Under the Bed

5 comentarios en «Under the Bed»

1. Tras un gran papel en Persiguiendo Mavericks, me anime a ver en esta cinta a la joven promesa Jonny Weston.Lo cierto es que se trata de un experimento de terror que ni siquiera se puede considerar película en serio, y por eso la punteo tan alto, si me la tomara en serio le pondría un 1.
   
   ¿A quien no le ha asustado nunca el monstruo de debajo de la cama, oir ruidos y tener la luz apagada y estar aterrorizado siendo un niño?
   
   Pues basandose en esa premisa de terror infantil han intentado hacer algo decente con un guión disparatado y aunque los intérpretes dan lo que pueden (eso sí, la imagen del padre troll desconsiderado es muy penosa) el film se deja ver pero desde luego no se deja aprobar.
   
   Una mezcla de géneros a lo barato y disparatado que en su último cuarto de hora se sale de madre y hasta tira del gore más truculento quizás para justificar de alguna manera la inversión de tiempo y dinero del espectador. No recomendable y sí la ven allá cada uno.

2. Ya con el hombre de la bolsa había logrado arruinar uno de los más grandes temores que se tienen en la infancia, bueno Debajo de la cama, lo hace también, pero llevandolo a otro nivel todavía peor.
   
   Un chico, que vuelve a su casa después de haber provocado un incendio donde murió su madre, empieza a sufir nuevamente el acoso de un monstruo que está bajo su cama.
   
   El resto es cualquier cosa, además de que la película a pesar de su brevedad, ya que no llega siquiera a los 90 minutos, es aburrida, lenta, los diálogos son patéticos, los protagonista exceptuando el Angela y el hermano menos, los otros son de lo más desagradable, sobre todo el pritagonista.
   
   Bueno y depsués de aburrirnos en la primera parte, en la segunda, viene el más absoluto absurdo, mezcla de gore con cuanta película de terror se ha hecho, sobre todo con la copiadísima Poltergiest.

3. Neal es un adolescente que tras un par de años alejado de su familia, regresa a casa dónde le espera su una nueva madrasta y el reencuentro con su hermano pequeño (Paulie). Pero al volver al hogar también reaparecen las pesadillas que le impedían dormir. Por suerte para él, esta vez no estará solo, ya que el mismo peligro que le acecha, va tras de su Paulie también. Unidos por la adversidad, ambos hermanos comenzarán la resistencia contra el peligro que mora bajo la cama.
   
   Interesante segundo film de Steven C. Miller (The Aggression Scale) que nos propone una historia típica de terror y algo infantil, en la que nos encontramos con los sospechosos habituales, niños-adolescentes con miedo a los desconocido, monstruo nocturno que visita tus pesadillas, Adultos que ignoran y se ríen de los niños, todo ello envuelto con un ritmo trepidante, con unos tiempos muy bien marcados.
   
   Los momentos de saltar del sillón se combinan adecuadamente con los pequeños pedacitos de la trama invitándonos a estar online durante toda su duración. Esto en gran medida, es gracias al trabajo de Ryan Dodson (Música) consiguiendo erizarnos la piel y mantenernos en un estado de tensión durante los momentos claves, que hará saltar al escuchar el mínimo ruido, incluso al más valiente.
   
   Por si todo esto no acabará de convencer, los minutos finales nos sorprenden con una brutal ruptura, que aunque para los más puristas puede resultar poco satisfactoria, por el hecho de que se cambian por completo las normas que parecían establecidas, nos asombrara, además de aportar un interesante fin de fiesta para acabar redondeando un buen trabajo.
   
   Otro de los detalles interesantes de este film es lo cuidada que está la relación entre hermanos, largas conversaciones entre ellos con interesantes planos, complicidad y apoyo, tanto que a veces puede parecer que eclipse, pero que en realidad sin fuera diferente no sería la misma película. En la base de la relación no que solo se encuentra el toque fraternal, sino que además sirve de apoyo para dar sentido al yo contra el mundo del torturado Neal, brillantemente interpretado por Jonny Weston (Persiguiendo Mavericks) que pasa de ser un siniestro adolecente, con ojeras crecientes a cada minuto que pasa, encerrado en si mismo, a estar dispuesto a hacer lo que crea necesario para salvar a Paulie, representado por Gattlin Griffith (Linterna verde)
   
   Recapitulando, una película decente, que aunque puede pecar de guion a priori infantil y manido, compensa esta carencia con un ritmo excelente, una buena música y un buen trato a las relaciones, sobre todo, la fraternal entre los protagonistas.
   
   http://www.terrorweekend.com/2013/05/under-bed-review.html

4. LO MEJOR: El casting. Los actores protagonistas se toman muy enserio esta historia, que por otra parte, es muy cercana a todos los espectadores. Se agradece que sus responsables intenten sacar adelante este proyecto pese a todo lo peor . Es una historia interesante desde el punto de vista argumental.
   
   LO PEOR: Que a pesar del esfuerzo de sus protagonistas y el interesante argumento con el que empieza el film, la película en ningún momento llega a tener un cierto nivel cinematográfico, por lo que se convierte, en lo que coloquialmente hablando se denominada: bodrio.
   
   PD: Si no tienes ningún problema con el genero fantástico de este tipo, se puede ver sin problemas. La película no aburre y se nota que esta rodada con cariño.
   
   PPD: Recuerda a capítulos se serie tipo: historias asombrosas y/o le temes a la oscuridad ( muy noventeras ).

5. Dos hermanos de Guisconsin apenas duermen porque una especie de zurullo con garras acecha debajo de la cama. Incomprensiblemente se niegan a contar a sus amigos, vecinos, novias lo que ocurre, y mucho menos a su padre. Un padre por cierto que no se sabe si es un maltratador, un tarado borracho o es que simplemente interpreta mal un guión tontuno.
   
   Y así va pasando la peli durante los primeros 68 minutos intentando crear un ambiente tenso y expectante, pero lo cierto es que sólo consigue un desarrollo lento, soporífero, inconsistente y patatero. Finalmente, hacia el minuto 70 se desata la furia del mutógeno, así, de repente, ¡Hala!, ¡a comer!.
   
   Y bueno, los brazos del bicho no están mal y las arrancadas de cabeza molan, pero luego se les va la pinza con el submundo precipitando todo de manera absurda, insípida, incolora y muy, muy estándar. Una cochambre sin sentido con un guión salido de una galleta de la suerte de los chinos.