Dos hombres y medio (Serie de TV)
Sinopsis de la película
Serie de TV (2003-2015). 12 temporadas. 262 episodios. Charlie Harper (Charlie Sheen) es un soltero con dinero que tiene una casa en la playa y gran éxito con las mujeres. Pero su informal estilo de vida en Malibú se ve bruscamente interrumpido cuando su hermano Alan (Jon Cryer), muy deprimido por su divorcio, y su hijo Jake (Angus T. Jones), llegan para quedarse a vivir con él. La situación se complica aún más gracias a Evelyn (Holland Taylor), la egocéntrica y controladora madre de Charlie y Alan y a la mujer de Alan (Marin Hinkle), de la que se está separando y que posiblemente sea lesbiana. Además, está Berta (Conchata Ferrell), la dominante ama de llaves de Charlie. A pesar de la complejidad de sus vidas y de sus tensas relaciones, Charlie y Alan tienen una cosa en común: adoran a Jake y quieren lo mejor para él.
Detalles de la película
- Titulo Original: Two and a Half Men (TV Series)
- Año: 2003
- Duración: 30
Opciones de descarga disponibles
Si lo deseas puedes conseguir una copia de esta película en formato 4K y HD. A continuación te citamos un listado de opciones de descarga directa activas:
Opinión de la crítica
6.1
85 valoraciones en total
Pais
Directores
Actores
- Aja Evans
- Amber Tamblyn
- Angus T. Jones
- April Bowlby
- Ashton Kutcher
- Charlie Sheen
- Clark Duke
- Conchata Ferrell
- Courtney Thorne-Smith
- Denise Richards
- Emmanuelle Vaugier
- Gail OGrady
- Graham Patrick Martin
- Holland Taylor
- J.D. Walsh
- Jane Lynch
- Jennifer Taylor
- Jenny McCarthy
- Jodi Lyn OKeefe
- Jon Cryer
- Judy Greer
- Katherine LaNasa
- Kelly Stables
- Liz Vassey
- Marin Hinkle
- Melanie Lynskey
- Mimi Rogers
- Rebecca McFarland
- Ryan Stiles
- Sophie Winkleman
- Tricia Helfer
Hola soy un gran seguidor de dos hombres y medio desde que empezó. La novena temporada es algo intragable ya que anteriores temporadas, la serie si tenía sentido. Charlie Harper era un hombre con excesos con mucho odio contra la madre, el hermano, jake. Hoy en día la serie ya no tiene sentido con Walden ya que ni Jake es medio ni esta ese mutuo odio entre hermanos que hacía que la serie tuviera ese sentido hoy en día la serie esta acabada. Lorre intenta hacer que la serie funcione, pero esta grandiosa serie ya no se levanta de este gran escalón.
Sin que tenga un gran aprecio por la producción televisiva ni por las series en su conjunto sí que me gustaría recomendar esta modesta teleserie norteamericana que recupera la esencia de las mismas, algo que se ha ido perdiendo con el tiempo.
Últimamente estamos viendo como triunfan series con estética y presupuestos cinematográficos que para mi gusto son simples sucedáneos de cangrejos que no hacen más que confirmar que estamos en la era de la Game Boy. Por eso cuando se encuentra una serie que vuelve a intentar ser lo que son este tipo de producciones se agradece.
Creo que es de las mejores series de comedias ya que se aleja de las modas de crímenes, ciencia-ficción o médicos salvavidas que tanto pululan por la caja tonta.
La serie tiene unos guiones desarrollados con un gran valor y pericia en los diálogos muy mordaces y con unas interpretaciones de Charlie Sheen –que tiene un especial talento para la comedia gamberra- y Jon Cryer –un clásico del humor que ya vimos en la estupenda Hot Shots que recuperan el sentido actoral más cercano al teatro que al cine que es lo que pido a una serie de televisión.
Se lo van a pasar muy bien.
Nota: 6,9
La he visto algunos días con espíritu abierto porque sé la buena fama que arrastra. Pero no me acaba de hacer gracia. No puedo empatizar ni con los personajes ni con las líneas de guión. Pretende ser humor inteligente para todos los públicos, lo que no deja de ser algo contradictorio. Tiene ese regusto grasiento, viscoso, de pícaros y serios. Los pícaros traen mujeres a casa, los serios leen el periódico. Ya está. No son viciosos y depresivos. No son timadores y víctimas. No toman drogas recreativas y drogas de farmacia. No. Los malos sólo son molestos. Las discusiones son desencuentros. Las juergas no tienen resaca. Lo emotivo se queda en entrañable. Es América acolchada.
Carece de ironía o un punto de vista rebelde, no hay un giro. No hay verdadera provocación ni revela nada: no hay humor de verdad. Los chistes burros sólo son chistes verdes de púber de doce años. Es tan políticamente correcto que asusta. Creo que es una serie apoyada por los Iluminatti. O debe ser porque hay un niño de por medio y con los niños no hay que hacer experimentos. Son hermanos, son heterosexuales. Viven juntos por un azar del destino. El guapo triunfa y el feo come mierda. No piensen más.
Me da pereza desde que veo los spots de la televisión, pasando por la cabecera de la serie. Tiene algo almidonado, forzado. Esas sonrisas, esas poses de cartón piedra. Esa musiquita marchosa de ambiente de hipermercado. Los planos que se alargan para insertar risas enlatadas, las escenas con secundarios al fondo simulando conversaciones neutras, los extras que están como convidados de piedra sólo para soltar una oportuna línea de diálogo, la forma en cómo los personajes entran y salen de manera teatral en el mal sentido del término teatral , la impresión de que todos los capítulos mantienen el mismo ritual rígido. Es como si ya no ilusiona a nadie de los que trabajan en la serie pero aguantan porque les da de comer.
Hay una palabra que expresa el grado mínimo de transgresión que creo que le va muy bien a esta serie. Es una serie canalla .
Ay, qué canalla eres, Charlie…
Una serie genial y aconsejable. Los que no la vean, otórguenla una oportunidad, veinte o treinta capítulos será suficiente, luego no querrán dejarla. Puedo afirmar que igual es la mejor sitcom que he visto, no me pierdo un capítulo e incluso los veo repetidos.
¿Qué es perder el tiempo? Pienso que no. No sé qué es lo que pide el público en una serie de humor americana, ésta es ingeniosa, posee un ejercicio altísimo de inteligencia, el necesario para el desarrollo de tantas chorradas entre esos dos hermanos, y en el spoiler lo explico. Los personajes pueden caer bien o no, pero justo lo que se dice inteligentes no hay ni uno, de ahí el mérito de los guionistas para conectar con espectadores inteligentes. Berta por ejemplo, la criada, no es inteligente, lo que pasa es que es astuta como una zorra y pega unos cortes que te cagas. Rose que es la vecina, tiene manía persecutoria por Charlie, lo que la convierte en una verdadera acosadora y conspiradora (cuando venga Walden y ya no esté Charlie irá a por él también), y Evelyn, la madre de Charlie y Alan, es una depredadora egoísta siempre actuando por el interés. Estas tres mujeres son de la plantilla.
El niño, Jake, hijo de Alan, es un pedorro sin ambages y crece a lo largo de la serie de pedorro a la edad del pavo de pocas luces, no se salva, sin etapa intermedia. Alan, el hermano, a veces pienso que es el verdadero protagonista, que lo es, disfrutas con sus sufrimientos, te ríes de sus desgracias, vive una humillación continua porque no tiene a dónde ir y encima es víctima de un divorcio de lo más desgraciado, así que no le queda otra que vivir con su hermano. Es muy fuerte lo que debe soportar. Y encima con ese aire tan digno y repipi… Te mondas.
No hay que echarse para atrás a la primera, insistir es la clave. Hay clase, estilo. Las sucesivas mujeres que aparecen a lo largo de la serie son porque están coladitas por Charlie, a pesar que puedan ser mujeres inteligentes caen en sus redes pero él no quiere compromisos de ningún tipo. No son mujeres floreros ornamentales con patas, con piernazas, perdón, son la base de los capítulos y sí, puede que lo sean en plan prosaico, pero te alegrarán la vista muy en plan prosaico que siempre es lo mejor.
Ahora bien, si buscas el adoctrinamiento habitual con que nos tienen acostumbrados los tiempos que vivimos, aquí no hay mensajes, ni profundidad, ni otro tipo de conceptos que eleven el espíritu, es una sitcom modelo.
Aconsejo vivamente la serie. No hay que temer envidiar a Charlie, si eso te preocupa, yo ya soy hombre de una sola mujer para siempre y no le tengo envidia por muchas tías que se enrolle, y encima me parto con él y con el tonto de su hermano.
Two and a Half Men sigue el formato de una sitcom clásica: A y B son opuestos pero conviven dentro de un mismo espacio, con un nexo, C, que los une.
Dentro de este formalismo, es interesante cómo logran entretener los ingeniosos diálogos que postula la serie. Y es de destacar algo: lo oportuno que es cada personaje en el rol que desarrolla su historia… La madre de ellos, Rose, la empleada doméstica juegan dentro de la red que es esta brillante serie.
No es lo mejor que se ha visto, pero no pretende serlo.
Pretende simplemente divertir.
Lo logra con creces.