Pompeya
Sinopsis de la película
Un guionista experimentado, su aprendiz y un director de cine comienzan a imaginar una película de gángsters que transcurra en los márgenes del Buenos Aires actual. En reuniones sucesivas, va quedando claro que la sofisticación intelectual del primero –quien preferiría más Borges y tragedia griega que la sangre, el sudor y las balas con que se entusiasman los otros dos– no tendrá lugar en el guión final. Paralelamente, aparece la película imaginada: un policial violento hasta el gore, con personajes de nombres exóticos (como Dylan, el héroe del bajo mundo que queda en medio de una guerra entre mafiosos rusos y coreanos), que transcurre en un barrio de Pompeya mítico y cosmopolita. Ahora en solitario, Garateguy extrema algunos de los postulados de UPA!, para cruzar con inteligencia la crónica ácida de la trastienda del cine local con una de gángsters hecha y derecha, y obtener resultados más extraños que la ficción. (extraído de MarDelPlataFilmFest.com)
Detalles de la película
- Titulo Original: Pompeya
- Año: 2010
- Duración: 100
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Opinión de la crítica
5.4
69 valoraciones en total
Pompeya es una película de Tamae Garateguy.
La trama comienza de manera intrigante. Un grupo de guionistas discute acerca de un nuevo proyecto, una película de gangsters ambientada en el barrio porteño de Nueva Pompeya. El protagonista de esta producción es Dylan, un joven delincuente que se ve atrapado en el fuego cruzado de una guerra entre la mafia rusa y la coreana. La trama va saltando entre la historia de los guionistas que le dan forma al guión y la de Dylan, que sufre las consecuencias de las decisiones de los primeros.
Por desgracia, esta idea tan interesante en papel se hace añicos en la ejecución. Los tramos de la historia de Dylan (supuestamente, la más importante) son inconexos y están horriblemente filmados, con un estilo de cámara en mano que no es capaz de disimular la falta de presupuesto y las malas interpretaciones de los actores, que no parecen muy bien versados en la ejecución de escenas de acción. En consecuencia, las escenas en las que los guionistas debaten acerca del desarrollo de la película resultan más interesantes que las del desarrollo mismo. Todos estos conceptos son explorados a lo largo de los (excesivos) cien minutos de metraje para concluir de repente, en un final poco satisfactorio. Ninguna de las dos historias se resuelve, si la película tenia algún significado a interpretar, yo no fui capaz de hallarlo.
Con respecto al apartado técnico debo volver a mencionar el estilo de filmación, que destroza la película. La mayor parte del tiempo de pantalla está dedicado a primeros planos temblorosos. Todo está enfocado de manera tal que no se puede apreciar las locaciones ni las acciones de los actores.
Las interpretaciones van de lo mediocre a lo irrisorio. Además, todos los personajes se visten igual y hablan igual, al punto de que a veces cuesta reconocerlos.
En conclusión, Pompeya es una película que parte de un planteamiento muy ambicioso pero no logra germinar en nada concreto. Esto por si solo seria excusable si el producto final fuese entretenido, pero desgraciadamente no es el caso. Por todo lo ya dicho, no puedo recomendarla.