Solomon Kane

5 comentarios en «Solomon Kane»

1. Fantasía, entretenimiento, y película que nos recuerda a las de espada y brujería de antaño, pero revestida con algunas pinceladas actuales.
   
   Y en este último punto donde pincha , ya que hay tramos que nos recuerdan mucho a otras películas recientes como El señor de los anillo , o Underworld .
   
   Se agradece no obstante, el intento de huir de esta tónica actual (que repiten tantas películas de hoy en día), por una historia y desarrollo más como he dicho de corte clásico , e incluso ochentero podríamos decir (salvando la distancia en la época del boom de películas como El señor de las bestias , y todos los sucedáneos, herederos de Conan, aunque eso sí se agradece la época donde está ambientado Salomon Kane, ya que le da un aire fresco).
   
   En resumen, me ha gustado, por que es muy entretenida, es una película que en su gran mayoría está hecha a la vieja usanza, teniendo mucha fantasía, un personaje interesante, y unos buenos actores, aunque en éste sea el segundo punto negativo, ya que tiene por un lado buenísimos actores (como Max Von Sydow), pero poco aprovechados, y por otro un actor principal que nos recuerda demasiado a Hugh Jackman, y por tanto nos saca un poco del film.
   
   Lo bueno:
   
   – Una historia de capa, espada y brujería
   
   – Entretenida
   
   – Desarrollo que recuerda en cierto aspecto a las películas ochenteras de aventuras.
   
   Lo malo:
   
   – Actores buenos desaprovechados
   
   – El tremendo parecido de James Purefoy a Hugh Jackman, no sólo físico sinio también actuando, lo que descoloca un poco.
   
   – Algunos detalles que nos pueden recordar a películas recientes como El señor de los anillos o underworld (por poner unos ejemplos), aunque no son tantos detalles como uno podría esperar.
   
   – La falta de algo , un no sé qué , que no la hace grande a la película, quedándose en entretenida (y sigo pensando qué es lo que falla…)

2. Esta película me ha aportado todo lo que me esperaba de ella: lucha, paisajes increíbles, un protagonista carismático, una historia sobrenatural y todo rodado con una factura impecable done destaca la fotografía y una banda sonora perfectamente acoplada al conjunto. No entiendo que se critique el hecho de que no aporta nada nuevo. Eso significa que no es buena? en absoluto. Es verdad que bebe de muchas otras películas y que seguramente no pasará a la historia del cine como una obra destacada en su categoría, pero lo cierto es que durante las casi dos horas que dura el metraje disfruté como un enano y me dejé llevar por la magia de las imágenes. La gente se debe pensar que hacer una película así es fácil, que con presupuesto todo es posible, pero de vez en cuando es bueno quedarse a ver los títulos de crédito y darse cuenta que detrás de un proyecto como este hay el trabajo de muchísimas personas que lo han hecho posible, y conseguir que el talento de tanta gente esté bien dirigido y estructurado no es nada fácil.
   
   Si queréis pasar un buen rato entretenido y transportaros a un mundo mágico os recomiendo la película. Si lo que buscáis es el nuevo señor de los anillos o el eslabón perdido del cine épico, entonces seguid esperando, porque éste no es el caso, y tampoco pretende serlo.

3. Seguro que si vamos a nuestro restaurante favorito, y siempre nos ponen la misma comida que nos encanta. Con el tiempo perderá el encanto. Nos iremos a otro o cambiaremos de menú.
   
   Pues el cine se está convirtiendo en un gran restaurante y las películas en el plato que tanto nos gusta. ¿ El problema ? Pues que nos están saturando con lo mismo de siempre y ya termina por desviar nuestra atención.
   
   Salomon Kane es a pesar de la nota tan baja que tiene… una gran película de aventuras ambientada en la época medieval. ¿ Su problema ? Que todo lo que ofrece ya lo hemos visto, y que bebe de fuentes de muchas pelis conocidas. Es cuestión de fijarse un poco. ( ver spoiler 1 )
   
   Sin embargo, la propuesta es muy atractiva. Magia, sangre, espadas… pólvora. Desde Rusia nos llega fantasía arropada por la mugre y la oscuridad, y no le sienta nada mal. Michael Basset es el responsable de dirigir esta epopeya que narra las aventuras de Solomon Kane, un personaje creado por Robert E.Howard,y cuyas andanzas se publicaron, en su mayor parte, a primeros del siglo pasado en el magazine de corte pulp Weird Tales.
   
   Kane, interpretado para la ocasión por James Purefoy, es un personaje carismático de naturaleza errante, acostumbrado a combatir al diablo en sus múltiples formas, desde las junglas de África, hasta los bosques de Europa. Algo que le da mucha vida a la historia, es el cambio de actitud del personaje. Un ser cruel y violento, pasa a buscar la redención, para poder liberar su alma de las garras de la Guadaña del Diablo. Esta transformación la veremos desde sus inicios y el cambio radical al que se enfrenta. Pero como dice el dicho: La cabra siempre tira al monte .
   
   Lo dicho, película muy entretenida y con gran dosis de terror y oscuridad. La ambientación en exteriores fríos, neblina y nieve son perfectos para el devenir de la historia. Y el vestuario, digno de resaltar.

4. Comienza la película y tras una buena introducción, un tanto espectacular de unos 2 minutos, se cae en el vacío más absoluto. A partir de ese momento el espectador espera durante una larga hora y media a que suceda algo sin que llegue dicho momento.
   
   La historia en sí parece que tiene juego , pero tras una hora de tediosa espera nos damos cuenta de que la historia no va a explotar, no va a sorprender y no va a dar ningún giro inesperado.
   
   En cuanto a las escenas de acción (algo que esperas ansioso en un película que te venden en el trailer a base de espadazos), dos apuntes: ESCASAS y CONFUSAS. En primer lugar hay apenas 4 escenas de lucha en toda la película de apenas 2 minutos de duración y en segundo lugar siempre te quedas con la sensación de no entender de qué ha muerto el malo.
   
   Sobre el final hay que decir que es cutre, cogido por los pelos, ridículo y fugaz. Algo que acaba de rematar lo que es una muy mala película.
   
   En definitiva, es imposible no sentirse engañado al salir del cine después de esperar algo tras ver el trailer. La doy un 2 porque la secuencia de apertura de la película no está del todo mal y hace que mantengas la esperanza a lo largo de la hora y media de duración del film, cosa que el espectador necesitará seguro para poder tragarse semejante bazofia.

5. Solomon Kane es la adaptación a la gran pantalla del personaje nacido de la prolífica imaginación de Robert E. Howard (autor también de Conan, Kull y Red Sonja).
   
   En la Inglaterra del siglo XVI, Solomon Kane es un sanguinario asesino que libra guerras por todo el mundo en nombre de su país. Una maldición le persigue desde que saqueó un castillo en el norte de África, así que decide redimirse de sus pecados y consagrarse a la vida espiritual. Sin embargo, cuando unos guerreros dirigidos por un enigmático jinete enmascarado asesinan a unos peregrinos que se dirigen hacia el Nuevo Mundo y raptan a su hija, Kane volverá a las armas, convertido en un vengador contra las fuerzas del mal.
   
   La película es un cúmulo de tópicos, por no decir despropósitos, mil veces visto en una pantalla (la escena de la crucifixión es vergonzosa). El guión es previsible y muy caprichoso, estando resueltas las escenas de forma precipitada y en la mayoría de los casos sin sentido dramático, lo cual impide tener la más mínima empatía por los personajes que vemos (personajes, todo hay que decirlo, interpretados sin el más mínimo brillo por parte de nadie). La realización abusa de efectos digitales (y teniendo un presupuesto limitado el film, acorde a las series B) es más un lastre que otra cosa. El final que debería haber sido un combate espectacular entre Kane y las Fuerzas del Mal queda en una mera lucha de videojuego.
   
   Lo único destacable es la fotografía de Dan Laustsen y la dirección artística de la película que muestran una Inglaterra medieval completamente irreal, azotada por la pobreza, la anarquía y la brujería, sumida en un perpetuo y opresivo invierno donde la lluvia nunca cesa.
   
   En resumidas cuentas, una desangelada y aburrida adaptación de los relatos de espada y brujería en un mundo salvaje y violento imaginado por Robert Howard, que debería haber dado cuanto menos para una entretenida película con un Solomon Kane perdurable en el recuerdo.