Three
Sinopsis de la película
Durante una noche confluyen diversas historias en un hospital: un sospechoso detenido que se niega a declarar ante la policía, un hombre que afronta una operación crucial, un hombre que ha quedado malparado tras una operación, un jubilado con ganas de escapar por el hospital, etc. Una doctora es testigo y partícipe de todas estas historias. .
Detalles de la película
- Titulo Original: Saam Yan Hang (Three) aka
- Año: 2016
- Duración: 88
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Opinión de la crítica
Película
5.6
46 valoraciones en total
Thriller dramático bastante convencional que se convierte en una película menor dentro de la filmografía de Johnnie To. Un filme entretenido pero sin ninguna escena remarcable, con el típico sentido del humor hongkonés que chirria bastante aquí en occidente y con un tramo final que roza lo ridículo.
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Three no es un thriller. Una afirmación tan obvia y baladí quizá sería prescindible, incluso insignificante, en otro contexto, pero lo cierto es que la carrera de Johnnie To ha llegado a un punto en el cual el propio género que ha abundado —que no jerarquizado ni mucho menos— en su carrera parece haberse vuelto un sujeto fundamental, cuando poco a poco no ha ido sino deviniendo en accesorio, en pura herramienta. Si años atrás podíamos hablar de To como uno de los grandes cineastas afincados en una categoría instaurada como (parte de la) esencia de una cinematografía —la del cine made in Hong Kong, donde desde los 80 nombres capitales como los de John Woo, Ringo Lam o Tsui Hark implantaron un sello propio—, hoy por hoy, y a través de ejercicios de lo más personales —como esa digresión noir partiendo del terreno psicológico en Mad Detective, su particular visión de la crisis económica en Life Without Principle, o el thriller desarmado por el esperpento en la magistral Blind Detective—, se podría hablar del hongkonés como uno de los principales reformuladores del género sin necesidad de conferirle ese rol primordial que sí tuvo en el pasado. Una nueva relación que se erige en Three como uno de los pilares centrales de un film al que no acomplejan sus (presuntos) mimbres: los reinterpreta, modula e incluso revienta en un extraño escenario —otro de tantos para el bueno de To, en esta ocasión un hospital— que bien podría servir para armar otro de sus sorprendentes ejercicios de estilo —que, finalmente llega, aunque no como cabría esperar—, pero termina por ejercer como epicentro de algo más, un extravagante drama amparado por esos ramalazos de impertinente comedia que el cineasta no ha dudado en emplear siempre que le ha sido posible.
La mirada omnipresente de ese personaje femenino surgido a través de la particular crisis de la doctora del centro hospitalario donde se desarrolla la acción no resulta casual, pues precisamente esa situación vivida será uno de los termómetros neurálgicos de Three. El vaivén de esa crónica en más de un momento insostenible —como no podría ser de otro modo, en esos juegos a los que nos viene acostumbrando To—, no es sino un claro foco del lugar al que se dirige el cineasta con su film, y ello se contempla no a través de la disposición o construcción de sus personajes, lo hace mediante el reflejo genérico que constituyen cada uno de ellos, interpelando y configurando nuevas vías en un trabajo donde las deducciones surgen por el papel tomado por los distintos géneros que se deslizan bajo Three: desde el soslayado drama de esa ya mencionada doctora, hasta el thriller desmantelado por mano de su propio autor, pasando incluso por esos ramalazos de humor mutado para la ocasión.
Para ello, no sólo resulta vital esa mixtura que el responsable de títulos como Election viene acentuando de un tiempo a este punto, también la disposición de unos espacios que cada vez se antojan más ajenos, algo que ha dejado entrever incluso en escenas de lo más disparatadas —en Blind Detective, o aquel fabuloso culmen que nos regalaba en Exiled—. Quizá la concepción de esos espacios sea otra de las sendas para comprender la (des)articulación de un terreno que, pudiendo servir como cápsula para el cine de To, ha surtido el efecto contrario gracias a la perspicacia de un cineasta capaz de reinventarse, capaz de boicotear sus propios fundamentos —esas hipertrofiadas secuencias de acción de su último acto hablan por sí solas— si con ello surten recorridos alternativos mediante los que continuar explorando y detonando el thriller, desenredando una mirada romántica que cada vez tiene más sentido pero menos significancia. Porque aquello que podría devenir peligrosamente en reiteración, ha terminado dejando paso a un juego que quizá no complacerá a aquellos que quieran ver a Johnnie To en Johnnie To, pero sin lugar a dudas resulta tan sugerente y ataviado como sus mejores trabajos.
Crítica para http://www.cinemaldito.com
@CineMaldito
El gran Johnnie To regresa con su nueva película Three (Saam Yan Hang), un trhiller médico-policíaco si se le pudiese catalogar de algún modo…
Este extraño híbrido de Johnnie To gira en torno a la ética. Médica vs. policial. El juramento hipocrático vs. incriminar a un delincuente para salvarle el pellejo a un colega policía.
La premisa del film es la siguiente: salvar al delincuente puede matar al policía. Entonces, ¿se le debe salvar?
La historia transcurre en un hospital. Más precisamente en la sala de cuidados intensivos de pacientes que fueron intervenidos por una neurocirujana que no le va del todo bien. Tenemos a un viejo demente que quiere escapar, a un hombre que quedó con secuelas y quiere morirse, y al que nos atañe: el delincuente arrogante que llegó a urgencias con una bala incrustada en su cabeza.
three
Si desglosamos Three podemos decir que es otra de las tantas películas que siguen la receta: personajes estereotipados una y mil veces en cientos de películas. Hablamos del psicópata brillante que cita a filósofos griegos, da cátedra de inteligencia, despreocupado, que juega a ganador. Por otro, al policía manchado por la culpa, la frustración y el miedo, un hombre de ley quebrantado y obsesionado con su rol. También al médico obstinado por salvar vidas, que interpone su vocación por sobre todo. En fin… podríamos seguir y seguir.
Three no es una gran película. Cae en la mediocridad y sinsentidos. Una historia con mucho potencial pero que, sin embargo, invita al sopor. Y si bien cuenta con un final que nos saca del letargo, es más de lo mismo. Repite el genial recurso convulsionante que usó en Fulltime Killer. Por lo demás abusa de la cámara lenta.
Me quedo en que se trata de un trhiller malo que busca de una manera más que evidente tomar elementos de películas de súper héroes gringas que fueron éxitos de taquilla (Batman: el caballero de la noche, y en X-men: días del futuro pasado).
Johnnie To defrauda. De lo peorcito que ha hecho.
Empezaré diciendo que en general me parece interesante el cine de Johnnie To, sus películas suelen cumplir con unos mínimos y algunas de ellas son notables: Exiled , Election 1 y 2…
En Three mezcla dos mundos, el de un hospital y el policial, las dudas, el cumplimiento del deber, la ética, enfrentarse a los enfermos o a los ladrones, haciendo un paralelismo entre esos dos mundos. Al principio funciona, presenta a los dos protagonistas y luego vamos viendo algunos secundarios que cumplen su papel. Cuando la trama se desarrolla y parece que va a despegar no lo logra y el esperado cierre con la típica escena de acción, To y sus tiroteos, no llega al nivel que consiguió en la películas mencionadas al principio, abusa de la cámara lenta pero en este caso no potencia la acción y acaba restando credibilidad y haciendo que la escena no funcione como debería. El final tampoco me ha convencido.
Una película para pasar el rato, entrentenida pero lejos de las mejores películas de su director.
Vicky Zhao Wei es doctora en el hospital, una neurocirujana ávida de intervenciones quirúrgicas y que a veces antepone sus propios intereses a los del paciente. Wallace Chung interpreta a uno de los criminales más buscados de la ciudad. Se ha visto envuelto en un tiroteo y ha recibido un disparo en la cabeza. Está milagrosamente consciente pese a tener una bala alojado en el cerebro. Louis Koo es el agente de policía encargado del caso y tiene montado un operativo en el hospital para vigilar al detenido.
El planteamiento no aporta demasiadas novedades al género y los tres personajes son arquetipos claros del rol que representan. Por un lado una doctora (siempre un placer disfrutar de Zhao Wei) seria y abnegada en su trabajo, muy profesional ella. Por otro, un malo muy malo que además es irónico, mordaz y extremadamente inteligente. Y luego está el policía que hace de policía, sin duda el peor de los tres personajes y cuya interpretación resulta anodina.
Las tramas secundarias están metidas con calzador para rellenar y alargar un poco el metraje (hora y media escasa) pero lo realmente importante es la interacción entre los tres, cómo cada uno intenta llevar la situación a su terreno. Nada demasiado destacable ni sorpresas en el guion.
Sin embargo, lo que apuntaba a peli mediocre, mejora inesperadamente el último cuarto de hora. Johnnie To nos regala 10 minutos sorprendentes que hacen que lo anterior haya merecido la pena. Acción trepidante, tiros, adrenalina, pólvora, intensidad, ritmo… y todo ello rodado de un modo cuanto menos peculiar con un empleo de la cámara lenta (o algo parecido) que no había visto antes y unos planos visualmente muy atractivos.
– Lo mejor: esos 10 minutos intensos.
– Lo peor: el papel del policía.