Elige o muere

5 comentarios en «Elige o muere»

1. En un principio la trama de Elige o muere es, al menos, interesante. Y para como está el paronama, hasta original (un vídeojuego retro que toma el control y te obliga a tomar decisiones horribles que se trasladan del juego a la vida real).

   Sin embargo, la película se queda corta pese a su corta duración, con un tiempo de ejecución de las elecciones de los personajes bastante regular, y el guión, por llamarlo de alguna manera, demuestra ser un lastre sin rumbo aparente.

   El dúo principal hace un trabajo decente, pero tampoco salvan un metraje que es casi imposible de superar en una sentada por el tremendo aburrimiento que nos provocará pasada la primera mitad del film.

   Hubiera preferido evitar ver semejante bodrio, pero Netflix me la ha vuelto a jugar.

   Un saludo.

2. Creo que es una película engañosa y digo engañosa porque aunque es cierto que el aroma y el halo que desprende resulta bastante cutre, es una cinta que se trata fiel a si misma.
   
   Tiene un calado muy ochentero, tanto en el mundo de los videojuegos como en los gustos de los personajes, eso me ha gustado y contiene escenas e ideas muy logradas que te mantienen con interés, ver spoiler.
   
   No se trata en lo más mínimo de un slasher al uso, si esperáis sangre o una matanza, olvidaos.
   
   Tiene similitudes con otras películas como Stay Alive del 2006 o Juego mortal del 1994, evidentemente hablando del tema general sobre el mundo de videojuegos mortales, en ésta ocasión el asunto se acerca más a un tratado menos comercial e incluso diría con reminiscencias de cine independiente algo vintage .
   
   El problema sería ver la película como una suerte de Saw , el título y su condición de terror puede llevar a confusión, aquí aplican más el uso de la pérdida y los miedos desde un punto de vista muy independiente, digamos que casi es una rareza y toca temas que pueden estar muy escondidos a simple vista.
   
   A mí no me aburrío en absoluto, es suficientemente hábil para seguir con interés sin que tampoco estés conmovido por un derroche de entretenimiento. Le daría el aprobado simple.
   
   Por último decir que al ver ésta cinta me ha venido a la mente una película bastante disfrutable que sigue éstos menesteres de elige o muere, que aunque nada tiene que ver una y otra, si que mantienen la misma pauta de elegir , que es Would you rather del 2012.

3. Lo dicho. Siento indiferencia. Lo peor es que una parte de mi ya me lo decía antes de darle al Play. Por lo general, película producción Netflix es igual a entretenimiento plano. Cero sorpresa. Ideas sacadas de otras películas. No será la mejor película pero al menos la imagen es en 4K… algo es algo.

   Por supuesto si tienes otra cosa mejor que ver no veas esto. Os recomiendo las películas de Saw. Si te gusta el género gore y no esta bazofia son buenas películas, y parte tienen un buen hilo argumental.

   Para película de miedo Sinister. Mi recomendación es que no la veáis solos.

   Dicho esto mejor que ver el Salvame Deluxe o el First dates. No sorprende pero entretiene. Mi novia suele dormirse en todas las películas. Al menos ésta la ha visto hasta el final.

4. Película británica de terror sobrenatural lanzada directamente para Netflix, que es el primer largometraje del director responsable de cortos como Breathe (2013), y que está protagonizada por Asa Butterfield (El Niño Con el Pijama de Rayas, 2008), y Eddie Marsan (Feedback, 2019), entre otros nombres.

   Una universitaria arruinada decide jugar a un oscuro juego de ordenador de supervivencia de los años 80, en busca de un premio no reclamado de 125.000 dólares. Pero el juego la maldice y se enfrenta a peligrosas decisiones y a retos que alteran su realidad. Tras una serie de momentos inesperadamente aterradores, se da cuenta de que ya no juega por el dinero, sino por su vida.(FilmAffinity)

   La película no consigue desarrollar su trama más allá de una sinopsis interesante pero que llega a resultar hasta ridícula, a lo que se suma una trama incapaz de sorprender al espectador exceptuando alguna muerte. Si bien el uso del gore le da cierta gracia a las muertes, la falta de decisión a la hora de decidir el tono de la película, hace que esto se vea relegado a algún momento contado que no destaca sobre la mediocridad de la película, que sobre entretenida, no es mejor que otros films de terror sobre videojuegos como Brainscan (John Flynn, 1994). Las actuaciones no destacan, con un Asa Butterfield venido a menos con el piloto automático puesto, y una Iola Evans algo más acertada.

   Elige o Muere es, pese a un punto de partida más o menos interesante, una película completamente fallida que no consigue pasar de su propia premisa, y queda como una propuesta insulsa entretenida pero olvidable.

   Nota personal 5/10

5. Hay un juego maldito, fabricado en 1984 y cuya recompensa para el ganador aún no ha sido reclamada. La prota tiene problemas económicos…así que listo el pollo, cocinada la trama de la peli.

   La idea no es nueva, de hecho se han realizado decenas de pelis similares bajo esta premisa. Para el caso que nos ocupa, el guión parte de una idea que no le pertenece y, para colmo, tampoco sabe muy bien como ejecutarla. Sabe detenerse con gancho en las situaciones truculentas que el juego propone, pero luego se olvida, o no sabe, o no le importa armar un contexto como para que la cosa no se sienta tan arbitraria.

   1.La prota tiene un rollo personal con su hermana que no viene a cuento. A su vez tiene problemas con su madre y un tío abusador que parecen sacados de otra peli.

   2. El juego interactúa con la realidad, bajo el poder de la maldición. Eso es todo. No esperemos que nos quieran explicar lo que al mismo guión no parece importarle demasiado. Para ésto se diseña una estética de filtración virtual en donde se producen cortes bruscos de tipo informático sobre la realidad de las víctimas. El resultado visual es bastante cutre y los efectos sonoros aturden de tanta estática. El terror aparece por momentos y de casualidad, manejándose la trama dentro de tonos más propios del thriller.

   Finalmente, se ofrece una explicación para todo lo que ocurre y, oh sorpresa, también suena a refritura mal recalentada.