Viejas canciones georgianas (C)
Allí donde los límites del documental etnográfico, musical y avant-garde se confunden, nace este cortometraje del director georgiano Otar Iosseliani. Con la severa voz de los cantos populares y clásicos como permanente telón de fondo, el autor filma con avidez, sin diálogos ni voz en off, a los pueblos y las gentes viviendo sus días en las montañosas entrañas de Georgia.
Un acercamiento a una cultura y geografía que apenas ha sufrido cambios.
Viven de manera muy similar hace siglos.
Georgia, la tierra que parió al mayor asesino de la historia y el déspota, megalomaníaco más cruel, sádico, perverso con su propio pueblo que se conoce.
Muestra de ello es, no queda un símbolo suyo en toda Rusia.
Volviendo a las imágenes que nos propone, son espectaculares, con ese fondo musical de cantos populares Georgianos. No hay un diálogo en el documental.
Nos revela las maneras manuales de los trabajos artesanales, hechos en casa a pequeña escala.
Anticapitalista total.
Éste documento tiene algo más de 50 años. Estaría bien comparar con 2021. Los cambios.
Para dejarse llevar por la plasticidad de estas imágenes tan lejanas y cercanas. Un modo de vivir y sentir que probablemente no exista y en esto reside otro de los encantos y valor de éste conjunto visual.