La víctima número 8 (Miniserie de TV)
Sinopsis de la película
Miniserie de TV (2018). 5 episodios. Un atentado de naturaleza yihadista en pleno casco viejo de Bilbao acaba con la vida de siete personas y deja malheridas a más de una treintena, muchas de ellas de gravedad. Víctimas y verdugos serán a partes iguales los protagonistas de una trama en clave personal. Narrada a modo de thriller, la historia trata cómo esos personajes viven las consecuencias de la barbarie. La investigación policial se centrará en atrapar a los responsables de la matanza. Una cacería en la que nuestros personajes se verán inmersos en una vertiginosa espiral repleta de giros insospechados. (Fuente: Wikipedia)
Detalles de la película
- Titulo Original: La víctima número 8
- Año: 2018
- Duración:
Opciones de descarga disponibles
Si deseas puedes conseguir una copia de esta película en formato HD y 4K. Seguidamente te mostramos un listado de posibilidades de descarga directa disponibles:
Opinión de la crítica
6
25 valoraciones en total
Inteligente thriller producido entre la televisión autonómica vasca y telemadrid, por lo que su ámbito de distribución, al menos al principio, va a ser muy limitado.
Ocho capítulos para presentarnos un atentado yihadista en el que una furgoneta atropella en pleno casco viejo de Bilbao a una serie de personas, muriendo ocho de ellos. Curioso que elijan dos ciudades intensamente golpeadas por el terrorismo autóctono de ETA, y ese título de La víctima número 8 da mucho que pensar y nos pone rumbo a las claves que también en ocho capítulos se resuelven.
Guión inteligente, muy buenas actuaciones, donde destaca con luz propia Verónika Moral y Marcial Álvarez, un secundario de lujo al que parece que tienen marginado y que apenas aparece en los créditos, para un producto de gran factura.
Notable, 7.
Otra serie que trata de los poderosos que abusan, cuyo único leitmotiv es el poder y el dinero. Ya es un exceso de este tipo de series el último tiempo, parecen argumentos copiados, ya se volvieron reiterativos. Y como casi todas las de este estilo, pecan de ser previsibles.
Suelen ser entretenidas, no aburren, esta vez no es la excepción. Pero tampoco encantan, son como una formula comercial para mantener la atención, un correcto engranaje de eventos atractivos, pero jamás generan cuestionamiento en el espectador, sus personajes no encantan (tienen menos profundidad que un charco de agua) y en un par de semanas ya ni te acordaras muy bien de los acontecimientos. En otras palabras, lejos de ser una obra memorable, son una creación 100% comercial, 0% magistral.
La temática de la tensión entre la policía local y la nacional (la policía vasca y la madrileña en este caso) es una copia total a un argumento excesivamente trillado en series gringas. La policía embarazada, que actúa en funciones de alto riesgo como si fuera una atleta, es un argumento tan absurdo como poco creíble. Y bueno el argumento hiper reiterativo de la ambición, la falta de moralidad y la corrupción de las instituciones, ya parece demasiado desgastado, sobre todo cuando se toca en forma burda, como es el caso.
Otra serie malograda por un guión más que previsible.
Como casi todo producto español, la dicción de los actores es deplorable. La ambientación (la ropa de la familia del presunto terrorista parece recién estrenada en todo momento), los tópicos (el mal rollo entre la policía vasca y la estatal está más que anunciado –a alguien le suena a las relaciones entre el FBI y los policías locales americanos?–), el buenismo tan de moda (los interrogatorios a la familia del acusado de terrorismo más parecen una reunión para tomar el té que un interrogatorio policial), etc. etc. hacen que con un capítulo haya tenido bastante.
Otro fiasco (y van …)
Un atentado donde mueren ocho personas es el interesante punto de partida de esta serie, uno se imagina una investigación, un argumento serio que nos lleve a una verdad oscura y oculta, pero enseguida todo se desmorona como un castillo de naipes, no es que caiga poco a poco, es que se derrumba ya desde el inicio, la trama parece que la han pensado en una noche de copas, muchas copas, donde todo vale y suena bien, los personajes centrales son en su mayoría tan ridículos que los actores no saben por donde tirar ni salir, los malos son de chiste, completamente absurdos, ni salidos de un tebeo de Mortadelo y Filemón, los buenos vergonzosos simplemente.
Lo único bueno es que tampoco hay que esperar mucho para darse cuenta del desastre, muy pronto ya suenan las alarmas en tu cerebro que te avisa del gigantesco bodrio que tienes delante. La serie tiene algunos fallos que son difíciles de explicar, parece que ni los propios autores la hayan visto.
En definitiva, un producto donde solo hay un envoltorio bonito, dentro no hay nada, solo una sucesión de despropósitos.
Estoy un poco confundido, porque hasta el último capítulo la serie me atrapó en un grado alto, a pesar de que ya se conocía la trama a partir, creo, del segundo capítulo y no había mucho lugar para novedades que modificaran el guión. Pero sí que era interesante el desarrollo si uno está dispuesto a ser cómplice de muchas situaciones francamente inverosímiles (la policía embarazada que actúa en sus funciones como si fuera más bien una atleta arriesgando su vida y la del bebé por nacer, es una de ellas, no la única), hasta que llega el final… qué fiasco el final…
Si la serie terminó definitivamente, el final es espantoso, si ese final se preparó para continuar en próximas temporadas, entonces es una estafa al espectador, porque le obligaría a quedar cautivo de lo próximo que se les ocurra a los guionistas para procurar un desenlace más razonable. En ambos casos lo veo como un fiasco, pero dado que esta sensación surge recién en los últimos minutos de las ocho horas que dura, y que venía mereciendo una muy buena calificación, le asigno un 4.