Underworld: Evolution
Sinopsis de la película
La lucha milenaria entre depredadores ha adoptado nuevas dimensiones de violencia. Ha nacido una nueva raza en nada comparable a ninguna otra conocida. Traicionada por los de su propio clan, la guerrera vampiro Selene (Kate Beckinsale), busca venganza. Para ello, decide descubrir la verdad sobre la identidad del primer Inmortal verdadero. No es Marcus, el rey de los vampiros como se creía, sino Alexander Corvinus, padre de Marcus y de su hermano gemelo William. Selene y el híbrido Michael (Scott Speedman), protagonistas de un amor prohibido, lucharán juntos contra el poderoso Marcus, quien está decidido a liberar a su hermano preso y usar la sed de sangre de éste para llegar a dominar el mundo.
Detalles de la película
- Titulo Original: Underworld: Evolution
- Año: 2006
- Duración: 102
Opciones de descarga disponibles
Si lo deseas puedes conseguir una copia de esta película en formato HD y 4K. A continuación te mostramos un listado de fuentes de descarga disponibles:
Opinión de la crítica
5.6
68 valoraciones en total
La primera tuvo su punto y algo más de luz azulada. Era una mierda pero tenía su cosa. En cambio la secuela es una cutrez mental que solo puede gustar a los directores de la ONCE.
E. Rodriguez Marchante del diario ABC parece ser el único crítico que la defiende: Una película fascinante, que te hipnotiza con imágenes portentosas y palabras incomprensibles, que tiene algún primer plano del rostro de Beckinsale que ya quisiera el sol de la Acropolis. Juas juas… menos mal que no soy una pava y me lo encuentro sola en un bar. Qué miedorrr!!!
Por partes: 1- Fascinante sí que es, ya que una supuesta historia de odios entre el fruto de la imaginación de Bram Stoker y el que creara al hombre lobo ha de tener su punto. Vamos, un punto tan güeno como Van Helsin o La liga de los Hombres extraordinarios, las dos aburridísimas pero infinitamente mejores que esto.
2- Las imágenes portentosas las debe poner el ordenador y sus técnicos porque no se ve nada del otro jueves. Una mezcla entre gore y Mortadelo y Filemón que da una grima que pa qué.
3- Palabras incomprensibles. Jua jua… sí, éso sí. Y además añade el argumento, el guión y los diálogos y sí… oye qué sí… totalmente incomprensible… que me parto.
4- Que la prota esta güena? Qué sí hombre qué sííí… está buena. Y??? Puedes decirme que hace trabajando aquí? Es tan mala actriz que no le dan más curros? Pregunto. Bazofia de primer orden.
El hombre lobo más guay con su hermano vampiro más guay contra el sol de la Acropolis y un hibrido con una cara de imbecil que te partes nada más verlo. Soy demasiado vehemente? Ellos sí que lo son. Y si no me creéis, echarla un vistazo. Ah, la escena del polvo es para potar dos días seguidos. Abrazos.
Cuando uno va al cine a ver una de estas películas ya sabe más o menos a lo que va (aunque con Aeon Flux también iba preparado para lo peor y resultó ser aun más mala de lo humanamente previsible), y no puedes ir con el listón muy alto, porque en muy raras ocasiones te sorprenden con una película buena en términos generales (salvo con X-Men y la 1ª parte de Matrix).
La primera Underworld no estaba mal: lo más destacable de dicho film era la creación de una seudo-mitoligía barata de vampiros y licántropos. Barata, sí… pero que daba el pego y cumplía perfectamente con su cometido.
Con Evolution uno espera que profundicen más en esa mitología y, sí: lo hacen, pero no van por el camino que a uno le hubiera gustado, y te dejan con un sabor de boca agridulce… En fin, el argumento está bastante elaborado: Marcus, el vampiro que empieza a ser resucitado justo en el plano final de la 1ª parte, despierta con el própsito de liberar a su hermano William, el último de una raza milenaria de Hombres lobo, una especie de licántropo ancestral, salvaje y… ¡enorme! Y para ello debe encontrar dos piezas clave: una de ellas se halla en manos de Selene, y la otra la posee un tal Alexander Corvinus, que resulta ser el primero de todos los inmortales, padre de vampiros y licántropos. Pues eso, que el argumento, a priori, promete. Pero el señor director no es muy bueno que digamos. Más bien es un poco chapucero, y no ha sabido sacar buen partido de la historia que tenía en sus manos (bueno, a George Lucas le pasa lo mismo y sigue teniendo una legión de fans). El problema de Evolution es que está mal dirigida, y el guión no está lo suficientemente elaborado.
Lo mejor son sus efectos especiales que, lejos de abusar de los generados por ordenador, siguen con los métodos clásicos y mucho más efectivos: maquillaje, muñecos de latex y de peluche , etc. Esto se agradece, pues uno ya se cansa de las películas en las que hasta la sangre está hecha por ordenador.
Dicen que Underworld estaba pensada como trilogía (seguro que es una excusa del director para que le dejen hacer más, si cuela). Bueno, si deciden hacer una tercera… yo me centraría en los orígenes de la historia, una precuela en toda regla. Que se ambiente más o menos en la época que nos muestran los primeros 7 minutos de Evolution , en la traición de Viktor a la familia de Selene (ésto no es Spoiler, que ya aparece en Underworld I), que se invente alguna batalla épica entre Vampiros y Licántropos. Yo qué sé. Pero creo que sería mucho más interesante una precuela. Aunque, ya no podrán vestir a Kate Beckinsale en el traje de latex, vaya, vaya… igual pierden público. Pues que diseñen un traje de cuero natural, que eso se inventó antes que el tejido sintético.
Nota final: ¿Por qué han cambiado a los actores de doblaje de Kate Beckinsale (Selene) y Scott Speedman (Michael)? Si son precisamente los actores principales… La verdad es que eso queda un poquito mal.
Desde 1202 hasta la actualidad en la que se desarrollaba Underworld: Evolution la historia pretende cerrar todos los cabos sueltos y pasados posibles reanudando un plan que originó la creación de los vampiros. Sí, como leen: al parecer el primer inmortal de la historia, Alexander Corvinus, tuvo tres hijos… A uno le mordió un vampiro y se hizo vampiro, al otro un lobo y se hizo hombre-lobo y a un tercero, al parecer, la novia le tuvo que morder todo-todito-todo y se quedo humano… Es decir, que si a uno le hubiera mordido un perro hubiera sido un hombre-perro o si hubiese sido picado por una gallina (poblaban el planeta en el Siglo XIII) sería ¡el hombre gallina! Por suerte y, al parecer, sólo había lobos y murciélagos en el ecosistema donde vivía el señor Corvinus. Ni gatos ni periquitos ni cactus… sólo murciélagos y lobos…
Underworld: Evolution nos habla de un reencuentro familiar sin cámaras de Telecinco cerca entre un vampiro y hombre lobo cuasi-milenarios con papá como testigo accidental… pero, también, de una historia apasionada de amor entre una vampira guerrera embutida en cuero y látex y un híbrido que se ha olvidado la camiseta. No faltan persecuciones, bicho digital ‘amuerciélagado’, un polvo sacado de un anuncio soft-porn de cosméticos, pistolas que parecen metralletas, peleas con piruetas mortales a cámara lenta y explosiones cada medio minuto.
¡Qué se salve quien pueda…! Aunque en esta parte sobreviven los justos y los menos pecadores. Así es la dura vida en los videojuegos cuando se te acaba(n) el (los) crédito(s).
Allá por 2003 se estrenó una pequeña producción llamada Underworld, cuya premisa argumental era el enfrentamiento milenario entre vampiros y licántropos. El film era de un estilo similar a otros títulos del género como Blade (aunque introducía algunos elementos interesantes: vampiros ancianos en estado de letargo, recuerdos contenidos en la sangre, balas ultravioletas para usar contra los vampiros…). Lo cierto es que la película supo jugar bien sus bazas (diseño de producción, efectos de maquillaje, y heroína carismática), y obtuvo una buena recaudación en taquilla.
Woody Allen dijo una vez El sexo sin amor es una experiencia vacía. Pero como experiencia vacía es una de las mejores. Con esta película ocurré algo parecido. Quien vaya a verla que no se espere cine de arte y ensayo tipo Bergman, un guión elaboradísimo, o interpretaciones dignas de un Oscar. Underworld Evolution es una película intrascente, de las de pasar el rato, pero bien hecha y entretenida, que si uno acepta sus reglas y pasa por alto sus limitaciones, de seguro pasará un buen rato viéndola. Esta vez el haber contado con el doble de presupuesto ha permitido mayores dosis de acción (él prólogo y el clímax final sobresalen), mejores efectos especiales (las criaturas lucen mucho más realistas), así como mayor variedad de escenarios.
En el apartado interpretativo nos encontramos con una Kate Beckinsale que demuestra que ya no queda nada de aquella chica modosita y recatada en producciones británicas como Mucho Ruido y Pocas Nueces o La Copa Dorada, convirtiéndose en una heroína de acción muy creíble, y que consigue eclipsar por completo a su partenaire masculino, Scott Speedman. Entre los secundarios, destacar el siempre excelente Bill Nighy, que retoma su papel del vampiro Viktor, y la aportación del gran Derek Jacobi (Yo, Claudio).
Como puntos negativos, resaltar una cierta sensación déjà vu (son inevitables ciertas coincidencias en las formas, con otros films de género como Van Helsing, o la trilogía Blade), y cierta falta de ritmo en algunos pasajes. Sin embargo, y a pesar de tratarse de un film claramente comercial, es de agradecer en estos tiempos de violencia descafeinada en el cine, un título que no duda en mostrar todo un recital de formas de morir (a cada cual más cafre…).
En definitiva, un film de género que sin ser una joya (como sí lo son Dracula de Francis Ford Coppola, o Entrevista con el Vampiro), sí que está muy por encima de (sub)productos como Van Helsing, Guardianes de la Noche, o Blade Trinity.
PD:Trantándose de una producción yankee, es curioso que no esté ambientada en EEUU, sino en Hungría (país fértil en leyendas, entre las que destaca la de Elizabeth Bathory, más conocida como La Condesa Sangrienta , personaje vampírico menos popular que Drácula, pero igual de fascinante)
No hay como tener dinero para poder gastarlo, o mejor dicho, derrocharlo. Si dedicasen a los guionistas un (mísero) 1% del presupuesto cada película sería una obra de arte.
Ahí va una mejora que propone un amigo mío: Y si en vez de morderle un murciélago le hubiese mordido una mariposa, ¿en qué se habría convertido?