Power Rangers: la película

5 comentarios en «Power Rangers: la película»

1. La maldita mejor película basada en una serie de televisión que existe o existirá jamás.
   
   Tiene todo lo que uno puede desear:
   
   -Acción trepidante.
   
   -Humor del bueno.
   
   -Personajes carismáticos.
   
   -Robots gigantes liándola parda.
   
   -Profundos conflictos y decisiones.
   
   En fin, una maravilla. Dos veces seguidas la vi yo, la pena es que fue en vídeo, en cine hubiera pagado lo que hubiera hecho falta sin ninguna duda.
   
   Sí algún día tuviera que escribir un libro sobre historia del cine, esta película figuraría como uno de los grandes referentes del cine de los 90, lo tengo claro.
   
   No os la perdáis, tengáis la edad que tengáis.

2. Todos los nacidos en la segunda mitad de los ochenta recordamos con nostalgia la serie de los Power Rangers. Recuerdo como venía corriendo del colegio, me enchufaba Telecinco y me ponía a dar saltos mientras me ventilaba mi bocata de nocilla. No me fijaba en que los capítulos eran exactamente iguales, ni que la ciudad donde luchaban era de cartón, ni que llevaban trajes supercutres.Sólo me sentaba allí ha disfrutar de lo que yo ya sabía que iba a pasar. A un chaval de ocho años, esto le basta y le sobra. Aún recuerdo los grupitos de niños en el recreo comentando aún excitados la transformación de Tommy en el Power Ranger blanco y su salida del lado oscuro. Nos flipaba.
   
   Por lo que respecta a la película, recuerdo que fuí a verla cuando la estrenaron con mi padre y con mi hermana, que por supuesto fueron obligados. Yo no paraba de rajar intentando explicarles todo sobre los Power Rangers pero fui incapaz de transmitirles ni una pizca de mi entusiasmo hacia la serie. No me extraña. La película es una mierda. Y falla por no seguir paso a paso la clave con la que tantos éxitos cosecho la serie: su estructura simplona.

3. Que si nos engañaron, que si es un truño, que si pésima…
   
   Es cierto que no estamos ante una maravilla del séptimo arte, pero como película infantil y disfrutable para todos aquellos que no nos avergozamos de haber disfrutado como nadie con las aventuras de seis jóvenes capaces de enfrentarse al mal con multitud de armas y poderes, podemos decir que su traslación a la gran pantalla alucinó a todos los que seguíamos la sitcom. Y si bien es cierto que en la serie los efectos especiales eran de mercadillo, para su época, los de la película llegaron a sorprender bastante.
   
   Puedo decir que me lo pasaba en grande creyéndome uno de ellos cuando jugaba con los amigos del barrio, esos con los que hoy puedo echarme unas risas al recordarlo. Pero nunca avergonzarme. ¡Por favor!, que forma parte de mi niñez, fue estupenda y nunca volverá.
   
   Y es que no es por ser malicioso, pero la mayoría de los que en esta página la ponen a parir, parecen recordar mucho mejor que yo(que la recuerdo con nostalgia), el argumento de la peli.
   
   En fin, cosas que les pasan a algunos cuando creen hacerse adultos.
   
   Bueno, os dejo, que me han entrado ganas de ponerme el VHS y rememorar grandes momentos… ¡A metamorfosearse!

4. Estoy totalmente seguro de que la mala nota que tiene esta película está causada por el visionado medianamente objetivo y crítico, pasados los años, de la gente que una vez fue fanática de los Power Rangers.
   
   ¿Pero qué os pensáis?¿Qué iban a hacer una película con unas interpretaciones asombrosas, un guión con giros argumentales inesperados o profundidad en la trama?
   
   Esta película fue destinada al público más joven como un capítulo a lo bestia de la serie. Como puntos a su favor, hay que decir que mejora bastante bien la serie en el apartado de vestuario, las peleas y los efectos especiales (que aunque no son una maravilla, son más solventes que los de la serie de televisión), sin menospreciar al villano Ivan Ooze.
   
   En definitiva, si eres mayor de 10 años, mírala con ojos de niño, te volverá a entretener.
   
   PD: Fue la primera película que ví en cine, por eso quizás también le tengo algo de cariño añadido.

5. Estamos ante una de esas películas que todos los de la generación 80 hemos visto alguna vez en nuestra vida, causada por el boom que resultó ser una serie tan jodidamente horrorosa como Power Rangers. Los recreos de los colegios se llenaban de niños imitando a los poderosos Rangers, llamando al Turbomegazord, siendo el rojo , el blanco o el verde , etcétera. La serie japonesa triunfó en demasía y la versión americana no tardó en llegar: Jason, Trinity, Tommy, Zack, Billy, Zordon, Alpha-5 o Bull & Scull pasaron al día a día. Y por supuesto todos quisimos ver la película de los Power Rangers, un auténtico aborto que, con nueve años, era razonablemente soportable e incluso entretenía.
   
   Recuerdo que la historia era algo así como una especie de alienígena que llega a la tierra y, con una especie de mocos, esclavizaba a los adultos y los hacía trabajar en una mina con algún propósito extraño. Y como los Power Rangers, tan ser despojados de sus poderes en una especie de isla, eran entrenados por una babe con enormes boobs y poca ropa para descubrir su potencial como guerreros. Fantástica.
   
   Evidentemente la cinta era una mierda pero mantengo un recuerdo razonablemente entrañable de ella, esa especie de nostalgia que aparece de vez en cuando cuando recuerdas a los Rangers hablando con los colegas, y es que todos o casi todos hemos sucumbido a este vacío entretenimiento, hemos tenido muñequitos suyos, hemos saltado media hora antes de ser golpeados o recordamos a los masillas como los enemigos m ridículos y carismáticos de la historia. Evidentemente esta película es una auténtica mierda, pero como al menos forma parte de mi infancia -¡nostalgia!- le doy esta nota en lugar del 1 que probablemente merece.
   
   P.D: El videojuego de la película para SEGA Megadrive era sublime, todo sea dicho.