Los bucaneros del Diablo
Sinopsis de la película
Cuando Felipe II soñaba con invadir y conquistar Inglaterra, un barco español llamado Diablo, que ha sido afectado por una tempestad ignorando que han destruido a la Armada Invencible, y que ha quedado aislado del resto de la flota, busca refugio en el pequeño pueblo costero británico de Canwall para efectuar las reparaciones oportunas. Una vez en tierra firme el capitán Robeles (Christopher Lee) y su tripulación se enfrentarán con los habitantes del lugar, tomando el control del pueblo, asolando la zona, haciendo creer a sus habitantes que la Armada Invencible sigue intacta y que Felipe II es el nuevo monarca de las islas. Acaban capturando a una de las muchachas del lugar como método para que todos los habitantes colaboren en las necesarias reparaciones que necesita el barco. Afortunadamente para los habitantes de Canwall, estos se saben defender por si mismos, contando además con la oportuna ayuda de uno de los miembros de la tripulación que decide abandonar el barco para ayudarles.
Detalles de la película
- Titulo Original: The Devil-Ship Pirates aka
- Año: 1964
- Duración: 86
Opciones de descarga disponibles
Si lo deseas puedes descargarte una copia la película en formato 4K y HD. A continuación te mostramos un listado de posibilidades de descarga disponibles:
Opinión de la crítica
5.3
96 valoraciones en total
Como no todo era terror en la casa del terror Don Sharp (que pronto se convertirá en uno de los realizadores habituales de la segunda división de la productora) entrega un film menor pero simpático, perteneciente a la vertiente aventurera (sub-categoría piratas, última de una serie que incluye títulos tan agradables como Pirates of blood river, La bahía de los contrabandistas, ambos de John Gilling o la muy curiosa Captain Clegg) de la imprescindible Hammer. El resultado es casi un film de hazañas bélicas disfrazado de swashbuckler en tierra, con fuerza de ocupación, heróica resistencia, sacrificios y sabotajes, con el gran Christopher Lee de capitán español torvo, cruel y sádico, luciendo su nada desdeñable dominio de la esgrima enfrentado a un pequeño pueblecito ingles que ignora que su país no perdió la guerra. Ingenuidad y gallardía, maldad y traiciones a ritmo vertiginoso y con un espléndido empaquetado, rubricado por una brillante banda sonora y la presencia de algunos secundarios habituales, como Andrew Keir o un muy bronceado Michael Ripper, eterno posadero y aquí rijoso rufián.
Cinta inferior a The Pirates of Blood River, también de la Hammer, pero sin embargo resulta entretenida. Christopher Lee siempre es un sólido interprete, acompañado de otros habituales de la productora inglesa, como Michael Ripper y Duncan Lamont que desarrollan una historia liviana, La acción llega en los minutos finales de la cinta, pero no resulta una película mala, sólo inferior a la que menciono de John Gilling. Rodada íntegramente en Inglaterra.