7500: Avión secuestrado
Sinopsis de la película
Tobias es el joven copiloto de un avión que es secuestrado por unos terroristas, quedando él como único negociador con los atacantes desde dentro de la cabina sellada. Cuando los secuestradores matan a un pasajero y amenazan con matar a más gente inocente si Tobias no abre la puerta de la cabina, este hombre normal se enfrentará a la prueba de su vida.
Detalles de la película
- Titulo Original: 7500
- Año: 2019
- Duración: 92
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Opinión de la crítica
Película
5.6
92 valoraciones en total
Más que en el avión la película se limita a la cabina, el 90 % o más de la acción transcurre ahí, la historia trata de aprovechar todos los recursos que esta limitación le permite, tanto técnicos como emocionales.
Tiene dos partes muy definidas, la segunda podría resultarle frustrante a muchos, sobre todo porque el personaje de Gordon-Levitt no se parece en nada a los héroes de los thrillers de acción, no es que se le activa algo y resulta tener conocimiento en armas, artes marciales, y mata a todos los terroristas sin despeinarse, el personaje es mucho más realista, algunos lo tildarían de cobarde o pusilánime, en mi caso considero que el personaje en general tiene reacciones bastante coherentes con su forma de ser, igual hubiera podido tener otro final y también hubiese sido valido. Creo que el error de la película es no saber bien qué quiere ser, definitivamente no es un thriller de acción aunque en la primera parte coqueteen un poco con sus recursos, tampoco es un drama realista sobre un ataque terrorista, está ahí en el medio.
Muy realista y creíble el secuestro del avión, visto desde el punto de vista de los pilotos, pués en la cabina transcurre casi la totalidad de la historia, que no toda. Esto lo aclaro porque no es como en Locke.
Está muy bien contada, desde la incertidumbre, con diferentes sensaciones durante su visionado, poniéndote en el lugar del protagonista en todo momento, para que entiendas su situación personal.
Una actuación genial sin duda, haciéndonos creer en todos los sucesos que van transcurriendo durante el vuelo. Totalmente asfixiante por momentos, llega hasta a agobiar en ciertas escenas, muy bien hechas.
Es en su tramo final donde ya va decallendo la tensión y se suaviza la situación. Según se van aclarando algunos detalles. Quizás hasta llega a ser bastante previsible, aunque está bien acabada eso sí.
Recomendable para pasar un mal rato, o bueno claro, sintiendo estar casi en la misma cabina viviendo la historia. Me sorprendió desde luego su estilo para bien, y siendo el debut en cine del director aún más.
Luego de casi 2 meses de inactividad desde que comencé a expresarme en este foro, vuelvo a encontrar las ganas de compartir mi punto de vista sobre lo que voy viendo durante mi vida. Les juro que no es intencional pero hoy traigo una película que también trae consigo el regreso de Joseph Gordon-Levitt, uno de los actores, en mi opinión, más infravalorados de la industria, tras unos años alejado de las cámaras tras haber sido padre y por quizás, haber estado mucho más dedicado a su plataforma colaborativa con la que tuvo un crecimiento significativo en el último tiempo.
En fin, tras estos comentarios al margen hay una película y en esta podemos jugar con esta idea de los regresos que vengo comentando más arriba: 7500 (llamada así por ser el código que se utiliza para notificar el secuestro de un avión), es una película sumamente minimalista en su concepción. Todo sucede dentro de la cabina de los pilotos de avión y formalmente se las rebusca este director aleman debutante para utilizar todos los elementos propios de el universo aeroportuario por llamarlo de alguna manera, para aportarle dinamismo al relato: cámaras de seguridad, comunicadores telefónicos, retrovisores y demás.
El efecto claustrofóbico que provoca tener la cámara casi postrada en un espacio y no moverse de ahí, siendo este uno muy reducido, sumado a la ansiedad que puede generar el protocolo de un viaje en avión, nos preparan rápidamente para la tensión que va a emerger una vez presentado el conflicto. La película, así como es minimalista en su relato, economiza muy bien sus recursos en los primeros minutos donde nos construye a sus personajes, especialmente al protagonista, del que conocemos sus virtudes y debilidades, que van a ser cartas clave para el desarrollo. Asimismo se aprovecha para presentar otros elementos que van a resultar determinantes, como por ejemplo la cámara que muestra el otro lado de la entrada a la cabina. Un comienzo muy sólido, donde nos ponen a un personaje que está dividido entre su profesión que yace dentro de la cabina y aquello que le importa, fuera de la misma. Elemento importantísimo que va a darle jugo drámatico a los momentos que suceden después. Una jugada inteligente que pone realmente en un dilema al protagonista cuando esa persona que le importa corre peligro.
Ahora bien, la película presenta ideas muy frescas sobre como abordar un film que ya se hizo muchas veces y que casi siempre siguieron un patrón bastante establecido. Acá aciertan con donde se pone la cámara, con la elección del piloto como focalización y su historia personal que nos hace rápidamente empatizar con él. Aciertan también con el secuestrador que no está convencido y que de alguna manera le permite a la película tirar un poco más de la cuerda cuando las cosas parezcan resolverse rápidamente o ir destinadas a un desenlace inevitable. Así como plantea cosas interesantes y consigue giros, aunque predecibles, efectivos para generar emociones en el espectador, los quema demasiado rápido. Como si todas las buenas ideas tuviesen una progresión natural demasiado corta y se agoten a la media hora del film. El tema es que pasando la mitad, la cosa se diluye bastante y parece remontar vuelo en un momento para luego volver a plancharse y a pesar de que termina dándole un giro al tipo de desenlace esperable, se siente el desgaste de haber sentido que lo peor ya había pasado y que en una conversación se intentan recuperar esas emociones, que el espectador, al menos a mi me paso, ya se sienten lejanas y uno no ya no logra conectar con el drama tanto como si se hubiese planteado 20 minutos antes. Más aún cuando ni siquiera ocurre un giro que justifique el por qué la película busca recuperar ese hecho pasado para golpearlos nuevamente.
Lo que espera en tierra también en su punto de anclaje al que la película recurre varias veces: el hijo del piloto y lo que necesita resolver en su regreso, la madre del secuestrador y ese lugar al que quiere regresar como si este desvío en su camino nunca hubiese sucedido. Algo espera ahí abajo y necesita de que los personajes hagan las cosas bien ahí arriba para que esos regresos sean posibles. No solo se pone en juego su destino dentro del avión, sino fuera de este. Algo interesante que propone el film pero que le faltó un poco más de desarrollo: quizás por lo rápido que progresaron algunas cosas, quizás por la limitación del espacio donde se desarrolla la acción y la voragine de los momentos, que no permitieron encontrar esos huecos donde se pudiese dar más información sobre esto sin poner en peligro la verosimilitud de los hechos.
Si bien la película aterriza bien y cierra con moño, da la impresión de que en el vuelo se olvidaron de traernos parte de la comida. Sentí que disfruté el viaje pero algo le faltó. Sigo en spoilers porque no puedo seguir escribiendo sin citar cosas puntuales del film.
De vez en cuando nos encontramos con películas que no pretenden re inventar nada ni entregarte una moralina sino únicamente regalarte 90 minutos de suspenso y tensión. De aquello va esta 7500 , la cual realizando un buen uso de los limitados recursos con que cuenta logra (al menos durante una buena parte de su trámite) sumergirte en su mundo y personajes.
Dentro de lo positivo cuenta el que la película transcurre en su totalidad en la cabina de un avión, y te lo crees… No hay flashback innecesarios, ni contactos con la torre de control, ni policías en tensión, nada. Solo un piloto y su drama. Por cierto, muy bien Joseph Gordon-Levitt, y ahí radica el segundo punto a favor de la película: no te retrata a un super héroe, sino a ser humano de carne y hueso, temeroso e incluso bastante torpe en su actuar.
Lo que resta, en el spoiler…
Encomiable ejercicio de tensión de la mano de un director que desconozco. Porque… oigan: es fácil tirar del mecanismo de reloj milimetrado, los beats de reloj, el abuso de la banda sonora y los extremos simplemente para dar entretenimiento. Pues –
– no. El responsable del film decide tomar el camino más complicado – reacciones escasamente peliculeras, psicología creíble hasta con terroristas islámicos y un realismo considerable. Cuernos – los primeros minutos son casi documentalistas. Esto está mucho más cerca de UNITED 93 que de ÚLTIMA LLAMADA. Lo cual es admirable y complicado. En fin — ¿entretenido? Según la parte del metraje – su sequedad puede resultar exigente a ratos por lo que tiene de hollywoodiense, pero, dramáticamente, es casi intachable.
Interesante, oigan. Y Gordon. Levitt, impecable. Sin un actor de su capacidad, un largometraje así se hubiera resentido, sin duda.