Love, Death + Robots. Vol. 2: Respuesta evolutiva (C)
Sinopsis de la película
En un futuro en el que los recursos están controlados por los ricos, tener hijos está prohibido por el Estado. Un policía encargado de controlar a la población se verá enfrentado a una situación que le hará replantearse sus valores.
Detalles de la película
- Titulo Original: Love, Death + Robots. Vol. 2: Pop Squad (S)
- Año: 2021
- Duración: 17
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Opinión de la crítica
Película
7.1
81 valoraciones en total
Vuelve el Love, Death & Robots del debate tras el futurismo, que nos ofrece algo más que imágenes bonitas y un argumento distópico. Esta vez con la (in)mortalidad como tema central, un policía sufrirá una crisis ética sobre sus acciones y el mundo que le rodea. La verdad que es una maravilla de episodio, pero si tengo que criticar algo, es que quizás se queda muy sobre la superficie de la cuestión moral, lanzando al espectador directamente una solución al dilema moral, que todos sabemos que es más amplio y que tiene muchas más connotaciones. Obviamente como corto funciona muy bien, pero ciertamente no deja al espectador decidir su postura: al fin y al cabo es la historia de una decisión.
El mejor con diferencia de este volumen dos.
Una excelente animación con inspiración en obras como Balde Runner , Dark City o Alita: Ángel de combate nos muestra una historia tan cruda como interesante.
Los personajes en los pocos minutos que tienen de aparecer en pantalla ves claramente su forma de pensar y actuar, teniendo como estrella absoluta el protagonista.
Mira Netflix… no tengo nada personal contra ti pero… o haces una película/serie de esto… o… o…. o empiezo a descargar torrents… último aviso…
197/57(30/05/21) Fascinante cortometraje de la serie de culto antológica creada por Tim Miller, y producida por David Fincher para el gigante del streaming Netflix, donde se dan cita diferentes formatos de animación y de diferentes nacionalidades. En este caso, en uno de los episodios de más larga duración de esta segunda temporada, nos regalan una de las entregas más serias y reflexivas de todas, ahondando en las ansias de inmortalidad, uno de los grandes sueños de la humanidad, vivir para siempre. Dirigida por Jennifer Yuh Nelson (‘Spawn’, Kung fu Panda’), la historia se inspira en la obra del ganador del Hugo y el Nebula, Paolo Bacigalupi, los encargados de recrear este futuro de manera realista son los empleados de las oficinas de Blur Studio quienes ya han hecho muchos trabajos para videojuegos y el excelente corto ‘Trajes’ el de los granjeros con exoesqueletos de la primera temporada. En este caso con una estética diferente, claramente inspirada en la Totémica obra gótica de Ridley Scott Blade Runner (la fotografía tétrica, los edificios, los autos voladores, el vestuario, el protagonista agente policial con dudas existenciales…), erigiendo una distopía desencantada, gris, lluviosa, partida en dos por las clases sociales, con la ‘aristocracia’ viviendo en las alturas de lujosos rascacielos y la ‘plebe’ malviviendo en la quejumbrosa superficie, asediada por la sombra de las infinitas torres. Visualidad en consonancia con el espíritu desesperanzado del relato, un hermoso neo-noir donde la animación es maravillosa en su fotorrealismo oscuro y sombrío donde los personajes parecen están en capture-motion, teniendo enorme expresividad. Donde su comienzo ya marca a fuego el tono del minutaje, con el frío asesinato de unos niñitos por un agente policial, y a la vez sembrando la intriga del porqué. Respuestas que están en una sociedad que ha llegado a poseer la Fuente de la Eterna Juventud, pero esto tiene un peaje, y es aquí donde se escarba para plantear dilemas morales punzantes sobre lo que seriamos capaces de hacer por vivir por siempre, o si no llegaríamos a hastiarnos al hacerlo teniendo esta contraprestación. Teniendo en el protagonista a nuestra compleja brújula moral, donde viviremos con él su tránsito emocional, sus dudas, sus preguntas, una evolución muy bien llevada en su rostro cansado y melancólico. Se le puede achacar que se me queda corto, es un planteamiento tan atractivo y mordaz que llega a parecer un teaser trailer de lo que está por venir, y donde algunas lagunas se podrían argumentales solucionar.
El capítulo posee el contraste de la vida profesional del protagonista, el detective Briggs (v.o. Nolan North), un agente con claras reminiscencias al encarnado por Harrison Ford en Blade Runner, con su vida ‘civil’, donde tiene una amante en una cantante de ópera famosa y bella, Alice (Elodie Yung), moviéndonos con ambos por ambientes elitistas, ello en contraposición los derruidos lares donde el protagonista persigue a madres con hijos. El cansancio vital de Briggs por su trabajo hace que se replantee lo que hace, y esto nos llega nítido, en su gestualidad, mirada, silencios, para desembocar en un fluido desarrollo en un clímax muy bien llevado, exponiendo con nitidez la idea central sobre que es en realidad la Inmortalidad, si está en nuestra individualidad o en prolongarla en nuestra descendencia en plan relevo. Todo ello para desembocar en un rush final de los que recuerdas por su fuerza dramática y lo que subyace.
Fascinante relato sobre la mortalidad en un futuro deprimente y gris, tanto por las paredes derruidas por el paso del tiempo, como por las perspectivas de vida de aquellos que viven debajo de las nubes, perseguidos cruelmente por la policía si no acatan las normas. La secuencia inicial plantea la crudeza del corto, y abre un abanico de interrogantes muy interesantes.
En algún momento de nuestras vidas, seguramente todos pensamos en la muerte. En nuestra propia finitud, y la de quienes nos rodean. Y asusta. Pero no menos aterradora me parece la idea de vivir para siempre. ¿Cuál sería el sentido de levantarnos todos los días sabiendo que nuestra longevidad nunca caducará? ¿A partir de qué momento los días se parecerían tanto los unos a los otros que se volverían insoportables? El corto plantea estas y otras cuestiones a partir del contraste entre el inmortal protagonista y quienes prefieren rechazar ese regalo .
¿Y por qué alguien lo rechazaría? La respuesta no está solamente en un diálogo clave durante el clímax de la historia. También está en los ojos del protagonista. Su mirada cansada y vacía contrasta con los ojos cálidos y puros de los niños a los que se enfrenta. Y en ese abismo de diferencia la pregunta se responde sola. Y ahí comprendemos (junto al protagonista) que para esos padres, que renunciaron a la inmortalidad, bien vale la pena el riesgo de vivir perseguidos a cambio ese rato en el que volvieron a ver el mundo a través de los ojos de un niño.
Desde el primer plano vemos que visualmente este cortometraje es una experiencia maravillosa. Es como sí George Orwell escribiera la historia y fuera amante de películas al estilo de Blade Runner y el quinto elemento. La atmósfera y todo su mundo está exquisitamente construido, y el dilema de su argumento central es realmente poderoso e interesante, de hecho hay una escena en una cocina que mezcla maravillosamente la humanidad, ternura y tensión. El final eso sí un tanto precipitado, como que quede con ganas de que esto fuera un largo para ver su argumento más desarrollado. En todo caso de mis favoritos de la temporada.