Guinea Pig 6: Android of Notre Dame
Sinopsis de la película
Un científico enano experimenta con muchachas tratando de encontrar una curación para su hermana enferma. Una misteriosa organización le suministra especímenes a cambio de compartir los éxitos que pueda obtener con las investigaciones. Un día, Kato, empleado de la empresa, hace una visita a la mansión donde viven los hermanos y tiene su laboratorio el doctor, pero no encontrará el recibimiento que esperaba.
Detalles de la película
- Titulo Original: The guinea pig 2: Nôtoru Damu no andoroido
- Año: 1989
- Duración: 51
Opciones de descarga disponibles
Si quieres puedes conseguir una copia la película en formato HD y 4K. A continuación te añadimos un listado de posibilidades de descarga activas:
Opinión de la crítica
Película
3.5
79 valoraciones en total
La última y horrenda peli de la saga, que a diferencia de las anteriores no trata de parecer una snuff ni ser una comedieta chunga con gore medio decente. Aquí ya se les fue la pinza y quisieron hacer una peli seria , protagonizada por un enano absolutamente asqueroso que para no distanciarse demasiado de sus antecesoras ejerce de sádico experimentador de torturas, guarreos y pseudo erotismos.
Aparte de fea, carente de gracia y un coñazo en toda regla.
Pero se ve con la felicidad de saber que es la última y no habrá más.
Dios mediante…
Me ha parecido de las menos interesantes de la saga, pese a que el gore es bastante bueno y la historia dentro de lo que cabe, aceptable.
Se hace algo lenta y monótona, la música acompaña esas 2 descripciones perfectamente también.
Bastante sangre, tripas y asco, pero sin mayor interés.
Este sexto mediometraje puso fin a Guinea Pig , que no sería continuada hasta casi treinta años más tardes+ con una versión occidental…
Esta sexta entrega me dio a cada instante la sensación de que es en sí una mirada nostálgica dirigida a las cinco anteriores, porque continuamente hace referencias de las demás y recupera el significado original que tenía Guinea Pig , el de mostrar grotescos experimentos con humanos, torturas y un tono serio, cualidad que se olvidó por completo desde la tercera entrega.
Pinchar y sacar ojos (Guinea Pig 1 y 2), la cabeza sobre la mesa (Guinea Pig 3), la hermosa hermana del protagonista decumbente con enfermedad que empeora gradualmente (Guinea Pig 5), una relación de afecto entre los dos y una historia que gira en torno a ella (Guinea Pig 5), sonidos desagradables de post-producción (Guinea Pig 2), un protagonista particular que en este caso es un enano (Guinea Pig 4), la escena de la muñeca (Guinea Pig 2), los fluidos corporales de distintos colores (Guinea Pig 5), sonido de goteo de agua al principio y al final (Guinea Pig 5), ligeros toques cómicos (Guinea Pig 3 y 4), gore descuidado (Guinea Pig 4), alguien que visita la casa del protagonista sin saber con qué se va a encontrar (Guinea Pig 3)…
Esta sexta entrega está llena de referencias a las anteriores, sólo que aquí están muy mal presentadas. Ese sonido de coles abriéndose, de tela siendo rasgada o de patatas fritas crujientes funcionaba en Guinea Pig 2 porque no se abusaba de ese sonido, hacía que la cinta fuese más perturbadora e incómoda de ver y estaba justificado por el tipo de cortes y amputaciones que llevaba a cabo el asesino experimentador, pero en esta sexta entrega queda fatal y el gore se nota muy descuidado, algo que se perdonaba en la cuarta entrega por ser una comedia absurda, cosa que esta no pretende ser, manteniendo un tono serio hasta el final. Un corte en la lengua, un ojo siendo extraído o un corte en la piel no suena como si estuvieras pisando patatas fritas o rompiendo un trozo de tela, y en general, los efectos de sonido de esta sexta entrega son los más pobres de la saga.
La sangre, en vez de tener ese color marrón rojizo de salsa barbacoa que no quedaba nada mal en las anteriores, tiene un aspecto viscoso, como una especie de moco de color rojo claro, y dice mucho de lo mal que está hecho todo. Las venas y las arterias parecen cables y se nota que la piel es de plástico…
Dura apenas cincuenta y dos minutos pero sentí que quince minutos de metraje sobraban, y más teniendo en cuenta que es más bien poco lo que cuenta este sexto capítulo. Un científico enano que en su afán de curar a su hermana enferma del corazón hace experimentos con personas…¿Qué tienen que ver esos experimentos con la enfermedad de su hermana?, ¿por qué pierde el tiempo con todas esas pruebas tan extrañas si tan solo necesita un corazón nuevo para ella? Los experimentos no están justificados y no se entiende por qué este científico enano los lleva a cabo si lo que realmente quiere es salvar a su hermana.
Se hace muy tediosa la historia, no lleva a ninguna parte y lo único que me motiva para darle el segundo punto es la escena de la cabeza, que no está tan mal y la maquinaria futurista que utiliza el enano para sus experimentos, y nada más que rescatar.
Con todo eso, procedo a dar mi opinión de la saga Guinea Pig , dado que ya he valorado las demás entregas. En orden, de la que más me ha gustado a la que menos, estos serían los resultados con la puntuación que le di a cada una:
1. Guinea Pig 5: Mermaid in the Manhole (8,0).
2. Guinea Pig 2: Flowers of Flesh and Blood (7,0).
3. Guinea Pig: Devils Experiment (5,0).
4. Guinea Pig 4: Devil Woman Doctor (2,0).
5. Guinea Pig 6: Android of Notre Dame (2,0).
6. Guinea Pig: 3: He Never Dies (1,5).
Puntuación media de la saga: 4,25.
En líneas generales, la saga es algo mediocre, con la tercera y la cuarta intentando ser comedias de terror, una primera entrega un poco floja por algunas escenas mal hechas y un capítulo final muy malo, pero si las vemos por separado, la segunda y la quinta son las mejores, especialmente la quinta, que me pareció una obra maestra por todo lo que transmitía, y esa intencionalidad artística, también presente en la segunda.
Sólo recomendaría esas dos y la primera, porque a pesar de que no me convenció del todo, fue la que lo empezó todo con esa estética snuff, y tiene su encanto.
Las otras tres han envejecido muy mal.
Se fue la década de los ochenta y con ella la serie de mediometrajes Guinea Pig. Una serie de films en los que he visto torturas, descuartizamientos, suicidios fallidos, heces que gruñían y tenían dientes, descomposiciones semihumanas… Lo cierto es que lo que suena bizarro en los oídos queda, pues a los ojos estos films han quedado desfasados y han envejecido nefastamente, exceptuando quizá Flowers For Flesh And Blood. Quizá hace casi tres décadas esto podía ser lo más brutal e impresionable a la vista que uno podía echarse, aunque francamente lo dudo, más teniendo en cuenta que ya estaban las tribus caníbales y el ultragore alemán danzando de mano en mano vía underground en muchas ocasiones.
No está de más visualizar estos mediometrajes a modo de curiosidad, por aclarar uno mismo si esa fama que tienen es realmente merecida. Sin embargo si alguien busca más que eso, cómo películas verdaderamente extremas o comedias con toques excesivamente gore, que se aleje sin contemplaciones: aquí hay cinco horas vacías de lo que buscas, amigo.
Hablando de la que nos ocupa, si a cada una de las anteriores le caracterizaba un elemento (arriba mencionados), aquí tenemos lo que serían los restos de todas las anteriores. Android Of Notre Dame es probablemente la que más se esfuerce (inútilmente) en darle un sentido a la trama e incluso dotarla de algo de dramatismo (ambas funcionan regular pero mejor en Mermaid In A Manhole).
Con una falta de presupuesto apreciable, el último conejillo de indias nos cuenta la historia de un enano, científico extraordinario, que tiene una hermana que sufre una enfermedad del corazón mortal… Y así sin tintes, el enano nos muestra su intención de encontrar el eslabón perdido de la evolución para poder curarla… ¡Toma ya! Por supuesto todo este rollo sólo sirve para mostrarnos algún elemento gore (con efectos de sonido pésimos) que refiere otra vez a abrir cuerpos humanos como ya ocurrió en Flowers For Flesh And Blood y He Never Dies. La diferencia en este caso sería que la filmación no es un pseudo-snuff ni un intento de comedia, sino una película que intenta tomarse verdaderamente en serio, lo que resulta bastante soporífero durante todo el metraje.
Seguramente junto con su antecesora más directa, la más pretenciosa. Quizá lo único curioso de la cinta sea las ideas futuristas que imaginaban los guionistas: teléfonos de mesa con luces de neón en su interior y ordenadores gigantes. Por supuesto no falta el momento calentón, en el que hay un tocamiento rápido de un pene erecto por encima de la ropa en primer plano. Y sí, el nivel de pornografía es directamente proporcional a la calidad de la propuesta.