La vida sexual de las universitarias (Serie de TV)

4 comentarios en «La vida sexual de las universitarias (Serie de TV)»

1. Esta serie que parece que va a ser comedia no es comedia, es sólo una serie denuncia de lo malos que son los hombres, sin más.

   No hay un personaje masculino positivo, ni uno. Todos son manipuladores, mentirosos, egoistas, y violadores en potencia, todos. Hasta los personajes de los padres son lamentables, uno es un padre ausente y otro un memo.
   
   Es triste que se realizen productos así solo porque está de moda, se puede hacer denuncia, pero no cargando tanto las tintas porque la mayoría de los hombres no son caníbales y hay hasta hombres en el mundo educados, buena gente, algunos eso si, dos o tres en el mundo según esta serie.

   Como serie de comedia no hace gracia, y como crítica social no funciona porque cargan las situaciones, a una casi la violan y la acosan, a otra un entrenador (hombre) mayor se enrolla con su jugadora, otra es lesbiana pero no puede salir del armario por la sociedad patriarcal, y otra tiene relaciones sexuales con un chico pero la utiliza (aunque se ve en el capítulo que la verdad no se sabe quien utiliza a quien).

   Son 4 protagonistas y fijate las cosas que les pasan, si llegan a ser 6 no quiero ni imaginarmelo.
   
   Es lo que pasa por crear un producto que quiere ser superpoliticamente correcto en estos tiempos.
   
   Conclusion: Los hombres son lo peor de lo peor.

2. La vida sexual de las universitarias (The Sex Lives of College Girls)’ es una serie de HBO MAX entorno a unas universitarias y su vida estudiantil. Podría decir que también se centra en su vida sexual, pero estaría faltando a la verdad, ya que sí, hay de eso, pero en pequeñas dosis. Esto no es ‘Sexo en Nueva York‘ (afortunadamente…), aunque se haya vendido como tal, estando ante una agradable y entretenida comedia estudiantil que se queda un poco a medias, ya que le falta picante (o dicho de otra forma, mala baba).

   Con esto no quiero decir que necesite más sexo en la serie, no van por ahí los tiros, sino que el humor no es tan gamberro y desternillante como se vende en sus adelantos (sinceramente, me esperaba una especie de ‘American Pie’, y no lo es). Y es que la serie no da tanta gracia como se había prometido, aunque cuando apuesta por el dramatismo funciona de forma espectacular, abordando temas como los de la homosexualidad, el feminismo, el machismo o el abuso sexual, todos tratados de forma impecable y sin que pensemos que están metidos de forma forzosa, como sucede en infinidad de producciones.

   También hay un gran hueco para la amistad, potenciada por unas protagonistas sensacionales. Bueno, casi todas, ya que hay una que no está a la altura de las otras tres (la hija de la senadora, con una trama que jamás funciona, que no es otra que la del entrenador). A pesar de ello, se les coge cariño, con unas actrices entregadas a la causa y engrandeciendo el conjunto final, como es el caso de la estupenda Pauline Chalamet (hermana de Timothée, la gran sorpresa), una hilarante Amrit Kaur (claramente inspirada en la humorista Mindy Karling, vista en ‘The Office‘ y creadora de esta serie) o una emotiva Reneé Rapp, en un personaje cargado de matices. Las tres (no menciono Alyah Channelle Scott porque su personaje la impide brillar) hacen que la serie sea algo más.

   No voy a centrarme demasiado en el apartado técnico, limitándome a confirmar que es el esperado en un producto de estas características, cumpliendo sin más. Eso sí, es una delicia y un total acierto que sean diez episodios de apenas veinte minutos cada uno, sin subtramas innecesarias y contando lo justo y necesario. Eso hace que la serie sea más atractiva y se pase como un suspiro. Qué aprendan otras series, porque, mal que nos pese, es el nuevo formato que muchos esperamos y necesitamos.

   Y dicho todo esto, la serie supone un buen entretenimiento con mensaje, que da lo esperado como comedia estudiantil, pero a la que le falta mala baba y humor más cafre, en pro de uno más convencional de lo deseado. Si se hubiese desmelenado un poco más, estaríamos hablando de una de las grandes series de 2021, pero no deja de ser una propuesta la mar de recomendable.

   La serie deja muchos frentes abiertos (de hecho el final parece el Cañón del Colorado), pero por fortuna esto no es Netflix, por lo que se ha confirmado una segunda temporada, en la que por supuesto me embarcaré, porque quiero saber más de estas alocadas y entrañables universitarias. Por lo tanto, misión cumplida.

   Más críticas: ocioworld.net

3. De momento (vistos tres capítulos) es bastante mejor que lo que su publicidad parece prometer.

   Hay que fiarse más en la autoría de Mindy Kalig y menos en los críticas que dicen que es heredera de Sex and the city .

   No, no lo es. Afortunadamente.

   En lo que sí estoy de acuerdo es en el talento de las cuatro actrices protagonistas.

4. Mindy Kaling tiene una serie muy molona, divertida y con mensaje, que es The Mindy Proyect, con la que he disfrutado muchas tardes con sus protagonistas, sobre todo con la principal. Ahora, hablando de ésta, las comparaciones son más que odiosas, son diabólicas. He leído nombres de grandes series como Sex Education (con la que no tiene absolutamente nada que ver), Greek (otra gran ficción y con la que más quisiera tener algo en común) o con mediocridades de mal gusto como Sexo en Nueva York, de la que sólo pude ver media temporada porque me quedaba dormida siempre. Pues ni lo uno ni lo otro. Si os digo la verdad la empecé para conocer a la hermana Chalamet, pero ni ella, ni ninguna de sus protagonistas, salvan de la quema este rollazo. Voy por el sexto episodio y ya no voy a ver más. Es aburrida, no tiene gracia en nada, sus protagonistas, tanto ellos como ellas, no tienen ningún carisma, o puede que el guion sea malo (ojo, yo misma no podría hacerlo mejor, probablemente), lo que me llama rabiosamente la atención es que la crítica profesional se deshaga en halagos infinitos, tanto con su creadora como con el guion mismo. Bastante vomitivo todo, ciertamente.

   Lo real es que te puedes acercar a la ficción de Kaling si estás aburrido y no quieres perder mucho tiempo mirando la pantalla. De sexo no tiene apenas nada, así que tranquilos y tranquilas a los menos arriesgados, no vais a ver ninguna escena subida de tono. Todo esto me ha recordado a otra serie que ponían todos los profesionales como el no va más y que me quedé también dormida (no recuerdo ni su título, pero tiene un siete y pico de nota media). Para gustos los colores, claramente, pero las comparaciones que han hecho, tanto para bien como para mal, no tienen nada que ver con la realidad que vais a ver. Seguramente os olvidéis de estas chicas nada más terminar el último episodio. Si quieres algo divertido, mi consejo es Greek. Si quieres que te hablen de sexo de verdad, Sex Education y si quieres ver a mujeres haciendo el ridículo, pues…ya sabéis la respuesta.

   Sosísima es escribir poco sobre ella.