Jamás leí a Onetti
Sinopsis de la película
Jamás leí a Onetti es un documental–homenaje a este gran escritor uruguayo, en el cual se recrea con testimonios, palabras, dibujos y música, parte del legado onettiano. A partir del vínculo entre diversos tipos de escritura, en la película también se interroga acerca de los medios y los fines de todo proceso creativo.
Detalles de la película
- Titulo Original: Jamás leí a Onetti
- Año: 2009
- Duración: 78
Opciones de descarga disponibles
Si lo deseas puedes conseguir una copia la película en formato HD y 4K. A continuación te detallamos un listado de fuentes de descarga disponibles:
Opinión de la crítica
Película
6.3
27 valoraciones en total
La leyenda de Onetti amenaza con devorar sus escritos precisos, sus hondos desgarros iluminados por una prosa densa, oscura, virtuoso narrador de aliento breve, intenso, de frases perfectas, adjetivos justos y creador de un mundo poblado por seres tan frágiles, débiles y perdidos como estamos todos nosotros, los que algo escribimos y poco contamos.
Este bonito documental recrea su figura a través de una urdimbre fragmentaria y hermosa, de pequeños detalles delicados en diferentes aires y personas, desde escritores a dibujantes o cantantes, de su mujer a sus amigos.
Mil y un anécdotas (las mejores las de Galeano, que las cuenta bien, quizás demasiado bien) para una visión mítica, sutil, elevada de la figura perdida.
Ese escritor de vida difícil pero dichosa a su manera libre y contradictoria. Estaría a mitad de camino entre el marginal orillado por la pompa y el autor lleno de medallas y cócteles. Él fue reconocido en vida, premiado y admirado, pero nunca de los del relumbrón y el altavoz, prefirió la cama y el cigarro, la casa y los colegas. Fue un tumbado de categoría (de la raza de los Oblomov), de los que ya no quedan. Lo mismo que escritor de mano y papel, un hombre de otro tiempo que si uno comete la temeridad feliz de acercarse a sus pequeñas obras corre el peligro de contaminarse para siempre del virus de la incertidumbre fértil, del terreno ambiguo donde nada es algo del todo y acaba seguramente convertido casi en sombra, o mejor, en personaje (tan vivo que parece inventado).
Su misma forma troceada y cambiante, su retrato partido y delicado hacen de este documental un placer menor, jugoso, corto, sabroso, bien hecho y suficientemente delicioso.
Un acercamiento distanciado y cariñoso a la estatua intocable de un escritor que ocupa un lugar privilegiado (o triste, según se mire), el de los que son más encumbrados, citados y admirados que leídos de verdad (¿o eso les pasa a todos los buenos?). Que quizás por eso ni siquiera tiene la suerte de ser criticado o vilipendiado en su justa medida, como todo hombre de bien que haya hecho algo que valga la pena, como todo gran escritor merece indudablemente, esa afrenta emitida con severa justicia desde la multitud ofendida, escrita en las carnes dolientes del pobre grafómano durante su maltratada vida y pagada con olvido en la manoseada y efímera inmortalidad. Nada le conceden en este caso, son implacables sus despiadados hagiógrados, solo homenajes y fiestas, galas a las que imagino que iría con la risa entre los dientes, imaginando que está en otra parte, no, nunca en Santa María.