Profanadores de tumbas
Sinopsis de la película
La noche de tres viejos amigos acaba en borrachera. Debido a su estado, los tres leen extraños versos y bailan encima de unas tumbas. Lo que no saben es que acaban de desencadenar una maldición y los espíritus de los allí enterrados buscarán venganza.
Detalles de la película
- Titulo Original: The Gravedancers aka
- Año: 2006
- Duración: 95
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Opinión de la crítica
Película
4
65 valoraciones en total
Antes de ver esta película pensé que me iba a encontrar con una basura, una de esas que se hacen por hacer, que llegan directas al videoclub y que después de verla te apenas de haberte gastado el dinero. Sin embargo, me llevé una grata sorpresa.
Puede que Los profanadores de tumbas tenga una historia bastante simple, pero al menos trata de innovar dentro de un género en el que cada vez más predominan las secuelas, precuelas y remakes. A mí me ha resultado amena, interesante y muy entretenida.
Las actuaciones, excepto alguna malísima (vease la rubia protagonista, todo el rato muy sobreactuado), están bastante bien, y los efectos son buenos. Además, la peli cuenta con numerosos, sustos algunos bastante buenos, y puede llegas a acojonar.
En conclusión, de lo mejor que ha salido directo a DVD últimamente, recomendable para los amantes del género…!
Empieza bien, su nudo es entretenido, y cada vez hay más tensión. Incluso puede llegar a asustar a los más neófitos en el tema.
Por otra parte, cada vez que veo a Dominic Purcell, sólo puedo pensar en una película mala de acción, y eso quizás le resta puntos a un filme de terror (y es que este tipo no es nada serio, cara de palo y cada vez más cuadrado).
Las manifestaciones (no olvidemos que se trata de una película sobre fantasmas), son realmente buenas. Pueden llegar a dar miedo, o a pensar que el espectro se encuentre detrás de ti.
Pero el final… Al final se fastidia todo. Y como decía Maira Gomez Kent. -Hasta aquí puedo leer.
Tras un brutal arranque en el que vemos a una mujer salvajemente atacada por un ente invisible, la acción salta un año después mostrándonos en el entierro de Devin, a Allison (Clare Kramer) y Harris (Dominic Purcell, el hermano de Michael en Prison Break) que son pareja, que están en compañía de Kira (Josie Maran) en el acto fúnebre, los cuales, junto a Sid (Marcus Thomas) que no ha acudido al entierro, eran compañeros e inseparables amigos desde la universidad, del difunto.
Tras el entierro, Harris, Kyra y Sid salen a tomarla y en plena subida etílica a Sid se le ocurre que deberían ir a honrar al difunto a su tumba para despedirse de este como es debido.
Una vez en el cementerio, Sid encuentra una nota en la tumba de Devin y no se le ocurre otra cosa que subirse a una lapida y recitar en voz alta el inquietante contenido de esta, tras lo cual y en plena borrachera se pone a bailar sobre las tumbas.
A partir de aquí y con los amigos ya en sus respectivos domicilios sufriendo toda clase de putadas paranormales y con la entrada en escena de una pareja de investigadores de lo psíquico que han sido llamadas por Sid en repuesta a un anuncio puesto por estos solicitando entes, fantasmas o cualquier cosa paranormal y ofreciendo una recompensa al sujeto o sujetos puteados y las conclusiones que estos sacan de que según una antigua leyenda han despertado a tres malos espíritus (uno por cabeza y muy chungos, dado que el baile de marras fue en la zona donde enterraban a indeseables y gentes de mal vivir) y que en un mes, o palman o aquí no ha pasado nada, ya tenemos montado el lio del montepío.
A pesar de la justitos que están los actores (incluido Dominic Purcell), lo delirante del guion, lo atrabilado de la trama y lo poco apropiado de la fotografía (una cosa es que sea luna llena y otra que prácticamente todas las escenas del cementerio luzcan tan claras), resulta entretenida, en base a lo resultón de enterrar y desenterrar cadáveres, algún toque de humor (los cazafantasmas y Sid), las escenas de los espíritus en acción, la traca final (con una escena que recuerda a Woody Allen intentando un atropello por el interior de una vivienda en Toma el dinero y corre) y el final a lo Historias de la cripta.
No puedo realmente entender como se puede hacer una pelicula tan mala sin que al director, a los actores, al guionista, a los camarografos, etc etc etc no les de verguenza. Puedo perdonar los efectos especiales tan pobres y ridiculos, propios de una peli de los 80 o de una produccion de bajo presupuesto, ya que no todos cuentan con las paladas de dinero de las grandes productoras de cine. ¿Pero esas actuaciones tan malas???? ¿Y esa trama tan absurda que me ha llevado de la certeza de estar viendo una peli comica a una de terror, ida y vuelta mil veces? Eso si que no se justifica. Buenas actuaciones no requieren mas dinero, estoy convencido que hay millares de chicos en escuelas de actuacion que pagarian ellos mismos por salir en una peli y al menos uno de ellos puede hacer un trabajo respetable. Y una trama, un guion interesante, tampoco requiere millones de dolares. Es suficiente con ponerle buena voluntad y estrujarse los sesos y no toda esa continuidad de situaciones e ideas trilladas hasta el cansancio.
Viendo pelis como esta no puedo evitar pensar que el cine ultimamente da un paso adelante y tres o cuatro hacia atras. ¿Sera como dicen algunos que ya es imposible hacer algo nuevo, algo que no se haya hecho antes? Lo dudo, lo que esta sucediendo es que el deseo descontrolado de robar dinero a carretilladas se esta imponiendo al buen gusto. Es eso, y nada mas.
Fue nominada a una de las mejores pelis de cine independiente de terror en el 2006, y hay cierta razón en ello. Es rarísima, por un lado refleja el rostro más cutre y facilón del terror fantasmagórico, fantasmas a pura careta y maquillaje que suben y bajan, tienen fuerza superior a la humana y, por supuesto, son malos pues han sido erróneamente invocados. La historia no innova en nada, es previsible y gradualmente va potenciando su propia desfachatez.
Pero por otro lado el maquillaje está logrado: fantasmas con sonrisas de oreja a oreja que no dan miedo necesariamente y sin embargo impresionan. El montaje parece que fuera aprendiendo de sus propios errores en mitad de la cinta, al principio es descuidado y luego se va puliendo hasta alcanzar unos niveles de discresión que no logran jamás que la veas con seriedad, pero sí que no puedas dejar de verla.
Toma los elementos clásicos y directamente los vierte sin verguenza, pero con cierto oficio. Es una película del montón, y no obstante meritoria.