Itazura na Kiss (Serie de TV)

5 comentarios en «Itazura na Kiss (Serie de TV)»

1. Realmente no me esperaba que las escasas críticas de la página fueran tan negativas, cosa que en el fondo me alegra aunque me parezca injusto despachar el asunto con un simple «qué machista».
   
   Recordemos que este anime es para chicas. Qué pasa, entonces. ¿Es que las adolescentes japonesas y del resto del mundo que lo ven son «machistas»? Debemos asumir de una vez por todas que de la misma manera que hay un instinto muy fuerte en el hombre de dominar, hay también una pulsión femenina de ser dominada. Sé que esto no os gusta leerlo, pero es completamente cierto. Novelas románticas, animes, series, incluso fanfictions que podamos encontrar dirigidos a o hechos por mujeres tienen un denominador común en su inmensa mayoría: prototipos masculinos dominantes y dominadores y protagonistas femeninas sumisas y dominadas. Para que la cosa no cante demasiado, ellos suelen tener algún punto débil que los hace vulnerables y ellas presumen de cierto carácter que, a fin de cuentas, nunca les sirve para lo que les tiene que servir.
   
   Ahora bien, partiendo de esta naturaleza del ser humano, deberíamos intentar modular, encauzar y expresar modelos positivos masculinos y femeninos en los que esa dominación no resulte agresiva, humillante o, en una palabra, perjudicial, especialmente para la mujer. Porque no tiene que ser así. Me acordaba mientras veía este anime de mi adorado y amado Shessomaru de «Inuyasha», por lo que tiene de frío y de indiferente, pero es que creo con sinceridad que las comparaciones con Naoki llegan hasta ahí.
   
   Qué es esto de que un ser humano (ya no importa que sea hombre o mujer) tenga que ser tratado como un perro por otro ser humano por la simple excusa de que está enamorado. Todos nos fijamos en la pareja protagonista de Kotoko y Naoki, que pese a lo criticable que sea, hay admitir que hacia el final el muchacho mejora bastante (empeorar sería ya tremendo…). Sí, todos criticamos que Kotoko aguante sus insultos y sus rechazos y que durante años esté a la expectativa, a ver si por algún milagro el idiota se enamora de ella y decide casarse (cosa que es mentira, no os dejéis engañar, niñas). Sin embargo, ¿nadie se ha fijado en el personaje de Chris? ¿Existe algo más humillante, denigrante e insoportable que la trama de esta chica?
   
   Un enamoramiento incomprensible en el que él no hace absolutamente nada y ella cae en sus brazos, en mi opinión de una forma más patética que la propia Kotoko. Por supuesto, se pega a él como una lapa y aguanta lo que al hombre se le antoje hasta que en un arrebato, quizá ya por cansancio, le diga, como quien le dice a un perrito, «empiezo a quererte un poco». Pero si no se lo dice, da igual, ella sigue ahí, como la mascota de turno. De verdad, qué mundo estamos construyendo en el que la mujer ha perdido toda autoridad y dignidad y su autoestima está por los suelos, arrastrada junto con su amor propio y su orgullo, en pos de un falso e equivocado concepto de «amar».
   
   El anime hay que decir es un completo culebrón, así que enganchar, te engancha. Y la suegra es divertidísima.

2. Queridos artistas japoneses, ¿sería mucho pedir que aparcaran su rancio machismo?¿sería mucho pedir que firmaran un buen argumento?¿unos personajes coherentes?. Creo que están dormidos en esa parte del mundo por eso no oyen las críticas de la otra parte. Cuando nosotros criticamos, ellos planchan la oreja. En fin, esto (no la llamo serie, sería darle un estatus y este bodrio no tiene ni estatus ni na) va de una chica que tiene problemas académicos. La chica está enamorada de un gilipollas, que no le da ni la hora. Hasta ahí todo bien. Ahora empieza el peñazo: la chica, por unos motivos bastante extraños, pasa a instalarse en la casa del chico que ama. Allí la humillan durante años, la familia al completo, a excepción de la madre del chico. Ella sigue colgada por él, rechaza estar con otros, trata de complacerlo, pero él no quiere saber del tema.
   
   No se sabe cómo, ni porqué, una noche de tormenta en que ella rechaza a un pretendiente aparece el maromo con un paraguas. Le propone matrimonio y ¡plop! ¡ala! ¡a la iglesia!, pero él continua inexpresivo y maltratador, como si en vez de planear una boda, estuvieran planeando evadir impuestos, (evaluación romántica de la situación =0). Así que entre unas situaciones malinterpretadas y otras que ni se interpretan (porque no interesa, parece pensar el autor), va pasando la trama (que no es trama, es una cosa larguísima, en que sale muchas veces la cara inexpresiva del prota) y de ahí llega al final, con lo que das gracias porque, como dice uno de los personajes, ella se ha casado con alguien que es capaz de arreglarle las cosas . Y yo añadiría a esta frase, él arreglaría muchas cosas, pero esta serie no la arregla ni el mísmiso Somerset .
   
   ¡Qué decir! Que hecho chispas por los ojos porque ha sido una mujer quién me ha recomendado verla. Y también porque me parece un insulto a la inteligencia y un intento de manipulación mental de lo más burdo. Supongo que si fuera hombre me lo tomaría más a la ligera, es lo que tiene, ser objeto de manipulación pero en forma de halagos.

3. Hace muchos meses me vi Toradora! y me encantó, vi Kaichou wa maid sama y me enamoró. Ambos protagonistas masculinos son dulces, atentos y aunque a veces parecen algo difíciles, se ve que sienten algo por las protas femeninas. Pero aquí nanai: Irie es un cactus, y Kotoko, gilipollas.
   
   ¿En serio alguien es capaz de aguantar todas esas humillaciones y vejaciones de tu propio marido?
   
   No la veáis. Por vuestro bien.

4. Si siempre te has preguntado qué pasa con los protagonistas tras el romance de instituto, esta es tu serie.
   
   Comienza muy fuerte y bastante bien, es amena, divertida y en cierta medida original. Pero lamentablemente, a medida que avanzan los episodios va perdiendo fuelle. Si te gusta el género, lo más seguro es que esta historia resulte de su agrado, pero aviso… para ser un genero mayoritariamente para chicas, deja ver bastantes aspectos machistas (o al menos esa ha sido mi impresión).
   
   Francamente… le pongo un 7, a pesar de que creo que no lo merece del todo. En fin, no será ni la primera ni la última película del Filmaffinity que tiene una nota injusta.
   
   Aun con todo esto, la serie en general está bastante bien. Lo más seguro es que no se convierta en tu anime preferido, pero si pasaras un rato entretenido viéndolo, o al menos te reirás con la madre del protagonista.
   
   Cosas en pro: No te deja ninguna pregunta sin resolver, y tendrás todo el amor que quieras sin llegar a ser ñoño.
   
   Cosas en contra: Demasiado larga. Yo creo que sobre el capitulo 15 la puedes quitar…porque en mi opinión… lo demás es un poco de relleno (no es que sobre, pero vamos, que tampoco es que haga falta)

5. Me he quedado muy impresionada de lo mucho que gusta esta serie entre los fans del shojo, quienes tachan esta serie de linda y romántica. A mi gusto, nada más lejos de la verdad. Prácticamente en todos los episodios la actitud de Irie, el protagonista, es tan fría que parece despreciar a Kotoko todo el tiempo. La pobre chica es humillada, insultada y mirada con indiferencia una y otra vez. Tantas, que me parece excesivo. He visto ya muchos shojos y este es el primero que me encuentro con un protagonista tan borde. He de reconocer que en dosis pequeñas a las mujeres nos gusta que nos lo pongan difícil, pero otra cosa distinta es ir mendigando amor. Así pues, el protagonista me cayó mal desde el principio.
   
   Otra cosa que detestaba en este anime eran las apariciones de Jinko-san, la amiga de Kotoko porque está doblada con una voz tan desagradable que me daba repelús cada vez que la escuchaba hablar…
   
   Si bien Irie es lo que menos me gustó del anime, he decir a favor de la serie que tiene otros tantos puntos a su favor. Por ejemplo, el final no es el típico de los animes que terminan con un beso, si no que avanza mucho más en la vida de los personajes y los últimos episodios sí son muy bonitos. Además, tiene algunos personajes muy graciosos como la madre de Irie (¿¿¿Quién no quiere tener una suegra así???) que a mi gusto, protagoniza las escenas más graciosas de la serie.
   
   He estado tentada a darle incluso menos nota porque de verdad que desde que la serie comienza hasta más de la mitad creo que la protagonista se arrastra de una forma que te saca de quicio. Esta serie es como Toradora o Kaicho wa maid sama, sólo que al revés y con una peor actitud (¡no hay nada peor que la indiferencia!).
   
   En fin, la serie no está mal del todo, pero hay otras dentro del género que a mi parecer son mucho mejores.
   
   Saludos!!