconstruir la imagen personal y familiar de su abuelo sepultada por la Historia, el exilio y el dolor de su familia. Una mirada aguda y cercana, que intenta romper el silencio familiar sostenido por décadas.
Detalles de la película
- Titulo Original: Allende mi abuelo Allende
- Año: 2015
- Duración: 98
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Opinión de la crítica
Película
6.7
80 valoraciones en total
El género documental ha crecido ostensiblemente en las últimas décadas en Chile, y una de las temáticas principales ha sido, por desgracia, el régimen militar, que durante 17 años dejó al país con un inagotable material de trabajo, desde el punto de vista social, político e innumerables historias de vida bañadas en sangre. Hoy hablo de Allende mi Abuelo Allende, un trabajo impresionante sobre el ex Presidente de Chile y su persona, esta vez, como hijo, hermano, padre, abuelo y amigo, documental ganador del Premio L’oeil D’or a Mejor Documental en la Quincena de Realizadores en Cannes 2015.
Es Marcia Tambutti Allende, hija de la senadora Isabel Allende y nieta del ex presidente, la directora a cargo de este documental que, desde una mirada íntima y personal, intenta dar respuesta a sus propias inquietudes acerca de su abuelo: saber cómo era en su vida diaria, en su casa, con su esposa, con sus nietos y sus hijas durante la infancia.
Con más de 40 años ligado a la política hasta su llegada al Gobierno a finales de 1970, Salvador Allende llevó una vida social y familiar entre campañas políticas y una natural exposición pública, vistiéndolo de formalismo, autoridad y carácter, creando una imagen sólida e indeleble en torno a su persona, incluso para algunos familiares y, sobre todo, para sus nietos, que a muy corta edad vieron como los sueños de toda una familia se iban abajo tras el bombardeo al Palacio de La Moneda un 11 de Septiembre de 1973.
Marcia reside en México producto del exilio, como gran parte de la descendencia de la familia Allende Bussi tras el golpe, y es ella quien durante ocho años recogió los testimonios de sus primos, sus tíos, su madre y de la propia Tencha, Hortensia Bussi, su abuela, esposa de Allende y destacada defensora de los Derechos Humanos en Chile y Latinoamérica, acerca del Chicho, apodo con el que era conocido el presidente en su entorno más íntimo.
Con un relato en off, desde una voz suave, inquieta y encantadora de la propia Tambutti, el documental repasa conversaciones entre primos, sobrinos y amigos, tardes de búsqueda de fotografías familiares y visitas a la casa de veraneo, entre confesiones impactantes y material inédito de Allende siendo abuelo, padre y esposo, amigo de los niños y de los animales, desmitificando su imagen. Y con ello, haciendo latente el dolor del recuerdo que su figura, hasta el día de hoy, permanece vivo en cada uno de sus más cercanos, evidenciados cuando el tema se es tocado entre sus parientes, siendo las conversaciones con su esposa Tencha, uno de los puntos más altos del trabajo, quien con dificultad, resquemor, pero con una envidiable lucidez para su avanzada edad y deteriorada salud, da cuenta de su amor inconmensurable y su fortaleza para cargar con el peso de toda una familia y todo lo que la vida decidió para ella.
Allende mi Abuelo Allende está profundamente bien logrado porque no pretende ser más de lo que la directora quiere contar. El documental se aleja de cualquier panfleto político (aunque pueda parecer casi imposible) y supera la obvia subjetividad, adentrándonos en la historia de un hombre que vivió y murió por sus ideales, incluso si esto significase dejar de lado a sus más queridos, sin obviar además ciertos rasgos a considerarse negativos, desde su relativo machismo y sobreprotección, hasta su sabida relación amorosa paralela que llevaba con su secretaria personal.
La sutileza con que el documental aborda el tema de la reconocida infidelidad de Allende y la seguidilla de suicidios al interior de la familia, desde la del propio ex Presidente, su hija Beatriz, su hermana Laura y, más recientemente, su nieto y medio hermano de la directora, Gonzalo Meza, también son pieza clave para conseguir un resultado sobrio, lejos de cualquier tipo de manipulación para con el espectador y, con ello, firmar un documento sentido, sincero y conmovedor. Ejemplo de ello es la muerte de Beatriz mientras residía en La Habana, primogénita de Allende y uno de los temas tabú al interior de la familia, el que es tratado con la altura que el guion exige y no como un recurso efectista en pro de la narrativa.
Si bien no existen grandes recursos audiovisuales y su ritmo puede no ser lo suficientemente atractivo, Allende mi Abuelo Allende se sostiene sobre un relato que resulta interesante de conocer, construido como un álbum de fotografías familiares que nos adentra en la intimidad de una familia atormentada por el pasado y marcada por las tragedias, y a un retrato presidencial en movimiento de Salvador Allende Gossens.
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http://www.elotrocine.cl
Al ir a la filmoteca a ver este documental, tenía la intención primera de ver y saber algo más de este personaje relevante del siglo XX. Quería conocer cómo era, qué sentía, el por qué de sus convicciones políticas,…. y más tratándose de una cinta realizada por la nieta del Chicho , como familiarmente lo conocían sus más allegados.
Pues bien, y sin entrar en política, en ideologías de uno u otro bando, simpre me han atraído las biografías. Y más bien, la parte psicológica, los sentimientos, las motivaciones de los personajes a tratar.
Un experto en estas lides fue Stefan Zweig, escritor que como pocos, refleja todo esto de que venimos hablando. Genial su María Antonieta , y más que notables su Fernando de Magallanes y su Montaigne , entre otros. Sabe retratar el alma humana de sus personajes de manera asombrosa, haciéndonos partícipes del momento histórico.
Y así, llego a la sala de cine. Me acomodo y me preparo para acercarme al Chicho. Me empiezo a inquietar, qué falta de tacto, de profundidad psicológica (y eso que la directora era la nieta),…. No puedo creer lo que estoy viendo.
Después de más de una hora y media, salgo de la sala con la sensación de no haber descubierto casi nada de un personaje desconocido para mí. Una pena. La directora, a duras penas, consigue sacar algo de información de los personajes que entrevista, debido posiblemente a su falta de recursos. Su intención es buena, su resultado, pobre.
Ganador en la primera edición del premio El Ojo de Oro del Festival de Cannes -trofeo que desde ese año distingue al mejor documental de la selección oficial del certamen francés-, esta coproducción chileno-mexicana es el primer largometraje de Marcia Tambutti, nieta del fallecido presidente chileno Salvador Allende. Imponiéndose a las reticencias que su propia familia ha desarrollado a lo largo de más de cuatro décadas a la hora de abordar la figura del mandatario, la realizadora emprende una reveladora y sensible indagación en diversos aspectos que revelan inesperados aspectos del estadista en su faceta menos difundida y más humana. Donde más de alguien podría esperar rabia o rencor a la hora de sincerar los recuerdos, o también una mirada demasiado condescendiente y apologética que dejara a Allende en un altar intocable, bajo una superficie convencional dentro de los marcos del género va apareciendo una entrañable serie de memorias familiares que van más allá de los clichés políticos, por lo que incluso quienes no son partidarios del personaje o su ideología deben reconocer que estamos ante un trabajo sincero y emotivo, lleno de calidez y humanidad.
Estupendo documental. Dirigido por la nieta de Salvador Allende, Marcia. El documental, que incluso tiene un título curioso: Más allá de mi abuelo Allende , porque Allende en el diccionario significa Más allá . Es un repaso y especialmente un cuidadoso e íntimo descubrimiento de la directora y del espectador sobre la vida íntima del presidente chileno, el primero socialista, que fue derrocado por el ejército, y la dictadura de Augusto Pinochet en 1973.
Muestra el dolor y el drama de la familia Allende, que fue desterrada y maltratada, y como su nieta de forma cuidadosa realiza entrevistas a sus tías y a su abuela, quienes en sus silencios y sus miradas, ocultan pero esbozan el sufrimiento que no quieren recordar.
Allende, en el documental, es una reconstrucción y un descubrimiento, y es retratado con sus virtudes y defectos, desde un punto de vista, que no se sesga ni se politiza. Es la reconstrucción de la imagen de un ser humano. La familia que perdió sus propios álbumes familiares en el destierro, y que han sido rescatados por las investigaciones de la nieta y directora. Por todo esto, me parece un excelente documental, con hermoso tratamiento, que se presenta como un mismo álbum familiar, con el que termina el filme. Un álbum que se ha reconstruido, pero que guarda el dolor y la esperanza del pasado.
http://asbvirtualinfo.blogspot.com.co/2016/12/critica-documental-allende-mi-abuelo-allende-marcia.html
Documental donde la realizadora, nieta de Salvador Allende, realiza una introspección hacia el seno de su familia para revivir y comprender las relaciones de quienes tuvieron contacto con él, ya que ella y la gran mayoría de sus primos ni siquiera habían nacido en el momento de su muerte. Debe hacer frente a la obvia resistencia de los mayores a hablar de un tema de un contenido tan fuerte y que los mantiene con las heridas abiertas a pesar de que han pasado cuarenta años del suceso.
De esta forma Marcia Tambutti aboga por hacer un film que nace de una duda personal, razón por lo cual evidentemente es sumamente personal, es una historia de los suyos, de su familia, aunque pareciera que hay un muro entre ella y ellos justo cuando se habla del tema, como que si la realizadora no perteneciera o no tuviera el derecho de conocer y saber cómo fue su abuelo, más aún cuando al inicio del metraje indica que para ella, él era solo una imagen fija, ni siquiera con cuerpo, debido a todas las fotografías que había visto de su rostro.
Es así como la directora indaga constantemente en los recuerdos de su abuela, madre y tía, quienes entre el dolor y múltiples silencios dejan muchas puertas de la memoria cerradas. Habla también con sus primos, quienes se encuentran en una situación de desconocimiento similar (solo uno recuerda a su abuelo), sin embargo, ellos no se interrogan. Observa muchas fotografías, repetidas veces, que desconocía de su existencia, que su familia no las sacaba nunca.
Allende mi abuelo Allende es un documental muy íntimo, que nace a partir de los cuestionamientos de su realizadora, el problema que tiene es que su familia no se realiza dichos cuestionamientos y aunque parezca difícil de creer, no le ayudan a encontrar respuestas, a menos no se muestran en los 90 minutos de metraje. Personalmente considero que hacer una introspección de este tipo es totalmente válido, pero donde sus allegados aporten y no simplemente la regañen por indagar tanto a la abuela.
Por este motivo, Tambutti vuelve muy reiterativa su propuesta, desde los primeros minutos se entiende el dolor que le produce a estas personas hablar sobre dicho tema, pero a lo largo del metraje continua con lo mismo. De igual forma, el film se vuelve un ejercicio de ver fotografías (una y otra vez) muy pobre, se contextualiza vagamente pero no llena en ningún momento. Incluso pareciera que la realizadora no llega a ningún lado, preguntándose sobre el final del documental: qué era realmente lo que andaba buscando, sin mediar respuesta alguna.
Sin duda el film se pierde, no se logra encaminar el desarrollo en ningún momento, lo que es una pena porque el tema podría ser muy interesante, aparte que lamentablemente no se realiza en ningún momento un paralelismo entre la familia Allende y la sociedad chilena que sufrió este golpe, es decir los seguidores, habría sido un trabajo al menos más llamativo.