Color de piel: miel
Sinopsis de la película
Cuenta la historia de Jung, niño abandonado tras la guerra de Corea, desde que una familia belga le adopta hasta que decide volver a su país natal, décadas después de dejarlo, y reconciliarse con su cultura. Adaptación de la novela gráfica Piel color miel, la historia alterna puntos de vista externos e internos a Jung a la vez que salta de la imagen real a la animación, inyectando al espectador no sólo de los mismos recuerdos que Jung tiene, sino de su forma de recordarlos.
Detalles de la película
- Titulo Original: Couleur de peau: Miel (Approved for Adoption)
- Año: 2012
- Duración: 75
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Opinión de la crítica
Película
6.7
30 valoraciones en total
Interesante película de animación para adultos, mezcla dibujo animado (de muy buena calidad) con imágenes reales.
Es la historia real (autobiográfica) del pequeño Jung, un niño coreano que por culpa de la guerra es abandonado por sus padres. Al principio intentará subsistir comiendo basura, hasta que la policía lo lleva a un orfanato. Una vez allí Jung es adoptado por una familia belga.
Jung con su nueva familia no termina de adaptarse, desconfía de todo y es bastante travieso. Además su nueva familia adopta a otra niña, a la que llaman Valerie y eso provoca en Jung celos. Lo único que a Jung le interesa es dibujar, así que se dedica a dibujar dejando libre toda su imaginación. Jung quedará fascinado sobre todo por la cultura nipona. Aquí empieza esta curiosa película de animación.
En Corea del sur, nacieron bastantes niños de soldados americanos y mujeres coreanas, que después nadie del país quería adoptar. Tras la guerra algunos niños tuvieron la suerte de ser adoptados por familias occidentales. La película plantea el problema común de las personas que se han visto desplazadas de su país de origen: cuando él viaja a Corea, ya adulto, se siente un extraño, pues su hogar es Bélgica, donde se crió. En Corea lo ve todo diferente, no acaba de verlo como su país y se siente como un extranjero.
Color de piel: miel es una emotiva y estupenda película de animación, que mezclando imágenes reales con una atractiva animación, y en clave semidocumental, cuenta la historia personal de su co-director, el coreano Jung, quien fue adoptado por una familia belga, como tantos otros niños de su país, en la década de los 70.
El pequeño huérfano Jung es adoptado por una familia belga que cuenta ya con varios hijos biológicos. A pesar de sentirse querido en ella, pronto empezará a ser consciente de estar en una cultura muy diferente a la suya y a tener dudas sobre su integración y su indisimulable diferencia racial.
Con inteligencia, encanto y mucha humanidad, la película va desarrollando la historia personal de Jung durante su infancia y adolescencia, en una adaptación de la propia novela gráfica que este mismo creó para contar su periplo vital y conseguir buscar su identidad.
Couleur de peau: Miel es un trabajo autobiográfico que nos cuenta la historia de un coreano adoptado por una familia belga y que explora su incapacidad de sentirse parte de su ciudad, sin un pasado al que aferrarse y unas raices a las que acudir. Dirigida por el propio protagonista (Jung) y Laurent Boileau, basandose en el trabajo del primero (una novela gráfica de cierto prestigio), en el filme se dan cita numerosas técnicas y estilos sin que se consiga que la mezcla funcione más allá de la eficiencia.
La animación tradicional para secuencias más íntimas u oníricas, que bien parecen sacadas directamente de la novela gráfica (siendo claramente lo mejor del film) es tristemente escasa, dando paso a la tónica dominante: un espantoso 3D que no podría estar peor hecho ni aposta. La película no va sobrada de medios pero para hacer esto sería mejor hacer un documental estandar (imagen real). Al menos ese es el pensamiento que queda hasta que se ve cómo Jung, en esa búsqueda de unas raices, inserta en el film secuencias rodadas en la actualidad y que no aportan absolutamente nada, que como idea o concepto están bien pero que han sido metidas con calzador. Mejor funcionan las grabaciones de archivo, películas Super 8 familiares que ayudan a comprender mejor sus vivencias. Al final lo que queda es un trabajo con potencial, que tiene todo lo que necesita para tener vigor pero al que también le sobra muchísimo… un remontaje que redujera su duración a los 50-60 minutos, quitando todo lo innecesario, le haría muchísimo bien. La idea sería la misma y la concreción le ayudaría a llegar incluso más lejos.
Visto en el Festival de Gijón, donde competía en la sección oficial y en Animaficx, dedicada a largometrajes animados, fue justamente ahí donde apareció un trabajo similar en concepto pero que hace las cosas infinitamente mejor: Crulic , del que podéis leer la crítica a continuación: http://www.filmaffinity.com/es/review/17597648.html