Kosovo, tierra robada
Sinopsis de la película
Documental de producción checa sobre el conflicto de Kosovo. Primero expone un resumen de la historia de la zona, seguido por la descripción de los conflictos tras la disolución de Yugoslavia así como la Guerra de Kosovo y la situación después de esta. El documental se centra en numerosas entrevistas con civiles de origen serbio y, en menor medida, con soldados albanokosovares. Aunque fue uno de los promotores del documental, la Televisión Checa continuamente postpuso la emisión de éste, argumentando su carácter pro-serbio , y que por lo tanto, podría causar muchas emociones negativas .
Detalles de la película
- Titulo Original: Uloupené Kosovo
- Año: 2008
- Duración: 57
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Opinión de la crítica
6.6
76 valoraciones en total
No ayuda a la verdad el hecho de que la Televisión Checa pospusiera una y otra vez la emisión de este documental en base a su supuesta parcialidad de sesgo pro-serbio . De hecho llegaron a afirmar que el tono del documental podría causar emociones negativas . No hay lugar a dudas de que lo que propone Václav Dvorák escapa a lo políticamente correcto, lo cual no debe echarnos atrás, sino más que eso convertirlo en un estímulo más para introducirnos en la atrevida propuesta del director checo y analizarla. El productor de la cinta, Alesz Bednarz, sostenía que esa parcialidad tenía como base el hecho de que la población ha sido interesadamente informada sobre los conflictos de los Balcanes a lo largo de los años, sobre todo por televisión, pero también por otros medios . Lo único a lo que pueden llevar los intentos de la Televisión Checa por mantener a buen recaudo el documental que en un principio patrocinaron no puede hacer sino levantar suspicacias. Negarle al ciudadano de ejercitar su autonomía intelectual en torno a un asunto sobre el que han corrido tantos ríos de tinta deja en muy mal lugar a las autoridades y a la dirección de la Televisión Checa, por suerte hoy en día existe internet y, gracias a este medio, la posibilidad de acceder a la información sin contar con los intermediarios tradicionales a los que Alesz Bednarz se refería.
No me importa reconocer que he quedado seriamente noqueado por el documental, que sin lugar a dudas está genialmente montado. Todo el aparato argumentativo de la obra busca un planteamiento alternativo al comúnmente aceptado. En cierto sentido Dvorák no hizo otra cosa que tratar de arrojar cierta luz sobre las múltiples sombras que había en torno a los sucesos de Kosovo desde los años 80 pero, especialmente, en lo referido a finales de los 90 y principios del nuevo siglo. Demasiadas dudas, demasiados intereses como para dejar que una opinión alternativa salga a la luz. Pero además Václav Dvorák jugaba con un escepticismo dominante y con un tema completamente desactivado para la opinión pública internacional. Hoy por hoy, más allá de los propios albano-kosovares y serbo-kosovares, además de algunos patriotas residentes a ambos lados del enclave, ¿a quién le importa Kosovo? Naturalmente a nadie, incluso Belgrado parece estar tomando cuenta de que no ha hecho sino librarse de un agujero negro que absorvía sus energías a todos los niveles desde tiempo inmemorial. El tiempo siempre suele jugar en contra de la verdad y en este caso se ha demostrado, pero también se han venido iluminando las sombras que han dominado el camino de Kosovo en los últimos doce años, buena muestra de ello es el tráfico ilegal de órganos, muchos de ellos de serbios prisioneros del UÇK (Ejército de Liberación de Kosovo).